'Las escalofriantes aventuras de Sabrina': Los 10 mejores capítulos

Un terrible accidente ha tenido lugar en las minas, donde trabajan Harvey, su padre y su hermano, Tommy. Pensando que su a su novio le ha pasado algo, Sabrina se presenta allí aterrorizada y descubre que Harvey está sano y salvo (gracias al conjuro de protección que le lanzó), pero que Tommy está atrapado dentro junto a otros cuatro hombres. El agujero por el que poder entrar a las minas ahora es muy pequeño, así que Theo se arma de valor y entra, encontrando el casco minero aplastado del hermano de Harvey. Ambrose se proyectará en las minas y descubrirá que no hay ningún superviviente.

Sabrina tiene la idea de revivir a Tommy, y hará lo necesario para conseguirlo. Tanto ella como Prudence descubren que las causantes del accidente han sido Agatha y Dorcas, siendo la primera la que ideó el plan. Si Sabrina quiere traer de vuelta a Tommy (del que no se ha encontrado todavía el cuerpo), necesita darle a la muerte otra vida, por lo que decide vengarse y matar a Agatha. Aun así, el plan tiene truco, ya que con la ayuda de sus hermanas y de Nick, entierra a la bruja en el jardín de su casa, en el que tarde o temprano acabará reviviendo, por lo que Sabrina ha conseguido salvar dos vidas sin necesidad de conducir a nadie a la muerte.

Por otra parte, el Padre Blackwood le reduce la pena a Ambrose, con la condición de que trabaje para él en la Academia de Artes Ocultas. Además, Faustus se enterará que se va a ser padre de dos hijos.

Sabrina le revela a Ros y a Theo que es una bruja y que ese el motivo por el Harvey decidió romper con ella. Por otra parte, la abuela de Ros, que goza de "astucia", presiente que Las 13 Brujas de Greendale volverán de nuevo, generando una ira que acabará con todo. Tal y como dijo, esa misma noche la Señorita Wardwell las trae de vuelta a la vida por una sola hora, durante la cual podrán volver a deambular por la Tierra para vengarse al fin de todos y acabar con Greendale.

Mientras Ambrose y Luke deambulan por el bosque se las encuentran, y en lugar de matarles, les utilizan para enviar un mensaje al aquelarre: han vuelto para sembrar la muerte en Greendale y han invocado al "Ángel Rojo de la Muerte" y, cuando este llegue, humanos y brujas perecerán. Para que los humanos no se queden solos en sus casas durante esa noche, los Spellman deciden generar un tornado, así que todo el pueblo se refugia en el Instituto Baxter a excepción de Harvey y su padre, que permanecen en su casa, y de Ros y Theo, que cuidarán de la abuela de Ros.

Para proteger a Harvey, Sabrina le pide a Nick que acuda en su ayuda, y humano y brujo se unirán para evitar que entren en la casa; mientras que Theo plantará cara a las brujas y estas las dejarán en paz.

Toda esta situación ha sido originada por la Señorita Wardwell quien, para acabar con las brujas, convence a Sabrina para que firme en el Libro de la Bestia, volviéndose una bruja más fuerte.

Por otro lado, Lady Blackwood, que se puso de parto durante el tornado, ha perdido la vida al dar a luz a dos hijos: una niña (que nació la primera) y un niño. Para evitar que Faustus mate a la niña por haber nacido primero y por no hacer que su hijo sea el heredero, Zelda decide esconderla en su casa.

San Valentín está a la vuelta de la esquina, aunque los brujos tienen su propia celebración: Lupercalia. Esta celebración consta de tres partes: el emparejamiento al azar entre dos brujos, el cortejo, que consiste en pasar una noche juntos en plena abstinencia, y la caza, una persecución entre ambos en el bosque que termina en sexo.

Pese a que Sabrina es virgen decide apuntarse a la fiesta, y Nick y ella amañan el sorteo para ir juntos. Por su parte, Harvey, Ros y Theo tendrán un baile en el instituto durante la noche de San Valentín, así que Harvey le pide a Ros ser su pareja, pese a que ella ya se había comprometido a ir con Theo, por lo que terminan yendo los tres juntos. A la celebración se unen Sabrina y Nick, y durante el baile son atacados por una mujer loba, que resulta ser el familiar de Nicholas, quien no piensa dejarles en paz hasta que Sabrina se arma de valor y acaba con ella, dejando destrozado a Nick, quien se ha quedado sin la única familia que tenía.

