Tras años ocupando una posición de poder en Pixar y Disney, la presión del movimiento #MeToo ha propiciado recientemente la renuncia de John Lasseter de su puesto de director creativo. Cassandra Smolcic, en un ensayo titulado Pixar's Sexist Boys Club ("El sexista Club de hombres de Pixar"), publica su experiencia personal en la productora bajo las órdenes de Lasseter, a quien culpa de haber estropeado el trabajo de sus sueños.
"Fui diseñadora gráfica en Pixar durante la segunda mitad de mis 20 años. Sé que la gente dice que la atmósfera de trabajo allí no era "tan mala". Estoy aquí para contar que lo fue y, lo más probable, es que todavía lo sea".
Según relata la extrabajadora, quien trabajó durante cinco años para la institución, su condición de mujer siempre resultó ser un impedimento innegable para su labor profesional. La joven, quien dice creer haber conseguido el trabajo de sus sueños, asegura que su emoción desapareció rápidamente ante una avalancha de advertencias sobre las tendencias de Lasseter en el cruce de fronteras con las empleadas.
"Fue devastador aprender, desde el comienzo, que las mujeres eran blancos abiertos de falta de respeto y acoso, incluso en un lugar de trabajo de renombre mundial en la ciudad más liberal del país", declara la joven. "Lasseter no necesitaba un ambiente íntimo para incomodar a las empleadas. Me lanzaba a mí, e innumerables mujeres, miradas lascivas de arriba abajo (o abrazos y toques no deseados) casi cada vez que nos cruzábamos en el trabajo".
Según ella, el caso de Lasseter no era aislado, pues Smolcic fue avisada también de mantenerse alejada de un líder masculino particularmente machista de su departamento con el que tuvo más de un encuentro incómodo acompañado de comentarios sexuales. "Al igual que John, los objetivos femeninos de este hombre habían estado reportando sus comportamientos vulgares y poco profesionales durante años, pero su posición y conducta permanecieron más o menos iguales".
No es la única
Según su relato, Cassandra encontró el apoyo entre sus compañeras de trabajo, quienes también habrían sido víctimas de los supuestos comportamientos sexistas de los empleados; sin embargo, eso nunca habría sido suficiente. "Justo después de comenzar con 'Cars 2', un superior me dijo que no me invitarían a ninguna de nuestras reuniones semanales del departamento de arte porque Lasseter tenía dificultades para controlarse con las mujeres jóvenes", declara Cassandra.
"Una mujer líder en mi departamento una vez suplicó a sus jefes masculinos que la apoyaran con un equipo para completar un proyecto de producción desafiante. Sus superiores ignoraron repetidamente sus pedidos, hasta que el estrés del trabajo la condujo a un estado de deterioro psicológico y físico".
Tal y como se expone, Lasseter habría puesto el listón muy bajo para el tratamiento general de las mujeres en su imperio, un imperio cuyas producciones llegan a millones de niños y adultos en todo el mundo. La decisión de reemplazar a Lasseter por Jennifer Lee en Disney y Pete Docter en Pixar brindaría la esperanza de un cambio significativo en el futuro.
10 películas más taquilleras de Pixar
'Cars'
Señalada con contundencia como el punto más bajo de Pixar hasta ahora, la saga de 'Cars' tiene algo que no admite discusión alguna, un éxito apabullante en taquilla. Su primera entrega, cuestionada tras su estreno por una crítica que esperaba la excelencia constante, ha ido ganando con el paso de los años, especialmente desde que se le ha dejado de comparar con otros trabajos del estudio más ambiciosos y logrados, revelándose como una historia de corte clásico contada con mimo y delicadeza, presentando personajes brillantes y emocionando desde la sencillez. La América profunda, el olvido de las cosas que la hicieron grande y el paso del tiempo. Todo lo podemos encontrar en 'Cars', no solamente se trata de merchandising. Justicia para ella.
'Toy Story 2'
El mérito de 'Toy Story 2' es triple. Primero, conseguir superar a una predecesora que había supuesto un fenómeno cinematográfico de primer nivel. Segundo, convertirse en otro ilustre ejemplo de la estupidez de tópico que es 'segundas partes nunca fueron buenas'. Y tercero, anular todos los miedos iniciales hacia la necesidad de que Pixar probara suerte con las secuelas.
Un tridente de logros obtenidos gracias a una estrategia narrativa tan sencilla que parece fácil, sin serlo, basada en expandir el universo planteado en 'Toy Story' con nuevos personajes llenos de carisma y un guion más maduro y adulto. Todo sumaba, y lo sigue haciendo, en una película inoxidable, una secuela ejemplar.
'Monstruos, S.A.'
Partiendo de una idea absolutamente brillante, 'Monstruos S.A.' conseguía superar todas las expectativas generadas por Pixar tras sus dos primeras películas, las maravillosas 'Toy Story', 'Bichos' y 'Toy Story 2', combinando un diseño de personajes y escenarios asombroso con la ternura que empapaba cada rincón de su historia.
Un guion de acera, un ritmo impecable en el que las sonrisas y las lágrimas se combinaban con una facilidad pasmosa y un dúo protagonista inolvidable convirtieron a 'Monstruos S.A.' en un taquillazo mundial y, al mismo tiempo, comenzaron a construir ese estatus de clásico con el que la película convive actualmente. Cine para toda la familia ejemplar, magnífico, incuestionable.
