Entrevistamos a Silvia Abril, que estrena 'Vulcania' el viernes 4 de marzo. Se trata de la ópera prima del director José Skaf, y con ella, la indiscutible musa de Javier Ruiz Caldera da el salto al drama.
Tiene un pequeño personaje, pero muy intenso. ¿Cómo ha sido para Silvia estar callada durante el rodaje? ¿Le han llamado ya para Superlópez?
eCartelera: ¿Qué fue lo que te llamó la atención del proyecto?
Silva Abril: Mira, me llamó la mezcla de géneros. Yo cuando me leí el guión, no me pude desenganchar. ¿Sabes cuando coges un libro y no puedes parar hasta que lo acabas? Pues me pasó con el guión de 'Vulcania', que empecé y yo tenía que saber cómo acababa. Piensa que mezcla el cine fantástico, el drama... A mí me tuvo enganchada la lectura de principio a fin, de hecho me lo leí en una misma noche.
EC: Cuando vi la película, pensé, será ciencia ficción, pero luego me di cuenta de que es como una mezcla de géneros. ¿Tu crees que se podría encasillar?
SA: No, no, no. Es que hay de todo. Hay thriller, ciencia ficción, hay drama... hay de todo. Lo que menos hay es comedia, la comedia la teníamos durante el rodaje.
EC: Cuéntame, ¿cómo fue el rodaje?
SA: Nos lo pasábamos muy bien, nos reíamos mucho, fue muy bonito porque el equipo congeniamos todos. Fíjate que yo tenía un papel muy requetepequeño, que apenas hablo en la película, pero estoy muy presente ahí y entonces mi posición era como, estoy haciendo drama por primera vez y estoy con un reparto maravilloso que me produce mucho respeto. Al principio estaba como un poco vamos a guardar las formas, pero luego ya me di cuenta de que estos eran unos cachondos. Nos lo hemos pasado en grande.
EC: ¿Cómo ha sido para Silvia abril mantenerse callada durante el rodaje?, porque viendo la película, uno llega a pensarlo.
SA: Me costó mucho, y ya José se ha ido de la boca contando anécdotas.
EC: Ahora nos las tienes que contar.
SA: No, no, no. No las sé todas, pero en alguna entrevista que he hecho, me han dicho, "ya nos ha contado José, menuda les diste en el rodaje siempre haciendo bromas". Bueno, claro, es que es mi forma de estar en los sitios... Pero, ¿cuál era la pregunta? (risas)
EC: (Risas) Que cómo hiciste para estar callada tanto tiempo.
SA: Pues fíjate que no me estuve mucho callada, porque las tomas de cine tampoco son muy largas, entonces, yo entre toma y toma soy muy de relajar el ambiente de "a ver, venga va, esto es una película. Esto no nos lo tomemos muy en serio (risas)". Por suerte tengo pocas secuencias con Miquel y Aura que son los que llevan el peso más dramático de la película, porque los hubiera desconcertado muchísimo y ahí sí que me hubiera sentido un poco mal. Pero con Ginés García Millán, mi marido, que es un cachondo... Con Ignasi Vidal, que también compartí mucho, con José Sacristán también nos reímos muchísimo. Yo no lo conocía y me he reído mucho con él. Con Ana Wagener me he llevado de maravilla y me parece una tía maravillosa a parte de buenísima actriz. O sea, que de repente descubrí un equipo de gente maravillosa a parte de talentosa. Y José Skaf, que me ha dejado hacer... me ha dejado ser el elemento de distensión, ¿sabes?.Porque otro me hubiera dicho, "o paras, o te vas", porque era un papel pequeño, o sea, lo podía suprimir si quisiera. Y no, parece ser que no me ha suprimido de la película (risas).
EC: ¿Cómo fue trabajar ese punto dramático? porque no estamos acostumbrados a verte en esa tesitura.
SA: Pues fíjate, haciendo de actriz. Es que en definitiva yo soy actriz ante todo y he hecho dramático en el instituto cuando estudiaba. O sea, ha sido recuperar aquello y jugar a creerme todo ese mundo, y todo ese rollo. No sé cómo me habréis visto, pero yo jugaba a eso, a creérmelo mucho y a ser la mujer del malo malo, y a sufrir mucho en silencio. Yo tenía una almorrana enorme en la película, porque es un personaje que a penas habla, que juega sobre todo en los silencios. Mi texto es el silencio. Y ya está, ahí he estado jugando. Al final, los ingleses tienen la palabra ideal, porque actuar es "to play", y he estado "play-ando", (risas) jugando todo el rato.
EC: ¿Crees que tu personaje quería estar en "ese mundo"?
SA: Mi personaje está un poco sumisa, asumiendo que le ha tocado estar ahí. Y luego, por otro lado, sintiéndose afortunada del rango que ocupa, porque en definitiva es la esposa de uno de los jefes de todo el tinglado que hay montado. O sea que de alguna manera, en parte, dice, "estoy mal, pero estoy bien" ¿sabes?. Dentro de lo malo y el rollazo que supone esta vida, tenemos escapadas a "la ciudad" ¿no?. En la película ella hay un momento dramático que le dice "vamos de compras a la ciudad"... Ese es el escape de mi personaje. Algo tal banal como irse de compras.
