El mundo de la moda ha sido un lugar recurrente para que cineastas consagrados ambienten sus obras de ficción. En los últimos años Bertrand Bonello ('Saint Laurent'), Nicolas Winding Refn ('The Neon Demon'), Olivier Assayas ('Personal Shopper'), Paul Thomas Anderson ('El hilo invisible') o Ridley Scott ('La Casa Gucci') se han sumergido en un entorno de lujo para crear propuestas muy diferentes que van desde la sátira terrorífica al culebrón telenovelesco, pasando por la negrura del drama romántico y la iconografía fantasmagórica.
Otras, 'Zoolander (Un descerebrado de moda)' y 'El diablo viste de Prada' a la cabeza, han terminado por convertirse en fenómenos de culto. Hasta Disney, vía Emma Stone, se atrevió a profanar dicha burbuja en 'Cruella', la precuela de '101 Dálmatas' encargada a Craig Gillespie. Podríamos seguir con 'Brüno', 'El becario', 'La modista' o 'Última noche en el Soho'. Lástima que el espacio sea limitado.
Sin embargo, hay quien ha decidido rodar publicidad para firmas de alta costura cuyas iniciales son bien conocidas por inaccesibles. Y no creáis que Chanel, Dolce & Gabbana, Dior, Gucci, Prada y compañía se conforman con artistas de medio pelo. No, quieren estrellas. Pues eso, que Martin Scorsese dirigió 'Street of Dreams', Sofia Coppola unos cuantos de Miss Dior o incluso Yorgos Lanthimos fue contratado por Gucci para firmar 'Of Course a Horse'. Y la lista sería interminable: Baz Luhrmann, David Lynch, Gaspar Noé, Harmony Korine, Wes Anderson.
¿Qué son los fashion films?
Son estas obras a las que se les conoce como fashion films, cortometrajes confeccionados por las grandes casas de moda que tienen como objetivo último visibilizar sus productos. Su duración suele oscilar entre uno y quince minutos y encuentra en los elementos sonoros y visuales sus principales armas. Así, siguiendo lo aportado por la agencia de redacción para marcas de moda iTrend, se trata de un método comunicativo donde lo estético desbanca a la narrativa como motor principal de la pieza, erige a la música como instrumento fundamental para potenciar la emoción y cuya distribución se realiza mayoritariamente de forma online.
A continuación, os invito a embarcaros en un viaje que demuestra que moda y cine aman gritar "cuenta conmigo".
Top 15 fashion film (por orden alfabético)
'Candy' (Wes Anderson, Roman Coppola, 2013)
Wes Anderson codirigió esta pieza para Prada junto a su habitual colaborador, tanto en el guion como en la producción, Roman Coppola. Protagonizada por una Léa Seydoux llamando a las puertas del estrellato mundial tras 'La vida de Adèle', Anderson tira de amor por el cine galo para homenajear a François Truffaut y su 'Jules y Jim', en la que es su primera colaboración con la intérprete francesa. No tardarían en reencontrarse en la Europa de entreguerras de 'El Gran Hotel Budapest' y posteriormente, en otro homenaje a la tierra del gallo, en 'La crónica francesa'. Como rasgos autorales destacan el humor, los movimientos de cámara y el ya tan emblemático gusto por lo simétrico que fascina tanto como agota.
'Chanel N°5: The Film' (Baz Luhrmann, 2004)
Durante un tiempo los directores creativos de Chanel apostaron por reunir a famosos cineastas con las musas de sus largometrajes más emblemáticos. A esta cosecha, que también incluía guiños a 'Amélie', 'Largo domingo de noviazgo', 'Orgullo y prejuicio' y 'Expiación: más allá de la pasión', pertenece Baz Luhrmann. Tres años después de asombrar y enervar a partes iguales con 'Moulin Rouge', el realizador australiano volvía a encontrarse con Nicole Kidman para un corto donde las sombras del musical de culto son visibles desde el primer momento, pero ahora incorporadas a un mundo contemporáneo y más oscuro en términos visuales, al mismo tiempo que recurre a la ralentización de la imagen y a la rápida sucesión de fotogramas.
'La Nuit de l`Homme' (Darren Aronofsky, 2011)
Digamos que Darren Aronofsky se encontraba en su momento de gracia cuando decidió rodar para Saint Laurent. Tras dirigir dos éxitos de crítica y público, 'El luchador' y 'Cisne negro', el cineasta neoyorquino recupera a una de las estrellas del que por el momento era su último trabajo, Vincent Cassel, para componer una pieza reconocible por la tensión que impone la partitura de Clint Mansell, la oscuridad del restaurante o la presencia de neones. Figuran como guionistas Mark Heyman, encargado del libreto del filme protagonizado por Natalie Portman, y Ari Handel, colaborador del realizador en 'La fuente de la vida', 'Noé' y 'Sin límites con Chris Hemsworth'.
