Después de un retraso debido al coronavirus, el 7 de julio empezó el juicio entre Johnny Depp y News Group Newspapers, la editorial del diario británico Sun, y su editor ejecutivo Dan Wootton. El actor les ha demandado por supuesta difamación al publicar un artículo en 2018 en el que lo llamaban "wife beater" ("maltratador") y hablaban del supuesto maltrato continuado al que Depp sometía a su exmujer, Amber Heard.
The Guardian está informando a diario de cómo avanza un juicio que se espera que dure tres semanas y que está poniendo a prueba de una vez por todas la reputación del actor de 'Piratas del Caribe', y podría ser clave para el futuro de su carrera.
Depp intentó que Amber Heard no estuviera presente en el juicio, ya que no forma parte de la acusación ni de la defensa en este proceso legal, pero se lo negaron alegando que NGN y Wootton necesitan toda la información que la actriz pueda facilitarles. Un portavoz aseguró que Heard ya consiguió una orden de alejamiento por maltrato en 2016 y desde entonces ha intentado seguir adelante en su vida: "Es Johnny Depp quien ha provocado este procedimiento contra un diario británico y la ha arrastrado hasta las cortes del Reino Unido para dar pruebas de algunos de los momentos más dolorosos de su vida".
Exceso de alcohol y drogas
El actor de 57 años empezó el primer día del juicio admitiendo que bebía excesivamente (llegó a gastar hasta 30.000 dólares mensuales en vino antes de acudir a una clínica de rehabilitación), tomaba drogas (desde los 11 años, desde cocaína y éxtasis hasta LSD y cannabis) y destruía habitaciones de hotel, pero niega haber sido violento contra Amber Heard, unas acusaciones que la actriz se habría inventado.
Declarando como testigo, Depp dijo que siempre ha aspirado a ser un "caballero del sur" y aseguró que Heard le pegó puñetazos en la cara en repetidas ocasiones y que una vez le cortó un trozo del dedo con una botella de vodka. También la llamó "calculadora, con trastorno límite de la personalidad" y una narcisista que se había casado con él para avanzar en su carrera como actriz.
Según el actor de 'Eduardo Manostijeras', Heard ("o posiblemente uno de sus amigos") habría defecado en la cama del matrimonio y posteriormente habría asegurado que era una "broma sin importancia", lo que para él habría sido la gota que colmó el vaso.
Por su parte, NGN aseguró que el juicio demostraría que "la descripción del sr. Depp como maltratador es enteramente correcta y verdadera".
"Dr. Jekyll y Mr. Hyde"
En el segundo día del proceso, el actor fue acusado de haber pegado por primera vez a su exmujer tres veces después de que esta se riera de su tatuaje del brazo, que había cambiado de "Winona for ever" (por su relación anterior con Winona Ryder) a "Wino (borracho) for ever". Depp negó este y los otros 13 incidentes de maltrato que la actriz ha relatado.
Entonces la defensa de NGN leyó un e-mail que Amber Heard le escribió aunque no envió al que por entonces era su marido, describiéndolo como Dr. Jekyll y Mr. Hyde y hablando de todas las ocasiones en que se emborrachaba y se desmayaba: "Amo la mitad de ti, la otra mitad me asusta. (...) Si alguien te grabara cuando estás en este estado te morirías de vergüenza. Es vergonzoso ver cómo ocurre. Tú no lo sabes porque la gente (¿amigos?) te sigue sonriendo a la cara y después dan la vuelta a la cabeza y ponen los ojos en blanco por lo ridículos que se sienten al tener que recoger a un hombre adulto de sus propio pis y vómitos". Ante el relato de los hechos, Depp respondió que parecía que "la sra. Heard estuviera construyendo un dossier desde el principio de la relación que parecía servirle como una póliza de seguros para más adelante".
La defensa está haciendo públicas imágenes que supuestamente Amber Heard tomaba de su exmarido para demostrarle el efecto que tenían sobre él el alcohol y las drogas. En una de ellas (publicada por Page Six) se ve al actor dormido y lleno de helado.
Celoso y controlador
Más adelante los abogados de la defensa acusaron a Depp de controlar lo que la actriz vestía en sus apariciones en público y de prohibirle llevar a cabo escenas de desnudos y sexuales en sus películas. Por su parte el actor de 'Sweeney Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet' argumentó que Heard le había pedido consejo sobre cómo actuar y qué papeles aceptar para ser "tomada en serio como actriz": "Nunca le diría lo que ponerse, pero sí le haría alguna mención si pensaba que lo se ponía iba en contra de lo que ella me había dicho que eran sus deseos". También admitió haber sentido celos en varias ocasiones, por ejemplo de James Franco, quien según él habría llevado a cabo acercamientos sexuales inapropiados hacia Heard en algún momento.
Declaraciones a favor de Johnny Depp
Sin embargo el proceso legal ha estado lleno de testigos que niegan las acusaciones de Amber Heard, algunos de ellos llegando a asegurar que es la actriz quien maltrató a Johnny Depp durante años. Lo han dicho el asistente personal durante 16 años del actor, Stephen Deuters, quien la describió como "una sociópata y una mandona maquiavélica" en un mensaje de texto; la maquilladora personal de la pareja, Samantha McMillan, quien niega que Heard tuviera los dos ojos morados en una ocasión; la criada de la casa de Depp durante 30 años Hilda Vargas, quien encontró los excrementos humanos sobre la cama y asegura que Heard gritaba a Depp y a otras personas a menudo; o la administradora de Depp Tara Roberts, que asegura que la actriz insultaba a su exmarido a menudo.
El mayordomo de Johnny Depp en sus casas en Londres, Australia y Vancouver, Ben King, aseguró que Amber Heard era la que empezaba las peleas, mientras que Depp "siempre era educado". Otro gestor del actor aseguró que Amber Heard le había amenazado con despedirle si no mentía sobre la ocasión en la que la entrada de los dos perros de la pareja en Australia metió a Depp en problemas legales.
Este miércoles por la tarde la corte tomará la declaración de Winona Ryder.