"No vayáis a ver 'Tenet', ni cualquier otra película, al cine. Ya está, ya lo he dicho". Este tajante mensaje, lanzado en uno de los veranos más catastróficos que recuerdan las salas de cine, es aún más chocante si tenemos en cuenta quién lo lanzaba: Scott Derrickson, director de películas como 'Sinister' y 'Doctor Strange (Doctor Extraño)'. Si no fuera por lo raro que está siendo 2020 diríamos que Derrickson se está disparando en su propio pie, pero lo cierto es que no está solo: hay toda una corriente de pensamiento en Estados Unidos que defiende lo mismo, dentro y fuera de Hollywood. "No hay un escenario posible en el que ir al cine ahora mismo sea una buena idea", dicen algunos expertos, que consideran esta opción de ocio una innecesaria "exposición peligrosa".
speaking to my fellow Americans of course
? N O S ? ? I ? ? ? ? ? ? O ? S (@scottderrickson) August 22, 2020
Eso es en Estados Unidos, claro, el país más golpeado por el coronavirus. En España ir al cine sí es seguro en tiempos de COVID. O al menos no menos seguro que ir en transporte público o a un restaurante.
"Las medidas de los cines me parecen bastante prudentes", dice Juan José Badiola, experto en Enfermedades Transmisibles Emergentes en la Universidad de Zaragoza. Esas medidas son sencillas: aforos reducidos para respetar una distancia interpersonal de metro y medio como mínimo, limpieza y desinfección a fondo por parte del personal de las salas y, por supuesto, el uso de la mascarilla obligatorio (y, a diferencia de la chica de la foto, cubriendo la nariz).
"Es obligatorio el uso de mascarilla para poder entrar en nuestras instalaciones y los empleados de Cine Yelmo se encargan de que esta medida se cumpla a rajatabla", nos cuenta Javier Saura, Gerente de Marketing de Cine Yelmo. Pero lo cierto es que la vigilancia de los empleados de los cines tiene un límite, y si has ido a ver una película últimamente puede que te hayas encontrado con algún espectador que decide quitarse la mascarilla en algún momento del metraje (si no desde que empiezan los tráilers).
Badiola insiste en que es responsabilidad de cada uno mantener esta medida clave para evitar el contagio: "Aparte de la obligatoriedad, yo aconsejo mantener la mascarilla porque una persona asintomática puede ir al cine sin ser consciente de estar infectada". En el cine es especialmente importante porque un espectador puede pasar unas dos horas sentado en un espacio cerrado, rodeado de desconocidos. "Es tiempo suficiente para que se formen partículas gruesas y finas y se queden en forma de aerosol", explica el científico, y asegura que la mascarilla impide la proyección de estas partículas al medio ambiente. "Aunque sea por solidaridad con los demás, deberíamos hacerlo. Es una cuestión de responsabilidad personal, aunque sea un poco molesto".
¿Y qué pasa con las palomitas? La mayoría de los cines sigue ofreciendo servicio de bar, vendiendo comida y bebida, por lo que los espectadores están en su derecho de ingerir alimentos en una sala de cine, tal y como lo haría también en un restaurante o un bar. Pero Badiola no cree que sea recomendable: "Es mejor no comer en estas circunstancias. Limítate a ver la película. Aunque este virus no se transmite por la vía alimentaria, el problema es que para comer te quitas la mascarilla".
La limpieza y la renovación del aire son clave
Además del aforo reducido, la distancia interpersonal y el uso de mascarilla hay dos medidas muy importantes por parte de los cines: la limpieza y desinfección entre sesiones y la renovación del aire acondicionado.
"Todas nuestras salas son desinfectadas de manera exhaustiva después de cada pase", cuenta el portavoz de Yelmo. "Hemos aumentado de forma considerable el tiempo entre sesiones para poder realizar una limpieza en profundidad después de la proyección de cada película (...), limpiamos de manera individualizada todas las butacas y superficies de contacto de la sala, entre los que destacan algunos como reposabrazos, respaldos de butacas, barandillas, tiradores de puerta y puertas".
En cuanto a la ventilación, es clave según Badiola "que los cines garanticen que el aire acondicionado se renueva con el exterior. Si no se hace, las partículas simplemente se trasladarían de un lado de la sala al otro". Tanto Yelmo como Cinesa nos aseguran que han adaptado sus sitemas de filtración de aire y ventilación, siguiendo las indicaciones del Ministerio de Sanidad resumidas en este documento.
El público está satisfecho
Este verano un estudio difundido por Europa Press aseguraba que el 90% de los espectadores estaban satisfechos con las medidas de seguridad que los cines han implementado contra el coronavirus. Entre ellas, además de las ya mencionadas, estaba la de eliminar el corte físico de las entradas. Cinesa además aconseja "optar por medidas de compra que impliquen menos contacto, como la compra online tanto de entradas como de productos de bar, o a través del uso del contactless si la compra se hace in situ".