'Los increíbles'
El maravilloso homenaje a los superhéroes de andar por casa con el que Brad Bird deslumbró al mundo en 2004, 'Los icnreíbles', era, por encima de todo, una carta de amor al género que, visto todo lo que vino después, fue un auténtico punto de inflexión, el comienzo real de un aluvión de personajes con superpoderes que han marcado de manera evidente la última década de cine.
Por eso resulta curioso comprobar como la historia que escribió Bird sigue manteniéndose en plena vigencia como una de esas cimas a las que muchas películas de la misma temática intentan acercarse con resultados desiguales. Una influencia mucho más presente de lo que pueda parecer de la mano de una obra maestra del entretenimiento, una pirueta visual y narrativa de primer orden que recibimos de la mano de unos genios. No nos quedan uñas esperando la llegada de su secuela.
'Monstruos University'
Secuela recibida con ese aire de (semi)decepción que rodeaba a toda propuesta de sello Pixar estrenada después de la, también infravalorada, 'Cars 2' y la correcta, a secas, 'Brave', la sensación general con 'Monstruos University' fue la de estar ante una película perezosa, una propuesta que iba a lo seguro sin asumir más riesgo que el de ofrecer una factura técnica cada vez más apabullante.
Cumplida esa meta con creces, lo que nos queda es una historia de superación con el lema de encuentra y acepta al gigante que habita en ti que, si bien es cierto que no suponía ningún triunfo especialmente destacado para Pixar, contenía escenas que justificaban el levantarse de la butaca y ponerse a aplaudir con fuerza.
'Up'
La inolvidable aventura que vivían Carl Fredricksen y el pequeño Russel en la magistral 'Up' contenía momentos de una emoción desbordada, resumida en la mirada de un anciano que leía la última página de un libro que, más allá de los recuerdos, escondía una lección de vida que estaba por encima de cualquier crítica u opinión que se pueda intentar describir.
Es cierto que todo estaba en unos cuatro minutos iniciales que son ya historia del cine, pero la película no dejaba de intentar mantener ese listón envidiable durante cerca de cien minutos que siguen poniendo la piel de gallina, despertando todas las sonrisas y maravillando a un público que la convirtió, de manera casi automática, en un clásico absoluto del séptimo arte. Un Pixar superlativo.
'Buscando a Nemo'
Si alguno pensaba que lo de Pixar era un juego solamente de (y para) niños, cambió de opinión tras el estreno de 'Buscando a Nemo', excelsa demostración de talento visual y narrativo. Construida con maestría, diseñada con pulso firme, escrita desde la inspiración total, con un manejo del suspense, el drama, ¡ese prólogo!, y el sentido de la aventura a la altura de los mejores, la película dirigida por Andrew Stanton volvía a presentar a Pixar como maquinaria perfecta para crear emociones sin aparente esfuerzo, tan solo con el uso de una historia que estuviera a la altura. Un lujo para la taquilla y para el paladar cinéfilo.
'Del revés (Inside Out)'
Para muchos, entre los que me incluyo, la mejor película de Pixar hasta la fecha. 'Del revés (Inside Out)' consiguió enamorar locamente a crítica y público tras su estreno, a pesar de algunas voces que salieron en su contra argumentando una complejidad argumental, en su opinión, desmedida de cara a la comprensión de los más pequeños.
Sin embargo, y aunque es evidente que nos encontramos ante la película más reflexiva y adulta del estudio, la obra maestra de Pete Docter conseguía traspasar todos los límites a base de inteligencia, sensibilidad, humor y, por encima de todo, una delicadeza sobre la que se construía uno de los análisis sobre la melancolía y su importancia más brillantes y emocionantes jamás vistos en una pantalla. Oro en estado puro. Cine explotando en cada escena. Imprescindible.
'Toy Story 3'
Tras dos entregas sobresalientes, Pixar se lanzaba al éxito comercial asegurado con 'Toy Story 3', una aventura que, para sorpresa de casi todos, se situó muy por encima de las expectativas depositadas en ella, convirtiéndose, de lejos, en la mejor entrega de una trilogía sencillamente perfecta.
Todo funcionaba a las mil maravillas en una obra maestra cuyas virtudes parecen innumerables y que no ha hecho más que crecer y crecer en la memoria de toda una generación que derramamos lágrimas cada vez que volvemos a caer en su hechizo. Resumiendo, una de las mejores películas de la historia de la animación. Y un triunfo apabullante de taquilla tan inevitable como merecido.
'Buscando a Dory'
Ya es mala suerte. Pese a que Pixar cuenta con más de una decena de títulos absolutamente magistrales de inicio a fin, su película más taquillera hasta la fecha es, lástima, uno de sus trabajos menores. Muy menores. Sí, un traspiés suyo está por encima de muchas de las mejores películas de otros estudios, pero eso no consigue aliviar la (ligerísima) tristeza que provoca que el mayor éxito de su historia sea 'Buscando a Dory', una secuela que no solamente no ampliaba los logros de la maravillosa 'Buscando a Nemo', sino que ni siquiera los conseguía igualar.
Su tramo final, un delirio sin demasiado sentido en el que no funcionaba ni la parte emocional de la historia, algo que dábamos por hecho, terminaba de desnivelar la balanza en su contra. Muchos dólares, de acuerdo, pero en términos cinematográficos, un resultado bastante pobre.