Scarlett Johansson ('Lost in Translation', 'Historia de un matrimonio') se sentaba este lunes con Dax Shepard para hablar en su podcast, 'Armchair Expert'. En el episodio, de dos horas de duración, Shepard le pregunta sobre su experiencia haciendo algunas de sus películas más famosas, y la actriz no teme en adentrarse en el pasado para revelar, con sentido del humor, alguna de las anécdotas más embarazosas o complicadas.
Destaca por ello la película 'Her', escrita y dirigida por Spike Jonze, que le valió el Oscar a Mejor Guion Original, en la que Johansson pone voz a Samantha, un sistema operativo similar a Siri instalado en el teléfono de un hombre, Theodore, y con quien se crea una historia de amor más allá de los límites conocidos. Joaquin Phoenix ('Joker', 'En la cuerda floja') era su interés romántico. El momento que la actriz recuerda con mayor vergüenza fue cuando humano e inteligencia artificial mantienen relaciones sexuales por teléfono, pues tuvieron que grabar en un estudio los falsos orgasmos.
Johansson relata que se preparó mentalmente ese día para ser tener una actitud de "ponerse sucia", pues de lo contrario "habría estado petrificada". Sin embargo, la situación fue indudablemente incómoda cuando comenzaron a grabar. "Viene Joaquin, intentamos hacer una toma, pero él no podía", dice, contando que Phoenix parecía enfadado, a pesar de ya haber grabado la misma escena en persona. No cabe duda que la cosa era distinta en un estudio, donde, como narra la actriz, "estás en una caja, en un teatro raro, las luces están bajas, me estaba mirando y Spike está ahí". Añade que ella lo llevaba bien, pero el actor no. "Se fue del estudio, necesitaba una pausa".
"No quieres volver a oír tu voz en la vida, obviamente", dice Scarlett. "No quieres oír cómo suenas cuando tienes un orgasmo. Definitivamente no quieres oír cómo suenas cuando tienes un orgasmo falso", admite entre risas. Aunque 'Her' se estrenó hace casi diez años, Johansson afirma que "incluso pensar en ello ahora me produce pánico". Sin embargo, defiende y recomienda la vergüenza, calificándola como "el sentimiento más profundo y puro que hay".
A pesar de actuar solo con la voz, el rol le valió varias nominaciones a Mejor Actriz de Reparto. "Grabamos la película como catorce o quince veces", cuenta. "Lo hicimos tantas veces. Una y otra vez". La califica como "uno de los trabajos más desafiantes que he hecho".
Sexo en la industria
El podcast trata numerosos temas, siendo uno de ellos la sexualización dentro la industria, especialmente a la que están sometidas las actrices jóvenes, y de la que ella misma fue víctima al comenzar su carrera tan joven. Recuerda que tenía tan solo diecisiete años cuando protagonizó 'Lost in Translation' y cómo con el tiempo la encasillaron en una "extraña hipersexualización".
