[AVISO: Este artículo contiene SPOILERS de la sexta temporada de 'Juego de Tronos']
En el tercer capítulo de la sexta temporada de 'Juego de Tronos' no hemos tenido un gran shock como en los dos primeros, y tampoco es que hayan muerto personajes muy importantes. Pero evidentemente no nos iban a dejar sin nuestra dosis de sangre y de personajes que nos dicen adiós.
En este capítulo, titulado 'Oathbreaker', hay dos escenas concretas en las que se saldan la mayor parte de las muertes. La primera es el rumoreado flashback de la Torre de la Alegría, en el que gracias a Bran vemos cómo fue el enfrentamiento entre Eddard Stark y Arthur Dayne. Así, vemos cómo el relato tantas veces contado no sucedió exactamente como se creía. Aunque sí acaba con el mismo resultado.
La venganza
La siguiente es al final del capítulo, cuando Jon Nieve, ya paseando por Castillo Negro, se cobra su merecida venganza contra los traidores que le mataron a puñaladas. Dos Guardias de la Noche y, sobre todo, Ser Allister Thorne y Olly acaban colgados por el cuello, dejando tras de sí una mueca grotesca y a un Jon Nieve que tiene perfectamente claro que "su guardia ha terminado".
Esta vez no hemos tenido un gran baño de sangre, pero sí un poco de justicia, que nunca está de más. Se nos hace raro ver a Ramsay Bolton sin ningún asesinato en todo el capítulo, eso sí. ¿Cuántas bajas nos dejará el próximo episodio, titulado 'Book of the Stranger'? El 15 de mayo lo descubriremos.