La grandeza de Pixar no radica en su capacidad por mantenerse en lo más alto desde hace más de veinte años, sino en ser los primeros en plantar su bandera en las nuevas alturas. El ambicioso estudio ha sido responsable de algunos de los mayores hitos de la historia reciente de la animación, como el desarrollo de la animación por ordenador, y no ha bajado los brazos ni siquiera a la hora de desarrollar sus secuelas. No todas las continuaciones han alcanzado la calidad general del estudio, pero si hay una que destacar una por encima de todas las demás la elegida sería 'Toy Story 3'.
La tercera aventura protagonizada por Woody, Buzz y el resto de juguetes a los que conocimos en 1995 en la habitación de Andy, o que se incorporaron más adelante, no sólo nos brindó una deliciosa ración de nostalgia, sino que nos permitió disfrutar de una original combinación de drama y comedia que trascendía a los límites de las miradas infantiles. Gracias a ese maduro enfoque, que englobaba a todo tipo de públicos, la película dirigida por Lee Unkrich aglutinó 1.066 millones de dólares en taquilla y obtuvo los mejores datos de recaudación del estudio hasta el momento.
Ese abrumador éxito también fue reconocido por los miembros de la Academia, que no se olvidaron de nominar a 'Toy Story 3' a cinco premios Oscar, llegando a estar presente en la categoría de mejor película. Finalmente, Pixar se llevaría a sus instalaciones el premio a la mejor película de animación y a la mejor canción original. Y hay que recordar que aquel no fue el final de la saga más popular del estudio, ya que en 2019 podremos ver su cuarta entrega. Antes de que eso suceda, os ofrecemos varias curiosidades de una de las películas más taquilleras de la historia y una de las cumbres del cine de animación reciente:
Curiosidades de 'Toy Story 3'
Made in Taiwan
Cuando Disney y Pixar estuvieron a punto de romper su prolífica unión en 2004, en buena parte debido a la arrogancia de Michael Eisner, responsable de la primera compañía, Disney creó una compañía que se encargaría de desarrollar secuelas de las películas de Pixar sin contar con sus creadores originales. Uno de los primeros proyectos abordados fue 'Toy Story 3', cuya trama por aquel entonces se iba a centrar en Buzz Lightyear. El juguete espacial sufriría un problema que obligaría a Andy a mandarlo a Taiwan a arreglarlo, pero sus compañeros descubrirían que en la fábrica se dedicaban a cambiar los juguetes rotos por otros nuevos, por lo que también emprenderían un alocado viaje a Asia para rescatarle. Esa idea se fue por el retrete cuando los dos estudios hicieron las paces, aunque Buzz quedó un poco tocado cuando finalmente se hizo la tercera entrega de la saga.
Siempre amigos
Aunque las películas de animación junten a multitud de personajes en pantalla, sus dobladores casi siempre hacen sus grabaciones por separado. La necesidad de repetir constantemente las líneas impide que se grabe por parejas o en grupo, pero Tom Hanks y Tim Allen rompieron con esa norma no escrita en 'Toy Story 3'. Los dos actores, voces de Woody y Buzz Lightyear, ya habían compartido un día de doblaje durante la creación de la primera entrega, y para la tercera querían aprovechar al máximo su química, por lo que convencieron al estudio para que les dejaran grabar cara a cara.
Barrera destrozada
La gran prueba del éxito de 'Toy Story 3' entre el público fueron esos impresionantes 1.067 millones de dólares que acumuló en la taquilla mundial tras su estreno. De esa manera se convertía en la primera película animada en superar la barrera de los mil millones de dólares; hazaña que sería repetida posteriormente por 'Frozen: El reino de hielo' (1.276 millones), 'Los Minions' (1.159 millones), 'Buscando a Dory' (1.028 millones) y 'Zootrópolis' (1.023 millones).
Cambio de idea
Durante la mayor parte del proceso la película iba a contar con un oso amoroso. Unkrich se inspiró en la serie infantil de los años ochenta para construir la apariencia de Lotso, ya que su aspecto era similar al de aquellos adorables y poderosos osos de colores. Sin embargo, al final de la creación del storyboard, Unkrich eliminó esa idea de la cabeza y trató de dotar a Lotso de un aspecto más distintivo, que jugaría un papel clave en su dualidad entre lo lúgubre y lo achuchable.
Prison Break
Si algo necesitan los animadores para construir sus mundos plagados de elementos originales son centenares de referencias. En el caso de la secuencia de la huida de la guardería Sunnyside, los creativos de Pixar vieron una cantidad abrumadora de películas centradas en el entorno carcelario. Como señaló el director Lee Unkrich: "Hay muchas películas sobre la cárcel, y creo que vimos cada una de ellas."
Récords a tutiplén
'Toy Story 3' no fue sólo la primera película en rebasar esa marca de los mil millones de dólares, sino que también hizo historia en los Oscar. La película de Pixar fue la primera secuela en ser nominada a mejor película sin que sus predecesoras hubieran pasado por la categoría reina, y además es la única secuela animada que ha recibido esa nominación a mejor película.
El reto de la basura
Con el paso de los años la animación por ordenador se ha vuelto hiperrealista. En 'El viaje de Arlo' ya nos encontramos con paisajes que no tenían nada que envidiarle a los de la vida real, pero siempre hay retos que superar para dar esa sensación de realismo. En lo que respecta a 'Toy Story 3', esas dificultades no tuvieron nada que ver con el agua o el pelaje de los peluches, sino con la textura de las bolsas de basura. Por eso los animadores pasaron semanas observando las propiedades reflectivas de esas bolsas.
Osito peligroso
Uno de los momentos más demoledores de la película fue aquel en el que se mostraba el origen de las intenciones malignas de Lotso. Pero hay que remontarse mucho antes de 'Toy Story 3' para encontrarnos con la primera aparición del oso rosa, ya que Lotso se dejó ver en la primera entrega de la saga en 1995. En concreto, pudimos verle brevemente en la escena en la que Woody hablaba con todos los juguetes, poniéndoles al tanto de su plan. La falta de rodaje de la animación por ordenador impidió el desarrollo del personaje de Lotso en aquella cinta, porque John Lasseter le quería incluir, pero las dificultades que suponía animar su pelaje obligaron a meterle en el cajón durante unos cuantos años.
El elegido
Si Vin Diesel se ha ganado un especial hueco en Marvel por decir una sola frase, los responsables de 'Toy Story 3' necesitaban dotar a su espeluznante bebé de una voz igual de magnética. Por eso escucharon a multitud de infantes repetir la única palabra que decía ese muñeco en la cinta: "Mamá". Casualmente, el seleccionado fue un bebé llamado Woody, aunque Unkrich bromeaba con que le habían cogido precisamente con su nombre.
Cierre redondo
No es extraño que las películas tengan una estructura circular, que su primer plano y el último tengan similitudes, para reflejar la evolución de los personajes o la constante de la película. En el caso de 'Toy Story 3', el último plano antes de la entrada de los créditos no sólo coincide con el primero de la cinta, sino con el mismísimo comienzo de la franquicia. El cielo azul añil plagado de nubes blancas, un amplio lienzo para pintar las épicas aventuras de Woody y Buzz.