En 2009, asistimos al inicio del romance entre el humano Jake Sully y la nativa de Pandora Neytiri en 'Avatar'. Trece años más tarde y tras un largo y complejo proceso de producción, llega a los cines su primera secuela 'Avatar: El sentido del agua', en la que James Cameron ha vuelto a depositar todo su esfuerzo creativo y visionario para superar el espectáculo sin precedentes de la primera película. En ella, Sam Worthington y Zoe Saldaña vuelven a dar vida a Jake y Sully en una nueva fase de sus vidas, como padres de una gran familia que harán lo posible por proteger lo que más quieren.
'Avatar: El sentido del agua' transcurre más de diez años después de los acontecimientos de la primera entrega, y de forma paralela en la vida real, Saldaña y Worthington también han formado sus propias familias en todo este tiempo, con el absoluto cambio de perspectiva que conlleva ser padres. Para Saldaña, ser madre fue muy importante a la hora de conectar con Neytiri en esta nueva historia. "Me ayudó a sentirme identificada con ellos de la mejor manera que pude", declara la actriz en una entrevista en Londres con eCartelera. "Estos personajes son criaturas que se preocupan mucho por su entorno, los unos por los otros, por su comunidad... Y ahora que tienen una familia, el riesgo es muchísimo mayor, cada vez que algo amenaza con arrebatarles lo que más quieren".
Además de permitir que la tecnología avanzase lo suficiente para llevar la saga a alturas (o profundidades) nunca exploradas, el tiempo entre el film original y su esperada primera secuela también ha servido para reflexionar sobre el verdadero impacto cultural de la primera película, un debate perenne que Worthington zanja así: "Nadie sabía nada sobre 'Avatar' y no parece que eso fuera un impedimento. Aun así conectó a nivel global. Lo único que nosotros podemos hacer es contar una historia en la que creamos y que amemos. Nuestro trabajo como cineastas y creadores es compartir eso". "Y esperar que la gente conecte con ella y les afecte", añade Saldaña. "Definitivamente, no vamos a sentir arrogancia u orgullo por ello. Pero sí esperanza".
Eso sí, la actriz no puede evitar recordar con cierta melancolía que, en su día, no se apreciaran sus interpretaciones en la película porque estaban cubiertas de una capa digital, y reflexiona sobre la técnica y si las interpretaciones con captura del movimiento merecen reconocimiento en los Oscar. "Hubo un gran nivel de frustración después de la primera película, no te voy a mentir", reconoce. "Porque sabemos la cantidad de trabajo que conlleva. Pero también sabemos la integridad que define a las interpretaciones de los actores. Y Jim respetó esa integridad. Básicamente lo que hizo fue pintar encima". "Él potenció lo que nosotros habíamos creado", continúa. "Por eso cambió el término de motion capture (captura del movimiento) a performance capture (captura de la interpretación). Se puede capturar el movimiento de un caballo galopando, pero un ser humano que está expresando sentimientos y atravesando situaciones reales, eso es una interpretación. Esta vez, si se me permite decirlo con respecto, espero de verdad que la industria del cine y la audiencia se den la oportunidad de estudiar lo que es la performance capture para entenderla". "Que mi trabajo o el de mis colegas merezca reconocimiento, eso ya no depende de nosotros. Nosotros estamos orgullosos de lo que hicimos y sabemos lo que hicimos", concluye.
Jim 2.0
Cameron ha reconocido en más de una ocasión que su experiencia como padre de adolescentes le suavizó el carácter y le hizo enfocar de otra manera su trabajo como líder en 'El sentido del agua'. Worthington no se moja mucho a la hora de dar detalle sobre ese cambio en el director, pero lo achaca a la madurez: "Es muy colaborativo. Todo el mundo se vuelve más paciente con la edad, pero siempre me ha parecido un sueño trabajar con él", algo con lo que Saldaña concuerda rotundamente.
'Avatar: El sentido del agua' se estrena en cines el 16 de noviembre.