Los escándalos de Jude Law, su amistad con Ewan McGregor y otras curiosidades

Cuando aun era un adolescente, Law ingresó en la escuela de interpretación National Youth Music Theatre. Al llegar a la academia, lo asignaron a un dormitorio de chicas porque creían que su nombre era de mujer. Él decidió callárselo para poder dormir junto a sus compañeras, pero lo acabaron pillando.

Ewan McGregor y Jude Law ya eran muy amigos antes de ser famosos. De hecho los dos vivieron juntos mientras intentaban hacerse un hueco en el mundo del cine. Durante sus primeros años como actores fundaron la productora independiente Natural Nylon (junto a otros actores como Jonny Lee Miller y Sadie Frost), pero la dejaron de lado en cuanto los dos se convirtieron en estrellas y empezaron a trabajar en grandes proyectos.

En 1999, Law interpretó al magnético e irresistible Dickie Greenleaf en 'El talento de Mr. Ripley', papel que le valió su primera nominación al Oscar y lo catapultó a la fama. Para trabajar en la película de Anthony Minghella, tuvo que aprender a tocar el saxofón.

Entre 2001 y 2005 Law apareció en tantas películas que era casi imposible no encontrárselo en la cartelera todos los meses, de ahí que en 2006 fuera nombrado una de las 10 estrellas más rentables de Hollywood. Durante los Oscar de 2005, el presentador Chris Rock hizo referencia a la omnipresencia de Law: "¿Por qué sale en todas las películas que he visto en los últimos cuatro años? Hasta en las películas que no sale, si miras los créditos, es el que ha hecho los cupcakes o algo". Se dice que a Law no le hizo mucha gracia el chiste y por eso acabó despidiendo a su agente poco después.

Además de sus candidaturas al Oscar (ha sido nominado dos veces, por 'El talento de Mr. Ripley' y 'Cold Mountain'), Jude puede presumir de dos nominaciones al Tony, por la obra 'Indiscretions' y por su versión del Hamlet de Shakespeare. También ha sido nominado a tres Laurence Olivier Award, entre otros muchos galardones de teatro. Law ha desarrollado una prolífica carrera teatral al margen del cine, participando en obras destacadas como 'Tis Pity She's a Whore', 'Doctor Faustus', 'Henry V' y 'Obssession'.

En 2005, Law estaba en boca de todos, pero no siempre por los mejores motivos. El actor ocupó todos los tabloides existentes cuando fue infiel a su pareja, la actriz Sienna Miller, con su niñera. El escándalo sacudió fuertemente su vida personal. Law reconoció la "traición" públicamente y se disculpó, pero su carrera y popularidad ya habían entrado en decadencia debido a la humillación pública. Más adelante, la pareja se reconcilió, pero Miller tuvo su propio affaire, con Daniel Craig. El escándalo se hizo aun más grande cuando se descubrió que les habían pinchado el teléfono y que la familia de Law estaba vendiendo trapos sucios a la prensa del corazón. La pareja rompió definitivamente en 2011.

Jude Law tiene nada más y nada menos que cinco hijos. Tres con su ex mujer Sadie Frost (Rafferty, Iris y Rudy), una con la supermodelo norteamericana Samantha Burke (Sophia), y la más pequeña (Ada) con la cantautora Catherine Harding. El mayor, Rafferty, que guarda un asombroso parecido con su padre, es modelo y fue nombrado uno de los hombres británicos mejor vestidos de 2015 por la revista GQ. Rudy también es modelo y su carrera empezó a despegar tras ser fichada en 2017 como la nueva cara de Burberry. Está claro que los niños han heredado los genes de su padre.

Al margen de su trabajo como actor, Jude colabora con numerosas organizaciones benéficas, entre ellas: UNICEF, Macmillan Cancer Support, Make-A-Wish Foundation, Make Poverty History y Friends of the Earth. El actor dedica gran parte de su tiempo al voluntariado. En 2012 se unió al líder de Radiohead, Thom Yorke, realizando un vídeo para salvar a los osos polares.

Cuando era joven, Law se describía a sí mismo como "idealista" y creía incondicionalmente en el espíritu humano. Sin embargo, estar en el ojo público tras su infidelidad y ser utilizado por su familia le hizo perder el optimismo y ser receloso de todo el mundo. Con el tiempo acabó recuperando ese idealismo que lo caracterizaba y, pasados los 40, vive una nueva época de esplendor personal y estabilidad profesional.