Escrita y dirigida por John Patrick Shanley y protagonizada por Meryl Streep, Philip Seymour Hoffman, Amy Adams, Viola Davis, Lloyd Clay Brown, Joseph Foster, Bridget Megan Clark, Lydia Jordan y Paulie Litt, 'Doubt' es la adaptación cinematográfica de la obra teatral del propio Shanley galardonada con el Premio Pullitzer y un Tony.
La acción se sitúa en un colegio católico del Bronx en 1964, donde la directora, la Hermana Aloysius, acusa a un cura que se lleva bien con todo el mundo, el Padre Flynn, de pedofilia.
Grandísimo Philip Seymour Hoffman
Decía Byron en una de sus más celebradas máximas
Nominada -aunque quedándose de vacío- a cinco Globos de Oro, y optando a igual número de candidaturas para los Oscar, 'La duda' es tanto un retrato de la esencia católica como su relación con un espacio temporal muy concreto -una década de los sesenta introducida muy a conciencia a través del asesinato de Kennedy-, en la que la ruptura entre tradición y modernidad hicieron tambalear los cimientos de un estamento asociado al Estado a lo largo de buena parte de la historia.
Magistralmente interpretada, en particular por un Philip Seymour Hoffman soberbio y que a cada película que presenta nos demuestra con creces su inmensa clase ante las cámaras, 'La duda' focaliza todos sus esfuerzos en el duelo interpretativo entre el actor neoyorquino y la veterana Meryl Streep, convertido ocasionalmente en triángulo a través de la intervencion de Amy Adams. Curiosamente, es a través de la maleabilidad de éste último personaje, y no de unos alumnos apenas nominales, donde el espectador aprecia el verdadero pulso entre dos puntos de vista completamente enfrentados -el primero drástico y en vías de quedar obsoleto, el segundo transigente y, llamémosle, progresista- por el control de un estamento tradicionalmente arraigado al poder.
Como decíamos anteriormente, 'La duda' merece ser vista tan sólo por el hecho de disfrutar de unas interpretaciones intensas, de perfil eminentemente clásico, que alcanzan sus cotas máximas tanto en los duelos directos entre sus dos protagonistas como, sobretodo, en los sublimes sermones del Padre Flynn.
Por desgracia, la película de John Patrick Shanley adolece quizá de una puesta en escena algo artificial en su afán de trasliterar la obra teatral original, -algo similar pudimos ver no hace mucho en 'Interview'-, así como de un metraje algo exíguo, para el gusto de un servidor, que habría agradecido algunos minutos más en beneficio de una mayor si cabe- intensidad dramática.
Así y todo, merece ser vista.
