Ya es oficial. El director canario Juan Carlos Fresnadillo se convierte en el segundo realizador en abandonar el proyecto de la adaptación cinematográfica del famoso videojuego 'Bioshock'. Como ya comentamos, los principales problemas que están causando que este proyecto no termine de consolidarse son, por un lado, su presupuesto y, por otro, la calificación de edad que debería tener esta película.
Durante la presentación internacional de 'Intruders', Fresnadillo no ha dejado lugar a dudas. "Estoy fuera del proyecto y metido en otras cosas", comenta el canario. "El estudio y la productora aún no se han puesto de acuerdo sobre el presupuesto de la película y la calificación final."
Es más, Ken Levine, diseñador de videojuegos, fundador y director creativo de Irrational Games, ha comentado que este proyecto no tiene especial relevancia en la agenda de la empresa así como de Universal Pictures, estudio que aún no se aclara con el presupuesto a invertir. Aún así, Levine afirmó que "le gustaría ver una película de Bioshock, pero que tenía cosas mejores que hacer".
Un proyecto con muchas dificultades
Fresnadillo se convierte así en el segundo director en abandonar este proyecto tras Gore Verbinski por calificarlo de "demasiado aterrador". Los motivos de Verbinski, por aquel entonces, fueron que estimaba que dicha película sólo se podría realizar con un presupuesto de entre 150 a 200 millones de dólares, mientras que Fresnadillo afirmó que podría hacerla por menos de 100 millones.
Sin embargo, el canario finalmente confirmó como insuficientes los 100 millones de dólares para realizar dicha película. Además, su calificación de edad es un tema importante que impide también que Universal decida invertir tal cantidad de dinero, pues el director canario afirma que la adaptación de 'Bioshock' debería tener calificación "R", baremo que sesgaría de enorme manera la asistencia al cine de los menores de 17 años sin la compañía de un adulto.
Ahora, sin director y sin especial relevancia en la agenda del estudio, este proyecto queda en pausa a la espera de la resolución de dichos problemas.
