Milos Forman es un clásico con todas las letras. Y subrayadas en dorado. Hablamos de un cineasta que supo, a través de su indiscutible talento, superar fronteras, prejuicios y expectativas a lo largo de una trayectoria repleta de grandísimas películas, obras maestras que han esquivado con admirable eficacia el temible paso del tiempo. Trabajos capaces de unificar el entusiasmo del público, la crítica y una industria que le brindó dos Oscar a Mejor director y otro par de estatuillas correspondientes a Mejor película.
Un respeto y admiración que el director, guionista y actor checo-estadounidense se ganó con creces a base de propuestas que equilibraban a la perfección sus múltiples vertientes dramáticas, hipnotizando desde la siempre elegante puesta en escena, engrandecidas por repartos de cinco estrellas y redondeadas por una de esas miradas que parecían optar en todo momento por el camino correcto. Incluso en sus peores trabajos, que los hay, encontramos destellos de genio.
Es lo que tiene ser un cineasta con semejante capacidad para entender lo que necesitaba siempre cada una de las historias que contó a lo largo de su carrera. Ya fuera desde el drama, la comedia, el cine histórico o incluso transitando por el género musical, Milos Forman era una fuente inagotable de aciertos. Un valor seguro al que extrañamos profundamente y que dejó una huella imborrable en la historia del cine.
Las 10 mejores películas de Milos Forman
'El escándalo de Larry Flynt'
Milos Forman se estrenó en la década de los 90 con uno de sus trabajos más memorables: 'El escándalo de Larry Flynt'. Biopic centrado en la polémica figura del dueño de una de las revistas pornográficas más famosas del mundo, estamos ante una propuesta que brilla desde su mismo prólogo, perfecto para asentar la personalidad de su protagonista, y que crece y crece hasta alcanzar cotas de auténtica emoción en uno de los desenlaces más emotivos de la trayectoria de Forman. Por supuesto, más allá de su excelente dirección, encontramos la indispensable ayuda de una pareja protagonista sencillamente perfecta formada por las mejores versiones de Woody Harrelson y, sobre todo, una arrolladora Courtney Love. Fabulosa película. Y otro biopic ejemplar que sumar al repertorio Forman.
'Amadeus'
Obra maestra de Milos Forman, justísima ganadora de ocho (incontestables) Oscar y ejemplo de biopic arriesgado y vibrante. En 'Amadeus' todo funciona al máximo de sus posibilidades en una inolvidable película que latía, respiraba, se movía y estremecía con la belleza, pasión y fiereza de la mejor música clásica. 158 minutos de cine en estado puro, explosivo e hipnótico.
'¡Al fuego, bomberos!'
Hilarante de inicio a fin, '¡Al fuego, bomberos!' fue la última película de Milos Forman en Checoslovaquia tras ser prohibida en el país después de la Primavera de Praga. Una despedida repleta de humor absurdo, personajes imposibles, escenas divertidísimas y una feliz sensación de disparate continua. Tan ácida como inteligente, tan desvergonzada como memorable.
'Alguien voló sobre el nido del cuco'
'Alguien voló sobre el nido del cuco', la mejor película de Milos Forman, y hablamos de un cineasta cuya trayectoria está repleta de obras maestras, sigue manteniendo intacta su capacidad para conmover, sorprender, divertir y emocionar hasta la lágrima. Con un extraordinario reparto liderado por dos asombrosas interpretaciones de Jack Nicholson y Louise Fletcher, ganadoras ambas de la estatuilla, esta adaptación de la novela de Ken Kesey supone uno de los mayores triunfos cinematográficos de la década de los 70. Y de la historia del cine. De obligado visionado.
'Juventud sin esperanza'
Ganadora del Gran Premio del Jurado en el festival de Cannes, 'Juventud sin esperanza' es otra pieza fundamental dentro de la trayectoria de Milos Forman, aunque solamente sea por la admirable forma en la que analiza a toda una generación desde distintas perspectivas sin perder en ningún momento el control ni abrazar el subrayado. Una propuesta equilibrada que ofrece las mismas oportunidades para sonreír que para reflexionar. Más que notable.
