La mayoría de miembros del reparto principal de la octava entrega de la saga Fast & Furious ha publicado un post en Facebook que se convierte en el último que van a compartir. El equipo agradece en una carta abierta a sus fans la fidelidad de estos con el proyecto y muestra una foto en la que aparecen Jason Statham, Vin Diesel, Ludacris, Dwayne Johnson o Charlize Theron entre otros. Se trata de la última publicación que harán, y que han estrenado de forma periódica los viernes una vez comenzado el rodaje, que ha durado unos cien días.
Pero el núcleo de la información publicada es la fecha de estreno del tráiler: el próximo diciembre. Todo parece apuntar a que podrían verse las primeras imágenes de la película en el contexto del estreno de 'Rogue One: Una historia de Star Wars', que llega el 16 de diciembre, aunque no se trate de un estreno perteneciente a Universal. En la fotografía que han revelado posan junto a uno de los coches y solo se echa en falta a la dama Helen Mirren entre las estrellas principales.
Además, en la carta, el equipo detrás de esta longeva saga expresa su ilusión por cumplir los deseos de los seguidores innovando y proporcionando nuevas espectaculares escenas de acción, sin perder de vista el origen callejero y competitivo de la serie de cintas que comenzó con 'The Fast and the Furious (A todo gas)'. También el equipo de producción agradece sus esfuerzos a los actores y actrices que han estado desde el comienzo con la saga y a aquellos que se han incorporado más recientemente. No olvidan a Paul Walker, del que dicen que continúa inspirándoles para mejorar.
Un rodaje muy público
Desde el comienzo del rodaje la producción de 'Fast & Furious 8' ha seguido caminos muy distintos a los de otras superproducciones rodeadas de secretismo, como gran parte de las películas de superhéroes (el caso de 'Escuadrón Suicida' por ejemplo). Al contrario, tanto el reparto como el director han realizado multitud de videoblogs y vídeos documentales de cómo se han rodado algunas de las que prometen ser las más impresionantes escenas de la famosa saga de los coches tuneados. La octava entrega se ha caracterizado además por rodarse en Cuba y ser de esta forma el primer gran blockbuster estadounidense en localizarse allí, algo facilitado por la mejora de las relaciones geopolíticas entre ambos países americanos.
La saga 'Fast & Furious', de peor a mejor
'A todo gas 2'
Una continuación que intentó aprovechar el tirón de la primera, sin Vin Diesel, y con la cara bonita de Walker como principal reclamo. El resultado fue una cinta de acción que pasó sin pena ni gloria, olvidable, y que cosechó dos nominaciones a los premios Razzie, incluyendo peor remake o secuela.
La historia continuaba años después de lo sucedido en la primera, con O'Conner sin su insignia y alejado del cuerpo policial, viviendo en Miami; sin embargo, cuando la policía es incapaz de acabar con un empresario que blanquea dinero a través de su negocio, tendrán que pedir ayudar a nuestro protagonista, quien se sube al coche acompañado de su mejor amigo, Roman Pearce.
'Fast & Furious: Aún más rápido'
Tras el fiasco de 'A todo gas 2' y el descalabro de 'Tokyo Race', los dos protagonistas unieron fuerzas para revitalizar la saga. ¿Qué pasó? Que se les fue de las manos: escenas de acción demasiado al límite, poca originalidad en las tramas... En definitiva, mucho ruido y pocas nueces.
Lo que sí tenía bueno esta secuela era que volvíamos a encontrarnos con O'Conner y Toretto y todo rezumaba nostalgia. El policía volvía a estar tras la pista de Dom; sin embargo, cuando descubren que tienen un enemigo en común, deciden unirse y juntar fuerzas. Es así como surge la amistad que veremos en la siguiente trilogía.
'Fast & Furious 5'
A la rapidez y a la furia se le une la fuerza desmesurada de The Rock. La introducción del personaje en la saga hace que todo adquiera un cariz más violento (las peleas cuerpo a cuerpo con Diesel son como ver a Hulk contra Thor en versión alopécica) y eso se nota en las tramas, lo que provoca alguna que otra escena ridícula, como la persecución con la caja fuerte destrozándolo todo.
La historia arranca con Dom y O'Conner huyendo de la justicia tras escapar el primero de la cárcel. Ambos se encuentran en Río de Janeiro cuando Hobbs les encuentra e intenta detenerlos. Pero no es el único: tendrán que enfrentarse a un empresario que los quiere ver muertos.
'Tokyo Race'
Aunque no contaba con ninguno de los protagonistas, 'Tokyo Race' fue más que decente. Adentrándonos en las calles de la capital japonesa, las tramas se volvieron más oscuras, más exóticas y, con un protagonista algo más naif, todo adquirió un toque de originalidad que nadie esperaba y, queramos o no, la sorpresa siempre es un factor que gusta.
Nuestro protagonista es un joven que no encaja en ningún sitio salvo cuando se pone tras el volante... Entonces se convierte en el mejor. Cuando la policía lo pilla, es enviado a Japón junto con su tío para que adquiera disciplina; sin embargo, allí descubrirá las carreras más peligrosas del mundo y se hará un buen enémigo: el jefe de la Yakuza.
'Fast & Furious 6'
Para mi gusto, Justin Lin no le hizo ningún bien a la saga. Cierto es que con 'Tokyo Race' introdujo algo de sangre nueva pero, en las tres siguientes, transformó la saga en un batiburrilo de explosiones sin sentido. En ésta, con el regreso de Letty, intentó realizar una cinta que los fans pudieran reivindicar y, dentro de lo malo, no le salió del todo mal. Claro, luego ves la séptima entrega, y alucinas.
Retirados de todo, O'Conner y Toretto viven apartados de la ley y del mundo hasta que Hobbs aparece y la cosa cambia por primera vez en la saga: el policía les pide que trabajen codo con codo para frenar a un mafioso. Nuestros protagonistas no están por la labor de aceptar... hasta que ven una foto de Letty, a quien creían muerta tiempo atrás.
'A todo gas'
La buena, la original, la culpable de todo. Corría el año 2001 y Vin Diesel y Paul Walker no sabían lo que les esperaba. ¿Quién les iba a decir que una película de coches iba a iniciar una de las sagas con más fans y que más millones ha reportado a la industria? Ambos fueron catapultados a la fama (aunque Diesel ya había hecho 'Pitch Black' un año atrás) y sus nombres estarían ligados para siempre con el automovilismo.
La historia no podía ser más sencilla: un policía se infiltra en el mundo de las carreras ilegales y, al acercarse al cabecilla, se enamora de su hermana, complicándolo todo.
'Furious 7'
Todo lo que hace James Wan mola mucho. Esto es así. Es un hecho, una realidad. Y las películas de coches no iban a ser menos. 'Furious 7' es lo máximo. Es un canto a los fans desde la primera escena con Jason Statham caminando por el hospital derruido hasta el cierre, con la despedida del fallecido Paul Walker. Tiene un ritmo espectacular, unas escenas rodadas con un gusto exquisito y una facilidad tremenda para reírse de si misma y sacarle la sonrisa al espectador. Tendría que haber sido el cierre de la saga porque, reconozcámoslo, no la van a poder superar.
Cuando un asesino empieza a acabar con todos los componentes del grupo, nuestros protagonistas tendrán que volver a sentarse al volante y recorrer medio mundo para acabar con él. Y, es Jason Statham, no se lo va a poner nada fácil.