La actriz Esmé Bianco, conocida por interpretar a Ros en 'Juego de Tronos' y a Eliza en 'The Magicians', se une a Evan Rachel Wood y acusa a Marilyn Manson de tortura y abuso sexual: "es un monstruo que casi me destruye a mí y casi destruye a tantas mujeres". Bianco, que mantuvo una relación intermitente con el cantante durante años, ha descrito escenas donde fue drogada, atada y agredida física y psicológicamente por Manson y ha aportado mails, mensajes y fotografías para apoyar su testimonio.
En el reportaje de The Cut, medio al que Bianco ha concedido la entrevista, le describe como un "depredador en serie". Según explica, se conocieron en 2005 a través de Dita Von Teese y mantuvieron el contacto hasta que en 2009 la contrató para protagonizar el videoclip de 'I Want to Kill You Like They Do in the Movies'. El papel exigía que interpretase a una de las amantes de Manson que sería víctima de secuestro durante el vídeo, pero según relata, Manson se volvió violento y cruzó la línea de lo estrictamente profesional atándola, azotándola con un látigo y usando juguetes sexuales eléctricos a modo de tortura. Bianco tenía entonces 26 años y asegura que pasó los tres días que duró el rodaje vestida únicamente con lencería, sin que la dejasen dormir y prácticamente sin alimentarse, porque solo le daban cocaína y no comida. Ella misma recuerda que en aquel momento solo podía estar agradecida de trabajar con un artista al que había admirado desde adolescente: "Solo es teatro. Vamos a hacer arte", pensaba entonces.
Manson y Bianco empezaron una relación intermitente a distancia durante años en los que él iba a visitarla a Los Angeles y llegaron a vivir juntos dos meses en West Hollywood. Durante el tiempo que fueron pareja, Bianco pensaba que su comportamiento era normal, una distorsión de la realidad que atraviesan muchas víctimas de abuso: "En ese momento entré en modo supervivencia y mi cerebro me enseñó a hacerme pequeña y agradable [...] Básicamente me sentía una prisionera. Iba y venía a su antojo, controlaba por completo con quién hablaba y tenía que llamar a mi familia a escondidas desde el armario". La actriz piensa que desarrolló algún tipo de síndrome de Estocolmo y también contó a la publicación que durante las relaciones sexuales la mordía sin su consentimiento, le dejaba el cuerpo dolorido y una vez le cortó el torso repetidamente con un cuchillo. Además, controlaba la ropa que debía usar y las horas que debía dormir. The Cut ha contactado con varios amigos de Bianco que han corroborado su historia asegurando que han sido testigos de los cortes y magulladuras, que la han visto aterrada y que una vez llegó a llamarles pidiendo ayuda desde el interior de un armario escondida en la casa de Manson.
Torturas psicológicas
Además de los ataques físicos, al parecer cuando se emitió uno de los episodios de 'Juego de tronos' donde salía Bianco, Manso proyectó en bucle una de las escenas de sexo en las que participaba delante de sus amigos una y otra vez diciendo "Esa es mi novia, es una puta, mirad como se le salen las tetas". El punto de inflexión para ella, según relata, llegó cuando Manson la persiguió hasta su casa con un hacha y tras la ruptura sufrió ataques de pánico y no podía ni plantearse retomar su carrera debido a su estado mental.
Bianco ya se había presentado como superviviente de abuso doméstico en 2019, cuando testificó ante la Asamblea de California para ayudar a reformar y reforzar las leyes contra la violencia de género, sin embargo esta es la primera vez que apunta públicamente a Manson como su abusador.
Wood y Bianco no han sido las únicas mujeres en señalar los abusos de Manson, al que han despedido de 'American Gods' y 'Creepshow' y se ha quedado sin representantes, a pesar de que él ha negado todas las denuncias. En su publicación, la actriz de 'Westworld' cuenta cómo Manson le lavó el cerebro, manipuló y sometió desde que era adolescente. "No es un artista incomprendido. Se merece estar tras las rejas por el resto de su vida", sentencia Bianco.