La noche termina con Blackwood pidiéndole matrimonio a Zelda, Harvey y Ros dándose su primer beso, y con Hilda descubriendo que el Doctor Cerberus es un hombre lobo.

Mientras Ambrose está encerrado en una celda de la Academia por intentar matar a Faustus y por ser acusado de asesinar al Anti-Papa (algo que no hizo), un grupo de Misioneros, La Orden de los Inocentes, llega a Greendale con el propósito de matar a todos los brujos para "salvar su alma". Tras enterarse de las torturas a las que las Hermanas Fatídicas y Prudence someten a Ambrose, como Faustus y Zelda están de luna de miel, Sabrina le pide ayuda a Hilda para sacar a su primo de la celda.

Los Misioneros llegan a casa de Sabrina, quien logra escapar gracias a Ros, que tiene una visión en la que Sabrina moría a manos de uno de ellos. Intentan atacar a Hilda y al Doctor Cerberus, y a Nick, pero los tres consiguen huir y acabar con ellos. Cuando Ambrose está a punto de abandonar la Academia, dos Misioneros le cortan el paso y le dejan moribundo, aunque antes de desplomarse consigue avisar al aquelarre de que los Cazadores de Brujas están dentro de la Academia. Aun así, estos logran acabar con una buena parte del aquelarre y conducen al resto a la Iglesia de la Noche. Harvey acude en su ayuda y se queda en la Academia protegiéndola con Nick y Hilda, quien está a cargo de Ambrose, mientras que Sabrina se dirige a la Iglesia.

Los Misioneros comienzan a torturar y a matar a los brujos, y cuando aparece Sabrina logran asesinarla. Poco dura esto, ya que, con la fuerza y el poder de Sabrina, como futura Reina del Infierno que es, vuelve a la vida, mata a los Misioneros y devuelve la vida a todo el aquelarre, dejándonos uno de los momentos más icónicos de la serie.

Por su parte, Lilith (que ha adoptado la forma de la Señorita Wardwell) parece estar enamorándose de Adán, el verdadero novio de la profesora, pero la noticia llega a manos del Señor Oscuro, quien asesina sin piedad a su amado, dejándola desolada.

El capítulo comienza contándonos el origen del Señor Oscuro, revelando que es un ángel caído que estuvo al cuidado de Lilith cuando llegó a la Tierra.

En la actualidad, Lucifer quiere desatar el Apocalipsis abriendo las puertas del Infierno, que están situadas en Greendale, por lo que todo el aquelarre, los Spellman, Nick y los amigos mortales de Sabrina, deben parar su plan. Además, el Señor Oscuro revela que es el verdadero padre de Sabrina y quiere que reine junto a él en el Infierno, confesándole también que todas sus acciones le han ido conduciendo hasta ese momento, y que en gran parte ha sido gracias a Nick. Cuando Sabrina se entera de la traición decide dejar a Nick.

Pese a que Sabrina no quiera casarse con Lucifer, elaboran un plan para hacerle creer a este que sí va a hacerlo. Durante la celebración, parte del aquelarre y Sabrina intentarán derrotar al Señor Oscuro, aunque la única opción que tienen es encerrarle en el cuerpo de otra persona. Quien termina sacrificándose por todos y para que Sabrina le perdone es Nick, quien lleva ahora al Diablo dentro. Nick (y el Señor Oscuro) son llevados al Infierno, donde serán custodiados por Lilith. Cuando parece que todo ha terminado, Sabrina planea bajar al Infierno a rescatar a Nicholas.

Tras la caída de la Iglesia de la Noche a manos de Blackwood, todo el aquelarre se refugia en casa de los Spellman. Como ha pasado un mes, Zelda decide volver a abrir la Academia con ella como directora. La novedad es que ahora el aquelarre no rezará al Señor Oscuro, sino que le rezará a una nueva deidad: Lilith.

Mientras tanto, con la ayuda de sus amigos mortales, Sabrina intentará entrar en el Infierno para rescatar a Nick. La solución se la dará Dorian (el barista de la Academia) que, a cambio de un favor, colará a Sabrina, Harvey, Ros y Theo en el Infierno.

