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MALENTENDIDOS

Jessica Alba cabrea a los guionistas

Las declaraciones de una entrevista mal redactada daban a entender que la actriz desprestigiaba el trabajo de los guionistas.

Por Jesús Agudo Más 13 de Diciembre 2010 | 09:58
El redactor más veterano de esta web. Palomitero y fan de que las series estrenen un capítulo por semana.

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Cambias una coma y puedes darle un sentido totalmente distinto a una información. Más si es una entrevista de cuatro horas. Y si no que se lo digan a Jessica Alba, que sin querer, y sin siquiera pensar así, ha despertado la ira de los guionistas.

Jessica Alba en Ahora los padres son ellos

Según las declaraciones que aparecieron en una entrevista para la revista Elle, la actriz dijo que "los buenos actores nunca usan el guión a no ser que esté impresionantemente bien escrito. Todos los grandes actores con los que he trabajado dicen lo que quieren decir". Los guionistas no tardaron en contestar, siendo el primero John Augusta, que le dijo que "siguiendo tu lógica, no has trabajado nunca con buenos actores y buenos guiones a la vez".

La actriz ha aprovechado la promoción de 'Ahora los padres son ellos' para desmentir que ella pensara eso. Considera que ha sido totalmente parafraseada y sacada de contexto. "Fue una entrevista de cuatro horas condensada en un artículo de página y media para una revista de moda". Recalca que sin guión, un proyecto no comienza.

Delfines que saben improvisar

También hizo algún chiste sobre uno de sus primeros trabajos: 'Las nuevas aventuras de Flipper', en las que contaba con sólo 13 añitos, y consideraba que el delfín falso sabía actuar mucho mejor que ella y por eso a veces podía improvisar, pero ella no era capaz. Bromeaba que cuando él "le hablaba" ella no sabía responderle, "tardé 15 años, y mucha terapia, en aprender".

Una vez terminado el tiempo de chiste, se puso seria y comenzó a decir que no tenía el coraje y ni siquiera sabía cómo saltar con algo suyo, no sabe salirse de las líneas del guión, y que incluso cuando los actores lo hacen, ella no sabía qué hacer.

No es lo mismo que una actriz admita que tiene problemas para improvisar en un rodaje, que piense que un guión es inútil. Por lo menos se ha aclarado y ya tenemos otro ejemplo del poder del lenguaje.

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