EC: Bueno, bueno... Cuéntanos alguna de esas anécdotas que decías, Silvia.
SA: Pues mira, es que tengo una memoria de mosquito terrible y no recuerdo muchas cosas.Yo por ejemplo recuerdo, las tonterías que hacía Sacristán, que hay un momento que tiene un discurso impresionante ante todos los trabajadores de la fábrica, y se puso a hacer el moñas ahí. Nos reímos muchísimo, se puso a hacer tonterías, a hacer el payaso, y claro, yo a Sacristán ya no lo recuerdo haciendo comedia, que él ha hecho mucha comedia también, pero, ese señor, ya con ese poso, esa edad, subido en un pedestal... y empieza a soltar ese discurso pero desde otro sitio de comedia... me reí mucho.
Pero fíjate que anécdotas... Mira me acuerdo mucho de nuestra estancia en La Vall Fosca, que es una de las localizaciones de la película en la que pasamos una semana en pleno bosque, en una casita rural en la que dormíamos todos, y aquello fue como estar de colonias. Nos reíamos mucho y por las noches, Andreu Castro, que es uno de los secundarios también como yo, nos hipnotizaba (risas), y un día le gastamos a él una broma muy graciosa, y Ginés le hizo creer que tenía un mal despertar de la hipnosis (risas), y empezó a hacer un personaje gangoso (risas). Lo despertó Andreu y él empezó a hacer el gangoso y Andreu se empezó a agobiar y a pensar qué había hecho mal.
Bueno, y las esperas que fueron muy divertidas, pero no recuerdo ninguna anécdota. Bueno, esa de la hipnosis fue muy graciosa.
EC: Digamos que 'Vulcania', a pesar de todo el drama que parece tener, hay un mundo detrás, como en la película.
SA: Nosotros en el rodaje, en el día a día vivíamos en "La Ciudad", en la juerga máxima y el despilfarro y la banalidad (risas)... pero luego en el set de rodaje intentábamos retomar la situación. A ratos, también te digo.
Pero, me acuerdo que yo estaba nerviosa, claro. Mi primer papel dramático, por pequeño que sea, pero mi primer papel dramático. Yo tenía sobre todo una escena un poco complicada del hacer, una escena donde tengo una pelea con Ginés García Millán, que es mi marido, una escena con mucha tensión y poco texto por mi parte, como siempre (risas), y pensé "dios mío, es la más complicada que tengo", y veo en el plan de producción, que es la primera, o sea, me quería morir. Me quería morir, y lo quería cambiar, porque claro, yo pensé "que me den tiempo a hacerme con la película, con el rollo". Yo quería impregnarme de mis compañeros, pero ¿empezar así?, me parecía lo más duro de la vida en ese momento. Pero fue así, no lo cambiaron. Yo pensé "tú no eres un director, eres un cabrón, José Skaf" (risas). Y él decía, "no no, si saldrá bien ya lo verás". Una escena, pues eso, dura con Ginés, que fue generosísimo, maravillosísimo y que me ayudó muchísimo, y ya está. Muy bien.
EC: Cambiando de tercio, hablemos de Los Feroz. Parece ser que hay ciertos comentarios que no sentaron muy bien.
SA: Fíjate, la broma de que si pones "pene" en google se autocompleta con tu nombre, ya me dirás tú qué tontería. Yo creo que...
EC: ¿Nos falta autocrítica y reírnos de nosotros mismos?
SA: ¡Hombre, falta bastante humor! Pero oye, ¿sabes lo que te digo? Que cada cual con sus mierdas (risas)... Yo creo que no hubo nada que molestara, por favor. Y no sé, que son los Feroz, un poco para eso, son los premios de los críticos... Cada vez lo entiendo menos, este punto así como rancio de la gente. (risas)
EC: Cuando en verdad es una fiesta todo, al fin y al cabo...
¡Claro!, y yo presentando, o sea, ¿qué esperas, no? (risas)
EC: Y con todos los palos que le diste a Ruiz Caldera, ¿sigues siendo su musa?
SA: Hombre, no me ha llamado todavía para 'Superlópez', y yo creo que ya están con ello. Otro que igual se ha ofendido (risas). El mundo del revés, "el director de comedia number one, ofendido por una broma" (risas). Ya no soy su musa, ahora soy su "mu", bueno, soy su "m", porque salgo tan poquito que ya el título me lo van retirando letrita a letrita.
No lo sé, no lo sé, me imagino que sí, que Javier me llamará y algo acabaré haciendo.
EC: Aunque sea la mitad de la "m"
SA: (Risas) Pero es que entonces igual le digo que no, ya me tengo que poner en mi sitio.
EC: Ahora ya te has pasado al drama.
SA: Ahora ya solo dramas (risas). No, sería incapaz de decirle que no, si es un amor.