Los próximos 10, 11 y 12 de noviembre llega a IFEMA la Heroes Comic Con de Madrid. Tras las últimas ediciones, el concepto se ha ido modelando para llegar a lo que se plantea esta vez. "Cuando nos hicimos con el salón del cómic de Madrid, era imposible que creciera más, porque la organización era de apasionados del cómic, pero no eran profesionales del tema", dice María José Navarro Muñoz Cobos, directora general de Easyafairs Iberia, organizadores de Heroes ComicCon Madrid,
"Tuvimos que rediseñar y reposicionar el salón".
El principal atractivo del nuevo salón es sin duda su panel de invitados, encabezado por Frank Miller, diseñador también del cartel de la Comic Con. Miller es creador de una larga lista de cómics (entre los que destacan sus historias de Batman), y llevó también algunas adaptaciones a la gran pantalla como 'Sin City' y '300'. El dibujante firmará el cartel oficial a todos aquellos con paciencia suficiente para hacer la fila.
Pero que Miller sea el cabeza de panel no resta importancia al resto de invitados, que forman parte de uno de los mejores carteles, si no el mejor, en Europa hasta el momento. Otro de los protagonistas será Bill Sienkiewicz, creador de personajes como Legión. El evento contará con la presencia de Paul Levitz, guionista y escritor sobre cómics que, además, fue presidente durante años de DC Comics. También estará Fabian Nicieza, uno de los creadores del héroe Deadpool.
Bruce Timm es otro de los nombres que están en la lista, creador de varias series de animación. Y Mark Brooks, dibujante cuyo proyecto más destacado en los últimos años es el cómic de 'Star Wars' protagonizado por Han Solo. Paul Gulacy, dibujante de Marvel y DC, es el último de que destacamos aquí, pero no de los invitados al evento.
El coordinador general de la alcaldía, Luis Cueto, ha querido destacar la importancia de los talentos españoles implicados en el proyecto. El evento cuenta con nada menos que 77 jóvenes, uno de los cuales, Santiago Arcas, fue el encargado de dar color al cartel diseñado por Miller a petición específica del autor. Premios y concursos impulsarán a dibujantes y escritores, entre otros, en un acontecimiento que estará cubierto durante los tres días por la radio municipal M21.
Mucho más allá del cómic
La colaboración con cadenas de televisión como Netflix y Fox es otra de las novedades que incluye la nueva edición del salón. Ambas conforman un puente que difumina el límite entre cómics y series, destacando la saga de 'The Defenders' en el caso de Netflix y la serie 'Legión', del universo de los X-Men, en el de Fox.
No es, ni muchísimo menos, el último evento de este tipo que ha tenido lugar en Madrid en los últimos años. Los soldados imperiales conquistaron las calles con el último estreno de 'Star Wars', y también avistamos a Diana Prince en algunas plazas cuando llegó 'Wonder Woman' a los cines españoles. Y es que la ciudad es un gran centro de la cultura pop; uno de los objetivos de esto es que desde lugares como Hollywood se vea a la capital con todo su potencial. Como afirma Navarro Muñoz Cobos: "Nuestra ambición es que la ciudad se vista de cómic".
Las seis cosas que más nos han gustado de 'The Defenders' y la que no
La duración
Ese es el mayor problema de este universo de series, las trece horas de televisión de las que disponen se se les suelen quedar grandes, resulta curioso que una plataforma como Netflix, que no está sujeta a grandes restricciones formales, caiga una y otra vez en el mismo patrón. Es difícil de creer que las historias de personajes tan dispares siempre consigan durar el mismo número de minutos, y es que es imposible. Por eso, que 'The Defenders' conste de ocho capítulos que equivalen a una semana en el tiempo de los personajes es un gran acierto, con todo, el primer episodio consiste en un prólogo donde parece que vamos a caer en los mismos vicios que la segunda temporada de Daredevil con el infame diálogo de cuarenta minutos con The Punisher, pero no. El miedo es transitorio, y a partir del segundo episodio la cantidad y calidad de las cosas que pasan alcanzan un gran nivel.
Los secundarios
La condensación de tramas también nos ha hecho un favor en este sentido. Los guiones alargados dan lugar a tramas secundarias imposibles. Y además, en muchos casos, a personajes tremendamente antipáticos con los que es difícil tener empatía (vecinos de Jessica Jones, os estoy mirando a vosotros). Además, los personajes más antiguos, Matt y Luke, por ejemplo, repiten un esquema de cómic antiguo en cuanto a los personajes que les acompañan, la novia y el amigo, que chirrían en un mundo hiperrealista y moderno como el que quieren retratar. Pero esto en 'The Defenders' no pasa, aparecen sólo los secundarios más importantes y produce mucha satisfacción verles interactuar. En el caso de las secundarias más importantes como Claire y Coleen su papel es muy pertinente y aportan muchísimo a la trama hasta el clímax, y es que estas dos chicas, junto a Misty, nunca han sobrado.
El 'Fan-Service'
Este concepto está un poco denostado últimamente, pero aquí lo usamos con toda la positividad del mundo, los fans de las series y los cómics querían ver a sus héroes juntándose en pantalla y ver como se relacionaban. Y no han defraudado. Jessica y Matt han tenido una relación eléctrica, Luke y Danny han construido en pocos capítulos un compañerismo que recuerda mucho a la amistad legendaria que tienen en los cómics, sus diálogos son maravillosos, y nos dejan con ganas de más. Los crossover se hacen para eso, para ver interactuar a personajes muy distintos entre sí y crear nuevos universos compartidos, aquí lo han conseguido con creces. El equilibrio entre las series principales y el cross-over es muy delicado, tienen que crear una serie nueva y a la vez respetar y hacer avanzar las series que la componen. Aquí se ha logrado.
