Aunque en esta redacción quedamos muy satisfechos con el final de 'Bruja Escarlata y Visión' (lo puedes comprobar en nuestro análisis del capítulo), sí hay que admitir que hubo ciertas tramas que se quedaron un poco cojas, como las de Monica Rambeau (Teyonah Parris) y el Pietro falso (Evan Peters), que se descubrió que en realidad era un actor contratado por Agatha Harkness (Kathryn Hahn) llamado Ralph Bohner.
Gracias a Matt Shakman, director de 'WandaVision', sabemos ya qué pasó. Y lo que pasó fue la pandemia. Lo explica en el podcast de Kevin Smith: "Terminamos el rodaje en Atlanta y llegó la pandemia, y terminamos teniendo que cortar varios meses, así que hubo unos cuantos cambios. Estábamos haciendo la postproducción y tuvimos que dar con ideas y hacer pequeños cambios. (...) Hicimos y rehicimos un montón de versiones diferentes de cómo funcionaría Monica en el final. Tenía en algunas versiones un papel mucho mayor en la gran batalla que estaba ocurriendo".
Shakman también explica cómo era el final original que tenían pensado antes de los recortes por la pandemia. Este final involucraba a los hijos de Wanda, a Ralph Bohner, a Darcy (Kat Dennings) y al Señor Scratchy, el conejo de Agatha: "Teníamos algo planeado para el Señor Scratchy que no pudimos hacer porque el final tenía demasiadas piezas de ajedrez. Pero teníamos toda una secuencia en la que Darcy, Monica y Ralph se encontraban con los niños en casa de Agatha, y piensan que quizás deberían robar el Darkhold del sótano porque los niños lo vieron cuando estaban secuestrados. Bajan a coger el libro y cuando se acercan a cogerlo el conejo salta delante del libro. Y ellos dicen: 'Oh, es el Señor Scratchy, ¡es el mejor!' y se acercan a acariciarlo y entonces bufa y ocurre una transformación a lo 'Hombre lobo americano en Londres' en el que el conejo se convierte en un gigantesco demonio. Y pasamos a una set piece a lo 'Los Goonies' en la que intentan escapar del conejo. La rodamos pero no pudimos terminar los efectos visuales. Era una secuencia genial, súper divertida y todo el mundo estaba genial en ella, pero acabamos descartándola porque era un desvío enorme en medio de todo lo que estaba pasando".
Llegaron a ser 10 capítulos
Además de esta trama, Matt Shakman también admite que sí llegaron a tener en algún momento planteados diez episodios y no nueve pero que acabaron juntando algunos "para que el ritmo funcionara mejor". También dice que la idea inicial era estrenar los tres primeros capítulos a la vez para que el público hubiera tenido un vistazo mayor a la parte más Marvel de la serie pero iban tan pillados de tiempo que tendrían que haber retrasado el estreno del último capítulo, así que optaron por estrenar solo dos y no hacer ningún parón.
