Cualquier iniciativa que suponga acudir a las salas de cine a precios más asequibles será bien recibida, pero debido a varios obstáculos, la última edición de la Fiesta del Cine no ha tenido tanta repercusión como en los años anteriores. Rompiendo con la tendencia ascendente habitual de esta celebración, en esta ocasión los datos han ido en declive.
La nueva edición ha tenido lugar del 11 al 14 de mayo, suponiendo una ampliación de un día con respecto al sistema de tres días que ha venido dominando desde la creación de este evento. Esta estrategia no ha servido para aumentar el impacto, aunque al menos ha suavizado el descenso en la venta de entradas en comparación con la segunda Fiesta del Cine de 2014, en la que los cines se abarrotaron batiendo todos los récords establecidos por esta celebración cinematográfica.
Mientras que en octubre del año pasado la cifra de entradas vendidas ascendía a una impresionante cifra de 2.196.101 entradas en tres días, en 2015 el número de asistentes no ha sido tan favorable, a pesar de tener un día más para mejorar los datos, ya que 1.598.720 espectadores han acudido a las salas de cine españolas a lo largo de los cuatro últimos días, como informa Rentrak. Por lo que hay una brecha de 597.381 espectadores entre una edición y otra, lo que supone un descenso del 27,2%. Mientras que la otra edición de la Fiesta del Cine de 2014 reunió a 1.842.444 personas, lo que demuestra el mal rendimiento de la última celebración.
Aunque haya servido para revitalizar la asistencia a las salas entre semana, aumentando en un 753% el número de espectadores el jueves con respecto al mismo día de la semana anterior, las cifras no invitan a pensar que el cine fuera el principal interés de ocio para la gente. Los 446.355 espectadores del jueves ha sido la cifra más alta de esta edición, superando por poco los 438.416 espectadores del miércoles, demostrando que la gente ha decidido esperar al final para aprovecharse de esta inmejorable promoción. Pero la situación no ha sido favorable para esta oferta, ya que se tendría que haber tenido en cuenta la competencia procedente de otros campos y que las propuestas no eran tan llamativas como las de ediciones anteriores.
El fútbol, el verano precoz y el catálogo sin brillo
El mayor impedimento de esta edición ha sido probablemente su mal emplazamiento en el calendario. La vuelta de las dos semifinales de Champions, en las que participaron dos equipos españoles, han supuesto un trasvase de espectadores de los cines a los bares. Además de las elevadas temperaturas que invitaban a disfrutar de otras ofertas de ocio al aire libre. Pero el obstáculo que puede haber hecho más mella en el evento ha sido la falta de títulos lo suficientemente atractivos como tener un tirón incesante durante cuatro días consecutivos. Algunos de los trece estrenos del pasado fin de semana han tenido su momento de gloria en la Fiesta del Cine, pero no la suficiente como para convertir el evento en todo un éxito.
Como era de esperar, la cinta que más espectadores ha acumulado ha sido 'Vengadores: La era de Ultrón', que ha sumado 448.000 entradas vendidas, triplicando los datos de la segunda clasificada, 'El viaje más largo', que ha reunido a 147.000 espectadores. Tras ellas se encuentran 'Suite francesa' (104.000 espectadores), 'El maestro del agua' (98.000 espectadores) y 'El gurú de las bodas' (72.000 espectadores). Pero no han logrado el efecto conseguido por 'Drácula: La leyenda jamás contada' y 'Perdida' o por 'Capitán América: El soldado de invierno' y 'Ocho apellidos vascos', en las ediciones del año pasado. Esperemos que este traspiés en la oferta de entradas a 2,90 euros no ponga en peligro la celebración de una segunda fiesta del cine en otoño de 2015, que viene cargado de estrenos que pueden dar alas a esta promoción, que trata de aliviar la mala situación de la taquilla española y reconciliar al público con un arte que puede llegar a parecer inaccesible por los privativos precios de las entradas durante el resto del año.