El actor Jake Gyllenhaal se ha tomado un tiempo para, en medio de la promoción de 'Southpaw' y a punto de empezar la de su nueva película 'Everest', reflexionar sobre algunos de los papeles de superhéroes que le ofrecieron en su momento y que finalmente interpretaron otras personas, aunque no parece que le afecte mucho haber perdido esa oportunidad.
En 2002, Tobey Maguire, el actor que encarnó a Spiderman, se lesionó en el rodaje de la película 'Seabiscuit, más allá de la leyenda', por lo que estuvo a punto de no poder interpretar al hombre araña en su segunda entrega. En este tiempo, el director de la película, Sam Raimi, no tardó en proponer el papel a Gyllenhaal por si el actor original no se recuperaba a tiempo para el rodaje de la secuela. Maguire, efectivamente, se recuperó y Gyllenhaal se quedó con las ganas de ser superhéroe.
"No puedo decir ni que me arrepienta ni que me alegre"
Un año después, Gyllenhaal volvió a intentar ponerse en la piel de un superhéroe, en este caso uno con capa. En 2003 el director Christopher Nolan vio al actor en un casting para ser el Caballero Oscuro en la película de 2005 'Batman Begins', pero parece que finalmente el director optó por otro de los que estuvieron en el casting, Christian Bale.
El actor afirmó que "todo lo que pasa, pasa por algo". "A mi me ofrecieron ambos papeles, aunque luego te das cuenta de que siempre hay alguien más interesante y más capacitado para interpretar un papel que tú. Al fin y al cabo no puedes esperar conseguir todos lo papeles a los que aspires. Así que no puedo decir ni que me arrepienta ni que me alegre de no haber conseguido esos papeles como superhéroe", comentó.
