La segunda temporada de 'The Last of Us' ya es una realidad tangible para los espectadores. El primer capítulo fue una preparación para que sucediese lo inevitable, después de que en la primera temporada Joel (Pedro Pascal) decidiese salvar a Ellie (Bella Ramsey) por encima de las consecuencias que acarrearía.
Dichas consecuencias tienen rostro, el de Abby, Kaitlyn Dever, la actriz que protagonizó 'Súper empollonas' y 'Nadie te salvará', quién ya desde el inicio del primer episodio dejaba claras sus intenciones de vengarse de Joel después de que matase a su padre en el final de la primera temporada para salvar a Ellie de las Luciérnagas.
Por desgracia para la actriz, el proceso de preparación para este papel no fue nada fácil. Su madre falleció con tan solo 39 años semanas antes de empezar a rodar la temporada, tras padecer cáncer durante 14 años.
En una entrevista exclusiva para Entertainment, la actriz confesó que "los momentos previos a esta escena fueron horribles". El funeral fue tan solo unos días antes de la gran evento del segundo capítulo y Kaitlyn Dever cuenta que "estaba como en una niebla, estaba aturdida".
El desgraciado paralelismo
La muerte de su madre coincide con la situación que vive su personaje en la temporada y que lleva a Abby a buscar venganza contra Joel. Este suceso cambió los planes de la escena del segundo capítulo para la actriz, ya que suele prepararse exhaustivamente los monólogos, pero en la escena de dicho capítulo tuvo un acercamiento distinto debido a las circunstancias.
"Generalmente, si tengo un monólogo así, lo memorizo tres semanas antes de hacerlo. Tuve un enfoque diferente y creo que realmente sirvió al personaje de muchas maneras. Pude, en cierto modo... no sé, simplemente dejarlo pasar y no pensar demasiado en ello porque, de todas formas, las palabras en la página son muy poderosas."

Los creadores de la serie, Craig Mazin y Neil Druckmann, quisieron crear un ambiente de protección y entendimiento por la situación de Kaitlyn Dever: "Tómate todo el tiempo que necesites", destacando también que por encima de la serie está el proceso de aflicción de una persona: "No voy a perturbar el dolor de alguien, especialmente con una serie que aborda abiertamente el proceso de duelo."
El destino de Abby queda abierto tras este segundo episodio que marcará el devenir de la temporada, que ya ha comenzado con las emociones a flor de piel tanto dentro como fuera de la pantalla.