Jennifer Lawrence está haciendo historia. Con tan solo 26 años y gracias a los nada más y nada menos que 46 millones de dólares obtenidos en forma de ganancias, se ha alzado por segunda vez consecutiva con el título de la actriz mejor pagada según la revista Forbes. La causa principal no es otra que la última entrega de 'Los Juegos del Hambre', además de las campañas de publicidad para Dior.
Lawrence, la actriz más joven incluida en la lista, está seguida por Melissa McCarthy, quien fuera la tercera mejor pagada el año anterior. Con lo cobrado por 'Cazafantasmas' ha sumado unas ganancias de 33 millones, lo que se traduce en un aumento del 43,5%. Así pues, Scarlett Johansson desciende a una tercera posición con 25 millones de dólares.
El top 5 lo cierran Jennifer Aniston y Fan Bingbing, la actriz y cantante que lideró la lista de famosos de China durante 2013, 2014 y 2015. Charlize Theron se encuentra en sexta posición seguida por Amy Adams, que recientemente ha estrenado 'Batman v Superman: El amanecer de la Justicia', y cuyos ingresos han sido de 13,5 millones de dólares.
Julia Roberts, habitual en el ranking de Forbes, ostenta la octava posición, mientras que Mila Kunis y Deepika Padukone cierran la lista. Algunas ausencias notables son las de Sandra Bullock o Angelina Jolie, que han alcanzado el primer puesto en diferentes años. Renée Zellweger, Cate Blanchett o Kristen Wiig también han quedado fuera de la lista, ya que sus ganancias no llegaban a los 10 millones de dólares.
La más taquillera
No será la mejor pagada, pero Johansson ya es oficialmente la actriz más taquillera de todos los tiempos según un informe realizado por Box Office Mojo. Solo en Norteamérica (incluyendo Estados Unidos y Canadá), las ganancias de sus producciones rebasan los 3.300 millones de dólares, siendo la única mujer en entrar en el top 10 de las estrellas de Hollywood más rentables si tenemos en cuenta el sexo masculino.
7 razones por las que adorar a Jennifer Lawrence
Porque es muy graciosa
Cuando es entrevistada, siempre tiene una respuesta, las más de las veces simpática o ingeniosa. Utiliza la ironía y el sarcasmo como herramientas recurrentes en su discurso. E incluso cuando tropieza en una gala y cae, sale airosa de la situación con una sonrisa. Además, ¿qué otro actor o actriz regala a las cámaras muecas como lo hace Lawrence?
Por su elegancia
O, quizá, deberíamos decir su 'porte'. Bien con un traje en una gala, bien con unos vaqueros en una entrevista o bien fotografiada en chándal mientras hace la compra, lo cierto es que a la muchacha todo le sienta bien.
Porque es buena actriz
Ha demostrado tener un amplio registro: desde que se diese a conocer con su papel de adolescente madura en el thriller 'Winter's Bone', cuando apenas contaba con 20 años, hasta su representación de Katniss, la actriz de Kentucky ha dejado claro que es capaz de ponerse en la piel de multitud de personajes de muy diversa índole. Drama, comedia o thriller, por ahora no ha flaqueado ante ningún género. Además, varios premios de peso la abalan: su papel en 'El lado bueno de las cosas' le granjeó el Oscar y el Globo de Oro como Mejor Actriz, y se llevó otro Globo de Oro, como Mejor Actriz de reparto, por su genial interpretación de Rosalyn Rosenfeld en 'La Gran Estafa Americana'.
Porque se ríe de sí misma continuamente
Y no solo de manera explícita, en las entrevistas. En los últimos meses, hemos visto cómo florecía y se afianzaba la amistad entre Lawrence y la también actriz y comediante Amy Poehler. Juntas, han protagonizado multitud de situaciones y escenas cómicas, demostrando la poca vergüenza que les supone manifestarse en público tal y como son. La actriz es una bromista compulsiva, y tanto le da reírse con el resto de compañeros de profesión como de sí misma (cuando tropieza en unas engalanadas escaleras o cuando le hacen una pregunta íntima).
Porque podría ser tu vecina
Su rostro tiene algo... familiar, entrañable. Ello, sumado a su naturalidad y desparpajo, provoca una sensación de cercanía que después se extrapola a los papeles que representa. Además, sus rasgos, un tanto alejados de los cánones de belleza arquetípicos, la colocan en un lugar privilegiado: podría ser de cualquier lugar, lo que acentúa su faceta camaleónica. En definitiva, Lawrence empatiza de manera casi instantánea con el público, algo esencial para una intérprete.
Porque cuando toca, se pone seria
Cuando comenzó el flujo de imágenes filtradas en el movimiento hacker conocido como The Fappening, ella fue una de las principales afectas; las fotografías de J. Law desnuda y en escenas íntimas corrieron como la pólvora por la red. Y ella, lejos de ruborizarse o esconderse hasta que la tormenta pasara, dio la cara, condenando la acción y explicando lo que creyó era necesario explicar acerca de las comprometidas imágenes. Y a todos nos quedó clarísimo, y desde entonces nadie tiene nada que reprocharle al respecto. Además, está el asunto de su activo papel pro-feminista, tan en boga en Hollywood. Cuando toca, la actriz no se calla y arremete contra quien o lo que toque, y lo hace con elocuencia.
Porque disfruta haciendo lo que hace y transmite vitalidad
Ella misma lo ha confesado: se siente viva cuando interpreta (y no tanto en las galas de rigor), y eso se ve reflejado en pantalla. Además, la mayoría de la veces sus papeles son de mujeres fuertes, con carácter y personalidad, y es inevitable no pensar que una parte de la auténtica Lawrence reside en ellos. En definitiva, son varias las facetas (algunas ya apuntadas) las que explican por qué la actriz transmite vida: su determinación y manera de desenvolverse (dentro y fuera de la pantalla), su belleza, su simpatía y su espontaneidad, entre otras muchas.