En 2010, la productora Pathe intentó llevar adelante un proyecto en el que Keira Knightley encarnaba a la princesa Diana de Gales. A la vista está que no salió bien, y no hubo más intentos de resucitar la película. Sin embargo, Ecosse Films ha rescatado la idea de un biopic sobre la llamada princesa del pueblo, sin Keira Knightley entre sus integrantes.
El film se llamará 'Caught in Flight', lo protagonizará Jessica Chastain, y se intentará vender en la American Film Market, donde tiene muchas posibilidades de encontrar distribución. Si todo sale como desean, la película entrará en fase de pre-producción en marzo de 2012, y se rodará en numerosos lugares, como Angola, Pakistán, el sur de Francia y París, el lugar donde Diana murió en aquel fatal accidente de coche. El presupuesto será de unos 15 millones de dólares.
En la dirección veremos al alemán Oliver Hirschbiegel, director de 'El hundimiento', 'Invasión' y 'Cinco minutos de gloria'. El argumento gira en torno a la fallecida princesa de Gales, que experimenta en secreto una aventura con un cirujano de corazón, el doctor Hasnat Kahn. Los responsables describen la película así: "Una historia de amor entre una princesa encerrada en una torre y un hombre corriente".
Basado en una historia "real"
La princesa y el doctor se conocieron en 1995, cuando ella visitaba un amigo que se estaba recuperando de una cirugía de corazón. Pasaron 2 años de romance en secreto, durante los cuales Diana le llamaba Mr. Wonderful, que vendría a ser Señor Maravilloso. De hecho, hasta 2008 no se descubrió el asunto, cuando el Dr. Kahn desveló todo lo que ocurrió entre ambos, haciendo afirmaciones tales como que la relación era tan seria que Diana estaba pensando en convertirse al Islam.
Los que han tenido la oportunidad de leer el guión, escrito por Steven Jeffreys, han declarado que la princesa no está representada de una forma demasiado favorable. Se muestra como una persona dañada, que acecha al doctor una vez ha terminado la relación entre ambos. Tras 'El hundimiento', es difícil dudar de la capacidad de humanización que puede darle el director alemán a Diana.