'Lady Blue Shanghai' (David Lynch, 2010)
Pocas campañas publicitarias más ambiciosas que la 'Lady', de Dior. Cuatro realizadores consagrados, Olivier Dahan, Jonas Akerlund, John Cameron Mitchell y David Lynch, dirigirían las piezas para un proyecto en el que Marion Cotillard, antes musa de Christian que chica Coco, sería la protagonista absoluta. Pero ninguno llegó tan lejos en el terreno autoral como el presente. Basta con unos pasos solitarios en un pasillo hotelero a ritmo de tango para que el de Montana haga gala de su inimitable clima malsano, surrealista y desconcertante por medio de una mujer atrapada y que viene a demostrar que en el fondo de todo vanguardista, tal y como demostró 'Corazón salvaje', habita un romántico empedernido.
El resto de la colección: 'Lady Noire', 'Lady Rouge: The Eyes of Mars', 'Lady Grey London' y 'L.A.dy Dior'.
'Mine' (Remi Weekes, Luke White, 2017)
Los desconocidos Remi Weekes y Luke White recibieron la llamada de Nowness para perpetrar un cortometraje, protagonizado por Sonoya Mizuno, en el que bailarines se mueven por una pista entre saltos y caídas, descuidos y robos, performances y prendas de quita y pon que flotan suspendidas en el ambiente de una pieza tan física como artística que parece querer reivindicar lo colectivo y lanzar el mensaje de que en nuestro interior nada nos hace diferentes.
'MYSLF' (Julia Ducournau, 2023)
Se puede discutir si dada su escasa duración esta pieza para Saint Laurent es o no un fashion film, pero lo que es innegable es que a Julia Ducournau le bastan 45 segundos para dejar claro que es la responsable de 'Crudo' y 'Titane' quien se encuentra detrás de las cámaras. Y esta vez no tira ni de bebés fluidos con piel de metal, ni de jóvenes caníbales en busca de su droga, ni encuentros sexuales con automóviles, ni guiños al padre de la nueva carne, sino que el sello marca de la casa viene a la hora de filmar el cuerpo de su modelo, Austin Butler.
'Notes of a Woman' (Terrence Malick, 2017)
Mon Guerlain le confió a Terrence Malick la tarea de retratar a Angelina Jolie mientras preparaba su último largometraje, 'Vida oculta', tras finalizar el infravalorado tríptico experimental formado por 'To the Wonder, 'Knight of Cups' y 'Song to Song'. Unas imágenes que sacan a relucir todo aquello por lo que el cineasta filósofo enamora a devotos y cabrea a agnósticos: lirismo, delicadeza y la presencia de elementos naturales, el sol y el viento, golpeando el rostro de su modelo, así como árboles y campos.
'Premiere' (Nicolas Winding Refn, 2012)
Que Nicolas Winding Refn es un estilista de la imagen es indiscutible, 'Drive' y 'The Neon Demon' son buen ejemplo de ello. Antes de pasarse a filmar parajes urbanos solitarios, sumergirse en las panorámicas y los planos secuencia eternos que se convirtieron en el rasgo distintivo de 'Demasiado viejo para morir joven', el cineasta danés se encontró con una Blake Lively pos 'Gossip Girl' a la que engalanó de dorado y puso a caminar al ritmo de su amado sintetizador. También se filtra la egolatría de un tipo que es incapaz de mantenerse fuera de plano poco más de un minuto.
'Shimmer in the Dark' (Lorin Askill, 2017)
Solo tres créditos como director tiene Lorin Askill, conocido principalmente por ser el montador de algunos videoclips de Lady Gaga, Leonard Cohen y Sia. Sea como sea, en 2017 se asoció con Jimmy Choo para retratar a una Cara Delevingne en el momento álgido de su carrera como actriz tras protagonizar 'Ciudades de papel', 'Valerian y la ciudad de los mil planetas' y pegarse con Will Smith y Margot Robbie en 'Escuadrón suicida'. Una pieza que más allá del gusto por el brilli brilli y la sensualidad que desprende su paseo urbano destaca por la inteligencia a la hora de vender el producto.
