Hace mas de dos años 'Mad Max: Furia en la carretera' se convirtió en un fenómeno mundial "inédito" en la industria cinematográfica de estos días. Este "milagro" fue subrayado por la Academia de Cine americana otorgándole, nada mas ni nada menos, que seis estatuillas, más que El renacido (The Revenant) y Spotlight juntas. Ahora su prestigioso director entra en un litigio con la major inmiscuida en la película, Warner Bros., por impagos.
La productora de Miller, Kennedy Miller Mitchell, empezó esta demanda contra el estudio por impagos en septiembre.
Esta disputa se lleva a cabo en la Corte Suprema de New South Wales (Australia, país natal del director), excusando que, en este caso, la trifulca entre la productora Kennedy Mitchell Miller, y Warner Bros., es mejor que sean celebradas ahí que en el estado de California.
En su estreno 'Furia en la carretera', fue aclamada unánimemente por la crítica de todos los países y recaudó 378 millones de dólares en la taquilla mundial, antes de su triunfo en los Oscar.
El juez, David Hammerschlag, dijo que en el contrato de la realización de 'Furia en la carretera' se incluyó una condición en la que la productora Kennedy Miller Mitchell recibiría un bonus de 7 millones de dólares si "el presupuesto final" de la película no sobrepasa los 157 millones, después de que ciertos sobrecostes fuesen excluidos de dicho contrato.
"Según los cálculos de Warner Bros., 'Furia en la carretera' superó los gastos acordados", dijo el juez Hammerschlag. "Si esos cálculos están bien Kennedy Miller Mitchell no podrían acceder al bonus. La productora defiende que la propia major llevó a cabo una serie de decisiones que supusieron cambios y retrasos en la fase de producción que fueron usados en las cuentas que justificaban esos "sobrecostes". Si estos no estuvieran en esa cuenta el presupuesto de la película se quedaría en cifras más bajas de las acordadas".
Warner Bros. tuvo una conducta "engañosa"
La productora de Miller también defiende que Warner Bros. realizó un contrato de co-producción con Rat-Pac Entertainment, por un 12,3 % de los fondos de la película, rompiendo así el acuerdo de ofrecerle a la productora la primera oferta antes que a otras. También argumenta que Warner Bros. tuvo una conducta "engañosa" por no informarles de la inclusión de los sobrecostes ocasionados por las decisiones de la major.
Miller y Mitchell contaron a Fairfax Media que estaban decepcionados con que "después de todo el duro trabajo y el éxito del film la major no cumpliera con sus obligaciones" hacia ellos.
"Preferimos hacer películas con Warner Bros. antes que entrar en este litigio con ellos pero, después de que intentarlo año tras año, nos resulta difícil alcanzar una resolución satisfactoria y hemos tenido que presentar este recurso para intentar solucionarlo".
Por otro lado Warner Bros. les responde con breves palabras: "Estamos en desacuerdo y nos defenderemos con vigor en contra de esas acusaciones". Parece que no vamos a ver una secuela de 'Furia en la carretera' en mucho tiempo.