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LA ÚLTIMA DÉCADA DE SHYAMALAN

De 'La visita' a 'La trampa': Reivindicando la última década de M. Night Shyamalan

Repasamos película a película la estupenda e injustamente defenestrada última década profesional de M. Night Shyamalan.

Por Alberto Frutos Díaz Más 11 de Agosto 2024 | 09:52
Redactor especializado en cine y música. Ver, leer, escuchar y escribir.

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Escena de 'Llaman a la puerta'
Escena de 'Llaman a la puerta' (Universal Pictures)

A estas alturas de la historia (y las películas), ya no queda prácticamente nadie que no haya optado por ubicarse en uno de los dos bandos. Bueno, puede que sean tres. Los repasamos: Ejército de adoración infranqueable de M. Night Shyamalan, Ejército de destrucción innegociable de M. Night Shyamalan, y Ejército de amor/odio de M. Night Shyamalan. ¿El término medio? Complicado encontrarlo en el terreno de un cineasta tan genial como arriesgado.

Si me preguntáis, bueno, ni una sola duda al respecto: estoy más cerca del primer sector que de ningún otro, aunque dos propuestas como 'After Earth' y 'Airbender, el último guerrero' me resulten absolutamente insalvables. Sin embargo, más allá de este par de severos golpes, el resto de la filmografía de Shyamalan me parece de una potentísima y hermosa valía.

Y eso incluye, por supuesto, esta última década en la que su cine ha girado ligeramente hacia la ausencia total de prejuicios, expectativas y presión externa, liberando así a un cineasta que, en las películas que conforman esta etapa de su carrera, parece estar disfrutando más que nunca. En estos diez años, M. Night Shyamalan ha quebrado sus cadenas, propias y ajenas, para regresar a los niveles de talento que le ubican como uno de esos cineastas que tiene asegurada su condición de clásico.

Reivindicando la última década de M. Night Shyamalan

'La visita'

'La visita'

La historia de dos nietos que pasan unos días en casa de sus abuelos sirvió para que M. Night Shyamalan volviera a transmitir la sensación de estar pasándoselo bien contando una historia. Y nosotros escuchándola. Borrón y cuenta nueva, nada de estrellas universales con ansias de colocar a su descendiente en el firmamento. Nada de adaptaciones ajenas sin atisbo de personalidad.

Jugar con lo mínimo, apostar sobre seguro y demostrar que el talento no se ha perdido por el camino, que aquello que parece anticuado y mil veces visto, en este caso el formato 'found footage', se puede usar con maestría y que sí, que todavía es posible conseguir crear poesía marca de la casa a través de la puesta en escena. En definitiva, que no deberíamos haber dado por perdido a Shyamalan. Había ganas de recuperar a un director que nos había regalado tanto cine de altísimo nivel. Y lo conseguimos con esta formidable 'La visita'.

La visita en eCartelera

'Múltiple'

'Múltiple'

Partiendo de la base más tradicional del thriller de secuestros, M. Night Shyamalan desarrolló en 'Múltiple' todas sus estrategias narrativas para plantear numerosos interrogantes, provocar las dudas y desconfianzas en el espectador y, de nuevo, dar un (memorable) puñetazo sobre la mesa en el último suspiro. Hasta ese espectacular epílogo, que es ya uno de los grandes momentos de su trayectoria, Shyamalan deslumbraba con una dirección y una puesta en escena tan inteligentes como comedidas, sobresaliente en su construcción de planos imposibles y sugerentes que funcionan como un reloj.

Un estupendo trabajo que encontraba su mejor cómplice en la interpretación protagonista de James McAvoy. Acompañado por una hipnótica Anya Taylor-Joy, el protagonista de 'Expiación: más allá de la pasión' ofrecía un auténtico recital, controlando un personaje que parecía incontrolable, encontrando el equilibrio en medio del caos y entregando, en definitiva, una interpretación histórica de puro impacto. Una combinación perfecta entre actor y director sobre la que se estructuraba una historia que, pese a la aparente sencillez de sus primeros pasos y la valentía temeraria de sus últimos compases, redefinía por completo su esencia con un epílogo inolvidable.

Múltiple en eCartelera

'Glass (Cristal)'

'Glass (Cristal)'

Tras la memorable revelación de 'Múltiple', tocaba enfrentarse al desenlace de la trilogía superheroica más inesperada de todos los tiempos. Y el resultado, a pesar de la reincidencia de parte de crítica y público en lanzar piedras sin miramientos desde el primer día, se ubicó con facilidad en el terreno de lo notable. Interpretaciones mayúsculas, giros con el sello inconfundible de su autor, enfrentamientos espectaculares, instantes dramáticos de una robusta belleza y, por encima de todo, un director en pleno estado de forma. En definitiva, 'Glass (Cristal)' es un cierre de oro a un tridente de películas fundamentales.

Glass (Cristal) en eCartelera

'Tiempo'

'Tiempo'

Puede que 'Tiempo' fallara, precisamente, en ese giro final tan reconocible en el cine de Shyamalan, pero, hasta ese epílogo algo descafeinado, la película había volado lo suficientemente alto como para que el perdón fuera instantáneo. Desde el primer momento, el cineasta muestra una capacidad total para generar tensión, momentos de auténtico terror, humor negro y, por supuesto, emoción de lágrima furtiva con una historia cuya puesta en escena, de nuevo, merece una ovación tan propia como sonora. Un hermosísimo y tristísimo cuento sobre el paso inexorable de los calendarios. Una joya más en el catálogo Shyamalan.

Tiempo en eCartelera

'Llaman a la puerta'

'Llaman a la puerta'

Aunque todas las opiniones son respetables, evidentemente, ojalá entender a todas aquellas personas que ven espantosas a propuestas como 'Llaman a la puerta', una formidable película que, contando con los elementos mínimos, logra un impacto máximo y duradero. Lo que cuenta es apasionante, sí, pero es la dirección de M. Night Shyamalan, junto a una maravillosa y sorprendente interpretación de Dave Bautista, las piezas que terminan de redondear una película sensacional de inicio a fin.

Llaman a la puerta en eCartelera

'La trampa'

'La trampa'

La incertidumbre se ha evaporado por completo: M. Night Shyamalan se siente bien. Libre. Inspirado. Atrevido. Juguetón. Y con ganas de mantenernos atados a la butaca. Misión cumplida con su última propuesta, una 'La trampa' que, para sorpresa de un total de cero personas, ha generado una furibunda división de opiniones. Comprensible hasta cierto punto, es innegable que Shyamalan se lanza a algunos giros y toma determinadas decisiones en su guion original que rozan el exceso y desconcierto con la punta de los dedos, no deja de ser, en todo caso, un 'pero' muy menor en comparación con la cantidad de entretenimiento, diversión y sorpresas que propone la cinta. Shyamalan sigue en racha. Y ya van diez años.

La trampa en eCartelera