El de Zoe Berriatúa no ha sido un camino fácil. Nada menos que diez años. Y, sin embargo, el desenlace no ha podido ser más positivo, con su película, 'Los héroes del mal' estrenada en cines después de haber pasado por la Sección Oficial del Festival de Málaga. Lo que parecía un sueño imposible es ya una feliz realidad.
"Han sido ocho años de búsqueda de financiación", sin ningún éxito "y por lo tanto me puse a rodar mi película porque ya no tenía nada más que perder". Y haciendo las cosas "al revés" es como ha salido el proyecto adelante, contando nada menos que con Álex de la Iglesia como productor y padrino de excepción.
Cuestionado sobre los posibles porqués a las dificultades para lograr la financiación, el director enumera posibles causas antes de dar con la que él considera la clave: "Tal vez porque es una película dura, tal vez porque no tiene un final feliz, tal vez porque no tiene ni rastro de comedia, tal vez porque España es un lugar muy complicado para que las películas que no cumplen con los motivos de financiación ideales se produzcan. Independientemente de que sean buenas o malas películas. Todo el mundo sabe que hacer una película dura, con un final trágico, puede ser un suicidio en este país".
Berriatúa va un poco más allá en su discurso y habla sobre las posibles causas: "España es un país muy difícil para hacer cine. Curiosamente la crisis, mal que me pese, quizás sea lo que nos ha permitido introducirnos en la industria, porque ésta siempre ha sido igual de cerrada. Son lobbys, son clanes. Y los motivos de financiación están demasiado ligados a los contactos y a las relaciones personales. Y no te hablo de subvenciones compradas, sino de la verdadera financiación que viene de las televisiones, que muchas veces viene por productores que tienen una gran relación de producción, inevitable, con las teles. No hay espacio para que una película pueda destacar por su calidad en este país, sino porque tiene unos motivos de financiación que se ajustan al estándar".
Paralelismos y temas
"Es una película sobre el doloroso tránsito de la infancia a la madurez y cómo tres adolescentes se pierden en este proceso de la búsqueda de esas certezas, de ese saber desenvolverse en el mundo de los adultos". Así describe el director la que es su ópera prima, 'Los héroes del mal'. Una película que casualidades que suelen darse, comparte bastantes cosas con otro filme presentado en Málaga y que ya pudimos disfrutar en cines, 'A cambio de nada': "Hay curiosos paralelismos entre la película de Daniel Guzmán y la mía. Los dos hemos tardado además diez años en rodar estas películas. La diferencia quizás estriba, entre otras cosas, en que él encontró parte de la financiación y yo no. Yo la empecé tras no encontrarla. También es verdad que la mía es un drama con un final trágico y la suya es más ligera, tiene un tono más de comedia".
Reivindicando nuestro cine
Para finalizar, Zoe saca a relucir su vena más reivindicativa para hablar de lo que cuesta hacer una película en España partiendo desde su propio caso: "Ha sido un proceso de diez años para poder dirigir mi primera película mientras seguía dirigiendo cortos y cortos, porque tampoco quería rodármela con poco dinero, no quería tener una película suicida que consigues hacerla, estrenarla en un solo cine y la tienes que guardar en un cajón y comértela con patatas, como ocurre con magníficas películas del cine español. Que está ocurriendo esto. Y si no son magníficas, muchas veces es porque nadie también les ha dado el apoyo para que estas películas se puedan hacer. Películas buenas que pasan sin pena ni gloria tenemos a porrones. Desconocidísimas. Y eso es algo muy triste".