Las películas de George Miller están sufriendo una especie de maldición que puede estar sufriendo el propio director, porque van dos de dos. Si la secuela de 'Mad Max' se canceló por culpa de las lluvias y el mal tiempo que tuvieron en Australia, la secuela de los pingüinos bailarines tampoco pasa por su mejor momento.
'Happy Feet 2' parecía ser la principal prioridad de Miller, pero puede no estar recibiendo la ayuda necesaria. Hay que tener en cuenta que una película como 'Happy Feet' necesita animadores, compositores, etcétera; no se hace en dos minutos una película ganadora de un Oscar.
Twitteando ayuda
Un tweet de Stuart Cunningham, director del estudio de animación que se encargará de 'Happy Feet 2', Funzy az Hell, hace saltar las alarmas: "'Happy Feet 2' está experimentando retrasos... Necesitamos ayuda de fuera. Si puedes soportar parte de la carga, ponte en contacto con Dr. D".
Realmente la mala suerte persigue a George Miller. Un problema puede haber sido que han esperado demasiado para la secuela y ahora nadie esté interesado en involucrarse. Pero la primera película se ganó el corazón de la crítica, sería una pena que no le dieran otra oportunidad.
