Sin duda, uno de los cineastas que no podía faltar a esta 66ª edición de la Seminci de Valladolid era Robert Guédiguian. El cineasta marsellés competía por quinta vez en la Sección Oficial con 'Mali Twist', drama histórico que relata un amor imposible durante los años 60 en Mali, en un momento en el que el país vivía una serie de cambios históricos que definieron su porvenir. Con su filme, el realizador busca retratar cómo Occidente no debió colonizar África. "Si estos países jamás hubieran sido colonizados, no padecerían los males que tienen actualmente", defiende.
La sinopsis oficial de 'Mali Twist', titulada originalmente en francés como 'Twist à Bamako', es esta: "Mali, año 1960. Los jóvenes de Bamako bailan el twist al ritmo del rock and roll recién importado de Occidente y sueñan con el cambio político. Samba, un joven socialista, se enamora de Lara, una muchacha de carácter vivaz, durante una de sus misiones en la selva. Para escapar de un matrimonio forzoso, ella huye en secreto con él a la ciudad. Pero el esposo de Lara no lo permitirá y, además, la Revolución no tardará en proporcionarles dolorosas desilusiones mientras se empeñan en soñar con un futuro compartido entre los dos".
Para Guédiguian, habituado a narrar historias ambientadas en el presente, supuso un reto cinematográfico, pues salía de su clásico escenario en Marsella para embarcarse en la tarea de reproducir cinematográficamente al Mali de los 60. "Vi una exposición de fotografía de Malick Sidibé, un fotógrafo maliense de esos años, que hizo fotos, muchas, en los clubes de esa época, en las discotecas o en la playa también con los jóvenes. Digamos que es el fotógrafo de la juventud de ese momento", comienza explicando en una entrevista para eCartelera durante el certamen en Valladolid.
"¿Por qué las revoluciones no duran?"
"Esas imágenes en blanco y negro me intrigaron mucho, porque eran jóvenes muy apuestos y llenos de energía, disfrutaban mucho de la vida, vestían trajes extravagantes. Era una especie de carnaval, podría decirse", agrega, quien considera que el socialismo falló a esta generación que venía con ideas renovadas, mucha energía y ganas de un cambio real.
"Me comencé a informar y nos dimos cuenta que pertenecía a un momento muy concreto de la historia de Mali, cuando el expresidente Madibo Keïta intentó buscar un camino socialista en la independencia para el país, una vía colectivista. Se posicionó del lado de Vietnam, de los kibutz israelíes, intentó promulgar un socialismo común y surgió en mí una preocupación. ¿Por qué las revoluciones no duran? ¿Por qué terminan mal a menudo?", plantea.
Y es aquí donde Guédiguian, el cual defiende los ideales del socialismo en la actualidad, pone énfasis cómo los ideales políticos olvidaron la cultura y las relaciones sociales. "Creo que una de las hipótesis que desarrollo, es el socialismo siempre se opone a la fiesta, a pasarlo bien; parece estar al lado de la razón, el rigor, de la austeridad, del trabajo. Está muy bien, desde luego, pero no veo por qué no podría hacerse todo esto con sensualidad, con baile, con sonrisas, con música, con alegría, en realidad", argumenta.
La Guerra Fría y su influencia en la descolonización de África y Asia
"Creo que desde hace siglo y medio, desde el primer teórico del socialismo, hemos disminuido los aspectos morales y populares. Siempre se mira por la economía, por las instituciones, la explotación de los trabajos, pero el socialismo no debería ser solo eso, incluso para los primeros teóricos, era una revolución general, de un modo de vida incluso", continúa y destaca que los primeros teóricos buscaban también aires de renovación que quedaron enterrados en el olvido.
"Los textos de Engels y Marx hablaban sobre la condición de la mujer y cómo esta debía mejorar. Incluso, en los inicios de la Revolución Rusa, muchos de sus teóricos e intelectuales eran mujeres. Son hechos que hemos olvidado y que me apetecía iluminar y esclarecer. Por eso, Mali encajaba en mi preocupación actual", manifiesta. Por otro lado, para el realizador, es una obra que habla sobre su juventud. "Parece extraño, pero es mi película más autobiográfica. En muchos aspectos, Samba soy yo cuando era joven", desvela.
Y es ahí donde Guédiguian busca dejar en evidencia cómo la Guerra Fría truncó varios de los ideales de los países que emergían de las descolonización. "Lo que pasó fue que la Guerra Fría fue más guerra de lo que aparenta. En este período histórico fue cuando surgieron las independencias de las antiguas colonias de África y Asia. Cualquier país para sobrevivir, si abandonaba el capitalismo, solo podía girarse al bloque soviético, con todas las consecuencias que eso conllevaba", expone.
"Occidente debe dejar en paz a sus antiguas colonias"
"En el momento que lograbas la independencia, te sometías a otra potencia. Se dieron cuenta, demasiado tarde, que la política de la URSS era otro tipo de imperialismo. Siempre defendieron más sus intereses que de aquellos que creían en los ideales del socialismo", añade y señala que él considera el socialismo "como un sueño, un bello anhelo", pero que es consciente de la dura realidad a la que se enfrenta. "El socialismo nunca llega, siempre está en eterna construcción. El mundo es difícil, hay que encontrar la manera de no olvidar ese sueño", exclama.
Para Guédiguian, la situación actual, en la que varios países de África han sido invadidos por el terrorismo islámico y la represión yihadista, es consecuencia directa de la colonización. "Es una hipótesis y al serla, quise plasmarla. Planteo que si esos países jamás se hubieran colonizado, no estarían en ese estado. No creo que la colonización ayudase a esos países a existir, nadie sabe cómo se hubieran desarrollado de no haber sido territorios conquistados", manifiesta y deja claro que "Occidente debe dejar en paz" tanto a África como a Asia. "A veces Occidente interviene, pero creo que no debería, al menos militarmente, solo humanitariamente, pues la ayuda militar siempre es interesada", denuncia.
"Senegal tiene una industria audiovisual muy prometedora"
'Mali Twist' es una coproducción internacional entre Francia, Canadá, Italia y Senegal. Precisamente, en el país africano fue donde tuvo lugar buena parte del rodaje, teniéndose que recrear al Mali de los 60. Para el cineasta, fue "una experiencia maravillosa" que le hizo "valorar una industria emergente que promete". "Antes de rodar la película, no conocía nada sobre la industria audiovisual en Senegal. No sabía que encontraría tanta profesionalidad, me quedé atónico. Fue un sueño que se hizo realidad, son gente muy profesional, había mucho material y, sobre todo, había entusiasmo y energía", revela.
"De hecho, hemos decidido doblar la película al wólof y al bambara, para acercar la película a su público, para que puedan verla y entenderla. Si no se doblase, solo la verían los intelectuales", destaca.
Dirigida por Robert Guédiguian y escrita por este junto con Gilles Taurand, 'Mali Twist' está protagonizada por Stéphane Bak, Alicia da Luz Gomes, Dioucounda Koma, Isaka Sawadogo, Saabo Balde, Ahmed Drame, Bakary Diombera, Ben Sultan y Alassane Gueye. Su estreno en cines está previsto para el 8 de julio de 2022 y su distribución en España corre a cargo de Caramel Films.