Jessica Jones
Es una de las estrellas de la función, por muchos y justificados motivos. Jessica es el único personaje no creado en los años 60, y eso se nota. Allí donde Luke, Danny y Matt tienen que hacer malabarismos para mantener su esencia e integrarla en un mundo moderno y realista, Jessica navega libre y feliz. Bueno, a lo mejor 'feliz' no es la mejor palabra para describirla, pero su personaje funciona perfectamente. Sin historias de monjes inmortales, sin sentidos hiper-aumentados, sin experimentos en la cárcel. Hasta su estilo de lucha se está convirtiendo en una marca de la casa tan importante como sus tremendos 'one-liners'. Jessica pelea como lo que haríamos cualquiera de nosotros si de repente adquiriéramos super-fuerza. Empujaríamos a cosas y a gente hasta que no se levantaran más. Sin sutilezas. Un elemento de los cómics que habíamos echado en falta en las series es cuando Jessica funciona en oposición a los super-héroes más fantásticos, y aquí lo vemos de manera brillante. Esta aparición de Jessica ha servido para que aumente exponencialmente las ganas que tenemos de ver su segunda temporada, que se espera para el próximo invierno.
La Mano tiene sentido (por fin)
La Mano es una organización criminal de ninjas sobrenaturales que han servido como enemigo de múltiples héroes en los cómics Marvel. Su líderes y objetivos han cambiado ligeramente para cada ocasión, adaptándose a cada caso. Pero siempre han sido útiles como comodín, en especial porque al ser casi-zombies los héroes con impulsos más sanguinarios como Lobezno, podían dar rienda suelta a su furia más sanguinaria. La Mano lleva asomando su malvada cabeza desde el final de la primera temporada de Daredevil, aunque las apariciones de estos niñas han sido extrañas, desordenadas y sin un objetivo claro. Pero esto por fin ha cambiado, las incongruencias en sus supuestos planes, ahora raptando a héroes, ahora intentando matarles, ahora dejándoles marchar, ahora raptando a Elektra adquieren forma y sentido en esta mini-serie. Y es en gran parte gracias a Sigourney Weaver, ejerciendo las labores de malvada absoluta y dando sentido a la organización y a sus planes. Incluso han dado sentido al personaje de Stick (Scott Glenn) del que por fin hemos conocido su agenda secreta. Nos ha proporcionado además, una decente anti-heroína encarnada en Elektra (Élodie Yung), con una presencia muy amenazante y una historia de amor trágica, Acaba la serie con una organización cancelada, pero hay alguna que otra miembro que cual cucaracha acaba en paradero desconocido.
Las peleas
Finn Jones, ante la pregunta de si la calidad de las peleas de su personaje había aumentado en la mini-serie respecto a Iron Fist, dijo que él no ha notado cambio en la calidad, pero sí desliza que el equipo de especialistas y el cámara han cambiado, y eso se nota, vaya que sí se nota. La supuesta habilidad del Puño de Hierro Inmortal comienza a verse representada. Las secuencias de acción siempre han sido muy importantes para Daredevil, y aquí han alcanzado las expectativas, incluso la combinación con dos personajes tan poco delicados peleando como Jessica Luke ha aportado, no ha restado, y hemos tenido no una si no varias escenas a la altura de la famosa 'Pelea del Pasillo' de la primera temporada de Daredevil.
Lo que sigue sin funcionar, Iron Fist
Esto sigue sin funcionar, aunque muestre signos de mejoría. Jessica, Matt y Luke han conseguido ser personajes redondos, capaces de llevar una serie plagada de defectos y zonas oscuras y salir más o menos airosos, además, su combinación hace que brillen aún más. Pero no es el caso de Danny Rand, el excesivo realismo de estas series nunca le ha sentado muy bien al personaje. Los orígenes místicos de Danny, de la ciudad perdida de Ku'Lun y los dragones han necesitado de una mini-serie como ésta para adquirir cierto peso. Es el problema de los personajes creados hace tanto tiempo, hay que hacer muchos saltos de fe, y hasta el final de esta serie no se han empezado a hacer. Pero mientras tanto hemos tenido al peor personaje con diferencia de los cuatro ejerciendo un papel clave en la trama, y eso pesa en el resultado final. Al universo Malflix le falta aún abrazar aspectos del genero super-heroico que están obviando deliberadamente. En personajes como Jessica, Luke y en menos medida Matt pueden permitírselo, los personajes tienen espacio para crecer en ámbitos más realistas. Pero no es el caso de El Puño de Hierro Inmortal, Héroe de la Ciudad Perdida de Ku'lun. La elección del actor y cómo está escrito el personaje tampoco ayudan, la solemnidad y la inconsciencia del personaje, en manos del actor acaban siendo simplemente diferentes grados de persona irritante. La gran suerte que tiene Iron Fist es contar con una de las mejores y más desaprovechadas secundarias, Colleen Wing, que hacia el final de la mini-serie finalmente tiene algo del espacio que se merece.