Allí conocerán a Caliban, que les guiará hasta Lilith y, por lo tanto, hasta Nick. El camino no será fácil, sino que les hará pasar a todos por terribles situaciones, como a Theo, quien ve a su tío condenado y en sufrimiento, o a Harvey, quien tiene que destruir a un asesino de hojalata con la apariencia de su hermano. Aun así, los cuatro logran llegar hasta Nick, aunque la situación en la que encuentra deja destrozada a Sabrina, ya que, su novio mantiene una incesante lucha interna con el Señor Oscuro, quien pretende hacerse con el control total de su cuerpo.

Mientras tanto, se produce un Golpe de Estado en el Infierno, que ahora tiene a Lilith como Reina, y el pueblo aclama a Caliban como su nuevo Rey. Sabrina, se arma de valor, reclama su trono y escapa con sus amigos y Nick del Infierno.

Por su parte, Prudence y Ambrose están viajando alrededor del mundo en busca de Blackwood, para acabar con él. Juntos, llegan a Nueva Orleans, donde conocerán a Mambo Marie, quien les ayudará en su búsqueda.

Lucifer ha castigado al aquelarre arrebatándoles la magia. Mientras celebran "La Luna de la Liebre", una ocasión ideal para recuperar sus poderes, un grupo de magos paganos (que se han instalado en el pueblo y trabajan todos en el circo de la ciudad), irrumpe en su camino. Al tener diversidad de creencias, pronto nace el odio por parte de los paganos hacia el aquelarre, y comienzan una gran venganza.

"Poseen" a Agatha, volviéndola loca y a Dorcas la convierten en piedra. Por su parte, Theo, Ros y Harvey comienzan a investigar quiénes son los poseedores del nuevo circo ambulante, con tan mala suerte que una de las mujeres hechiza a Ros y esta se convierte en piedra.

Hilda y Zelda han muerto, la primera por culpa de los paganos y la segunda por culpa de la señorita Wardwell, y se encuentran en el limbo, donde vuelven a reencontrarse con su querido hermano.

Mientras Ambrose y Sabrina intentan traer a Zelda de vuelta con la ayuda de Mambo Marie, Prudence se queda custodiando la casa. Desde el inicio del episodio, una banshee acecha la casa de los Spellman, lo que significa que alguien va a morir pronto, lo que no saben es que morirán prácticamente todos: Hilda, Mambo Marie, Agatha, Zelda y Prucende, siendo las dos últimas asesinadas por Faustus Blackwood.

Mientras tanto, Sabrina está buscando el tercer relicario, las monedas de Judas. La protagonista logra hacerse con ellas y se las enseña a su dueño (que está atrapado en una gran roca), pero Caliban logra engañarla y atraparla a ella en la roca junto a Lilith y a Lucifer, quedando retenida durante décadas. Por su parte, Ros, Harvey y Theo son asesinados por los paganos y el Hombre Verde.

Han pasado décadas de lo ocurrido en el capítulo anterior.

Una Sabrina de otro espacio temporal libera a la Sabrina atrapada en la piedra de Judas para que arregle toda la situación con la condición de que, cuando lo haga, regrese de nuevo a ese mismo lugar. Las cosas están así: sus tías, Prudence, Agatha y sus amigos mortales murieron hace décadas, mientras que los únicos que quedan con vida son Ambrose y el Padre Blackwood. Años atrás, Caliban reinó en el Infierno, pero fue destronado y derrotado. Los paganos "gobiernan" en Greendale y están matando a todo el mundo para alimentar al Hombre Verde, que se nutre con su sangre. Con la ayuda de Ambrose y de los guardianes de las reliquias, Sabrina volverá atrás en el tiempo para solucionar absolutamente todo: revive a sus tías, recuperan la magia del aquelarre, evita la muerte de sus amigos y logran expulsar a los paganos de Greendale, no sin antes acaban con sus líderes.

Cuando Sabrina vuelve al lugar del inicio, tal y como acordó con su "yo" del pasado, se encuentra con esa otra Sabrina perteneciente a otro bucle temporal y deciden elaborar un plan: en lugar de fusionarse en una sola, deciden ser dos. Una es proclamada Reina del Infierno y la otra puede continuar su "normal" vida en Greendale. Cuando Ambrose se entera, sabe que algo malo terminará ocurriendo, puesto que hay dos bucles temporales abiertos. El episodio termina cuando el Padre Blackwood libera a la criatura que estaba encerrada dentro de su valioso huevo, desatando "el fin de todo".