'Hair'
Aunque solamente sea por el número inicial de 'Aquarius' o ese desenlace de voz en grito, pelos de punta, celebración colectiva y lágrimas cayendo sin compasión, 'Hair' ya se merece un sitio indiscutible en el Olimpo de los musicales. Pero es que, además, la cinta dirigida por Milos Forman ha terminado siendo una fotografía asombrosa, tan alucinada como alucinante, de esa Estados Unidos de la década de los sesenta divida entre el movimiento hippie y la guerra de Vietnam.
Así, mezclando canciones de imbatible capacidad melódica e interpretaciones vocales majestuosas y conflictos dramáticos de auténtico peso, 'Hair' consigue un envidiable equilibrio narrativo que jamás descarrila en el terreno del exceso. Y eso que tiene varias oportunidades para hacerlo, desde luego. Sin embargo, ni Forman ni su estupendo reparto lo permiten, entregándose con admirable energía a la causa. Paz, amor, sexo, muerte y amistad.
'Los amores de una rubia'
Obra destacada dentro de celebrada nueva ola de cine checoslovaco, 'Los amores de una rubia' supuso también la contundente confirmación de Milos Forman como talento destacado. Nominada al Oscar a Mejor película de habla no inglesa, categoría en la que perdió contra la francesa 'Un hombre y una mujer', nos encontramos ante una propuesta que hipnotiza especialmente por su magnífica puesta en escena, su gusto por el detalle y el mimo con el que está contada una historia tan sencilla como encantadora. Una pequeña gran joya.
'Man on the Moon'
Dirigida con suma delicadeza e inspiración por Milos Forman, 'Man on the Moon' depositaba casi todo su peso sobre los hombros de un inolvidable Jim Carrey, quien se enfrentó al personaje desde la dedicación absoluta, llegando a tener secuelas psicológicas después del rodaje que le llevaron a asegurar, entre otras cosas, que la personalidad de Kaufman se había quedado a vivir en él para siempre. Unos efectos secundarios que quedaron reflejados de manera tan contundente como perturbadora en la fascinante 'Jim y Andy'.
Y es que, con el paso del tiempo, parece más que evidente que hablamos de dos cómicos que, una vez caído el telón y apagadas las ovaciones entusiastas, comparten más de un miedo, una inseguridad y una obsesión. Quizá por eso, la interpretación de Carrey en la película consiga mezclar de manera tan perfecta las dosis de ternura y locura correspondientes, alcanzando un clímax emocional realmente inolvidable en uno de esos desenlaces que se viven con la lágrima a flor de piel. Un trabajo deslumbrante que encoge el corazón y que termina de convertir a 'Man on the Moon' en uno de los mejores y más inspirados biopics de los últimos años.
'Pedro, el negro'
El debut en el largometraje de ficción de Milos Forman, 'Pedro, el negro', es una de esas delicias que sobreviven al paso del tiempo por su delicadeza a la hora de capturar emociones universales. Más allá del contexto en el que se desarrolla su historia, la película transcurre con la belleza de lo cotidiano, la poesía del gesto mínimo y el talento narrativo de un cineasta maravilloso que ya dejaba más de un destello de pura genialidad en este formidable estreno.
'Ragtime'
Desde su magnética apertura, unos primeros minutos en los que ya empieza a brillar con luz propia la inolvidable banda sonora del enorme Randy Newman, 'Ragtime' despliega su alma de película grande en todos los sentidos. Por eso, aunque sus casi 160 minutos pueden pasar algo de factura, especialmente en su tramo central, son tantas las virtudes que atesora esta monumental propuesta de Milos Forman que uno nunca se cansa de regresar a ella para descubrir algo nuevo o, sencillamente, volver a disfrutar de algunas de las mejores escenas de la filmografía del cineasta.