'Snowballs' (Harmony Korine, 2011)
Proenza Schouler quería ser transgresora. Y en eso pocos cineastas tienen más nombre que Harmony Korine. El enfant terrible del cine indie americano gracias a las experimentales 'Gummo', 'Julien Donkey-Boy' o 'Trash Humpers' continúa recreándose en su gusto por lo inquietante y turbulento, a través del encuentro entre dos niños y un hombre marcado por su corte documental, antes de darse una vuelta por las orillas del mainstream con el star system de Disney Channel, Selena Gomez y Vanessa Hudgens, en 'Spring Breakers'.
'Spring Summer Fashion 2021' (Luca Guadagnino, 2021)
Que los largometrajes de Luca Guadagnino han terminado por ser rematadamente sensuales no se puede negar. Pero nada comparado con este desfile de modelos para Salvatore Ferragamo que no duda en mirar a la cara el cine de Hitchcock. ¿Su objetivo? Componer una pieza que funciona como trabajo de suspense a través de cada mirada codificada e indescifrable entre sus intérpretes y la música con el sello del compositor chino B6. Por la pantalla se pasean Mariacarla Boscono, protagonista de todos los cortos publicitarios obra del responsable de 'Call Me By Your Name', Maggie Cheng y Anok Yai, también presente en la siguiente pieza.
'Summer of '21' (Gaspar Noé, 2020)
Probablemente el favorito del que escribe estas líneas. Si el inicio de 'Climax' era una orgía de cuerpos en movimiento al ritmo del Supernature, de Cerrone, esta pieza para Saint Laurent, que también produjo 'Lux Æterna', se entrega al 'I Feel Love', de Donna Summer. Un corto en el que la verdadera estrella es Charlotte Rampling y deja ver toda la impronta visual de la filmografía de Noé, pensador de las polémicas 'Irreversible' y 'Love', a través del tono rojo que asalta la imagen y el uso de la pantalla partida, recurso que sería fundamental en su siguiente largometraje, 'Vortex'.
'The Galleria' (Jonathan Glazer, 2024)
Tras haber ganado dos Oscar con 'La zona de interés', Jonathan Glazer se reencuentra con Scarlett Johansson once años después de 'Under the Skin' en la nueva campaña de Prada. Un fashion film que no tiene cámaras térmicas, pero que se mueve en el terreno de lo extraño, obsesivo y desasosegante, como si de una pesadilla ambigua se tratara. Toda esa sensación amplificada por un uso del blanco y negro que lleva a sus videoclips para Nick Cave and the Bad Seeds y Radiohead y primeros planos, ocupados por una estrella atrapada y que algo tienen que ver con Massive Attack, pueblan el nuevo logro artístico de un cineasta imprescindible. Somos generosos y os dejamos como extra 'First Light', para Alexander McQueen.
'The One For Her' (Matteo Garrone, 2017)
Navegando entre el Barroco de 'El cuento de los cuentos' y la intriga criminal de 'Dogman', Matteo Garrone, responsable de 'Gomorra' y 'Reality', coincidió con Emilia Clarke en esta famosa pieza en la que Dolce & Gabbana parece interesada en reflejar el carácter festivo de un estilo de vida mediterráneo que también decide mostrarse inclusivo. Además, tiene como hermano gemelo 'The One for Men', también dirigido por Garrone y protagonizado por Kit Harington. La diversión está asegurada.
'World' (Spike Jonze, 2016)
Después de filmar la cara b de 'Lost in Translation' en 'Her' y trabajar con Arcade Fire, Greta Gerwig y Lady Gaga, quien se convirtiera con la ayuda de Charlie Kaufman en cineasta de culto gracias a 'Cómo ser John Malkovich' y 'Adaptation (El ladrón de orquídeas)' se embarca en un proyecto por encargo de Kenzo donde todo conduce a la liberación femenina. Una nueva performance que conjuga música, movimiento y efectos visuales en la que Margaret Qualley se confirma como la reina absoluta al ritmo de 'Mutant Brain', de Sam Spiegel & Ape Drums.
Bonus: Anuncio de Nike (Jean-Luc Godard, 1991)
Muy desesperados debían andar en Nike para encargar a Jean-Luc Godard uno de sus spots. Fechado en 1991, entre 'Allemagne 90 neuf zéro' y 'Hélas pour moi', uno de los padres de la nouvelle vague no dudó en volver a jugársela al poder capitalista, su mayor enemigo tal como atestiguan, entre otras, 'Vivir su vida' o 'El desprecio'. Él mismo decía que el traveling era una cuestión moral. Sin embargo, en esta ocasión se trata de su propio hijo, no solo por el mal lugar en el que dejaba a la marca en cuestión, sino por el mensaje existencialista que incorpora en apenas 15 segundos.