Si bien las alabanzas a 'Juego de Tronos' no han parado desde que se estrenara allá por 2010, con la última temporada emitida de la serie, la séptima, hubo un sentimiento generalizado de que la historia iba demasiado rápido, de que se realizaban demasiados saltos temporales. En un momento nos encontrábamos a un personaje en una parte del mapa y al siguiente estaba en la otra punta. Por primera vez, en Entertainment Weekly, los productores de la serie han hablado de esta polémica y han asegurado que no se repetirá en la nueva temporada.
"Para conseguir la octava temporada que queríamos, necesitamos acelerar las cosas en los anteriores capítulos", ha comentado el guionista Dave Hill, "pero realizamos muchos saltos temporales de los que la gente ni siquiera se dio cuenta. Podríamos haber puesto un cartel que dijera «Tres semanas después», pero no lo hicimos. A veces, para mover las piezas como quieres, tienes que hacer trampa". Aun así, asegura que en la nueva temporada se han centrado más en mantener la "consistencia" temporal.
D.B. Weiss, su showrunner y productor, le quita hierro al asunto: "No leemos todas esas cosas. No tengo ni idea de qué porcentaje de gente dice eso, pero puede que sea solamente un 1% de toda la gente que ve la serie". Otro productor, Byran Cogman, mira la polémica por el lado positivo: "Siempre hay que sacrificar algo, y supongo que esta polémica sea mejor que cualquier otra. Claro que puedes sentarte en tu casa y contar cuánto se tarda en viajar desde el punto A hasta el B y el resultado que salga, pues es lo que se tarda".
El final se acerca
El 14 de abril se estrenará la octava y última temporada de 'Juego de Tronos'. En total serán seis capítulos que irán desde los 50 minutos hasta la hora y veinte de duración. Los productores aseguran que será más "consistente" que la anterior tanda de capítulos, pero la verdad es que su duración completa será media hora más corta que la anterior, la más breve de toda la serie.