Se estrena en España 'Camille Claudel, 1915', producción francesa que repasa un oscuro episodio de la vida de la célebre y malograda escultora francesa a la que hace referencia el título, que vivió los últimos años de su vida confinada en un centro psiquiátrico en el sur de Francia, en el que su familia de artistas decide ingresarla tras desarrollar una manía persecutoria relacionada con su antiguo maestro y amante, Auguste Rodin, al que acusaba de querer apropiarse de su obra y sus ideas.
'Camille Claudel, 1915' no es el primer acercamiento de la ficción francesa a la figura de esta artista maldita, pero el director Bruno Dumont, lejos de desarrollar un biopic al uso, se centra en los primeros meses de internamiento de la protagonista, utilizando un guion basado en las cartas escritas por la artista, su hermano y su médico durante los años de confinamento de la artista, buscando la veracidad máxima de lo narrado.
Experiencia incómoda
La película es una experiencia incómoda, de ritmo pausado. Narrada entre silencios y gritos de desesperación, refleja la locura y la soledad de Camille Claudel, apartada de su familia y de su arte, que mantiene una leve esperanza de hallar comprensión en su hermano Paul Claudel, único contacto con el exterior. Quizá precisamente son esos tramos discursivos en los que Paul irrumpe en escena, los que lastran en cierto modo a un film que funciona mejor en sus silencios elocuentes y dolorosos, y que impacta sobremanera con sus arriesgadas escenas de cotidianidad en el psiquiátrico, pues cabe señalar que las actrices que interpretan a las pacientes del centro en el que Claudel vivía, son realmente enfermas mentales.
La principal baza de este irregular pero estimable film, está obviamente en la soberbia interpretación de Juliette Binoche que se muestra entregada a la fragilidad y desgarro de la protagonista, erigiéndose en el rostro de la tragedia dentro de una historia que se convierte en una cruda exploración de la locura, la desesperación y el dolor del abandono, además de una pertinente alegoría sobre el silenciamiento histórico de la mujer en el Arte. Interesante.
