Lo realmente extraño es lo mucho que tardaron en cruzarse los caminos profesionales de Tom Hanks y Steven Spielberg, quizá el actor y el director más queridos y aclamados por el gran público durante las últimas décadas. Y también las estrellas más rutilantes, taquilleras y poderosas en sus respectivos ámbitos de actuación.
En cualquier caso, más vale tarde que nunca, y a finales de los noventa, con la impresionante 'Salvar al soldado Ryan', el protagonista de 'Forrest Gump' y el responsable de 'Encuentros en la tercera fase', por citar tres obras maestras del tirón, iniciaron una serie de colaboraciones que se cuentan de éxito en éxito. La combinación, en este caso, ofreció los (fabulosos) resultados esperados, cumpliendo así con cualquier tipo de expectativa.
Un total de cinco películas en las que Hanks y Spielberg desplegaron su apabullante talento, adaptándolo al género bélico, la comedia, el drama y el thriller de una forma especialmente clásica, haciendo de cada una de ellas una obra de fuerte carácter atemporal. Ojalá el futuro nos permita disfrutar de una nueva unión entre estos dos genios que han marcado la vida y los recuerdos de varias generaciones de amantes del séptimo arte.
Las colaboraciones de Tom Hanks y Spielberg, de menos a más
'La terminal'
La sombra del maravilloso Frank Capra ha rodeado a muchísimas películas dirigidas por Steven Spielberg a lo largo de su carrera. Incluso en los géneros, a priori, menos dados a este tipo de toque sentimental, el cineasta siempre ha sabido guiñar un ojo con elegancia y respeto a la parte más sensible de la obra del responsable de '¡Qué bello es vivir!' o 'Vive como quieras', entre otro buen puñado de clásicos. Sin embargo, la influencia terminó convertida en homenaje en toda regla en 'La terminal', otra de esas cintas despachadas de la manera más frívola y vaga posible como obra menor dentro del catálogo Spielberg.
Una sentencia alejada del análisis que se derrumba por todos los frentes cuando se observa con detalle esta propuesta repleta de buenas intenciones, estupendas interpretaciones, con un genial Tom Hanks a la cabeza, y, por encima de todo, una sabiduría absoluta en la puesta en escena. Elementos que se fundían con cariño y emotividad en una historia basada en hechos reales que, estructurada como carta de amor a un tipo de cine que, sencillamente, ya no se hace, continúa resplandeciendo igual que el primer día.
'El puente de los espías'
Un nuevo homenaje a la figura del hombre íntegro, extraordinario por convicción, héroe por casualidad. Steven Spielberg continuaba con 'El puente de los espías' en un estado de forma envidiable, entregando una obra de permanente aroma clásico que le situaba, de nuevo, como un director cuyo talento hace mucho que está más cerca de la lección imprescindible que del aplauso.
Una vez más, Spielberg dignificaba el arte de contar historias con una película de espías en las que las conversaciones tienen más relevancia que los disparos, los despachos intrigan más que los callejones abandonados y las soluciones dependen más de los intermediarios que de los grandes jefes. Por su parte, Tom Hanks borda su James Donovan y Mark Rylance se descubría como toda una revelación, Oscar incluido, sumando así dos piezas extra para terminar de confeccionar con 'El puente de los espías' una nueva demostración de talento sublime.
'Los archivos del Pentágono'
En menos de un año, atención, Steven Spielberg recibió, leyó, dirigió y estrenó 'Los archivos del Pentágono'. Es decir, Steven Spielberg necesitó menos de doce meses para sumar una nueva obra maestra a su deslumbrante trayectoria. Una historia de (buenos) periodistas que hacen su trabajo con responsabilidad y pasión y, sobre todo, el emocionante retrato de una(inolvidable figura femenina, Katharine Graham, que, en manos de uno de los mejores cineastas de la historia, se convierte en un apasionante thriller de redacciones, despachos, fiestas, inolvidables llamadas telefónicas y cantidades de suspense y emotividad medidas con precisión quirúrgica.
Todo ello, claro, redondeado por un reparto repleto de caras conocidas, y talentos contrastados, en el que brillaban con luz propia las interpretaciones mayúsculas de Tom Hanks y Meryl Streep. En resumen: los mejores haciendo de la mejor manera lo que mejor saben. Una gozada.
'Atrápame si puedes'
Tres meses después (¡!) de que 'Minority Report' llegara a las carteleras de nuestro país, Steven Spielberg regresaba con 'Atrápame si puedes', una película que se situaba en el extremo contrario de la asombrosa cinta futurista protagonizada por Tom Cruise. Obras distantes en el tono, esencia, género y naturaleza, sí, pero unidas por la inspiración absoluta de su autor. Basada en la apasionante historia real de Frank W. Abagnale, un estafador/camaleón que tuvo a la FBI absolutamente desquiciada en su búsqueda y captura, 'Atrápame si puedes' funcionaba de forma sobresaliente en todos y cada uno de sus niveles.
Era un melodrama familiar con toques de comedia clásica sin dejar de ser, al mismo tiempo, un thriller de persecución en la que el juego entre el ratón, excelente Leonardo DiCaprio, y el gato, soberbio Tom Hanks, mantenía al espectador en vilo durante 140 minutos que no pesaban ni una pizca.
'Salvar al soldado Ryan'
'Salvar al soldado Ryan', vamos a empezar desde lo obvio, es historia del cine, más allá de tratarse de uno de los puntos de inflexión definitivos dentro de un género tan ambicioso y exigente como el bélico. Nadie nos había contado la guerra de la forma en la que lo hizo Steven Spielberg a través de uno de los trabajos de dirección más destacados de su trayectoria. Y si uno hace un repaso de la carrera del cineasta entiende hasta que punto hablamos de un hito. El espectador, desde una butaca que tardaba pocos minutos en adquirir el olor de Normandía, el sonido de la masacre y el terror y la presión del disparo fatal y la mina bajo los pies, entraba de lleno en una trama para la que el fondo y la forma debían unirse con precisión total. Y lo hacían. Desde luego que lo hacían.
Hay sabiduría narrativa, control total del ritmo, acción espectacular que nace de las mismísimas entrañas y silencios que valen su peso en oro. Hay actores en pleno estado de inspiración, inconmensurable trabajo de Tom Hanks, imágenes de un poder imborrable y la sensación final de haber asistido a algo similar a la perfección. La pantalla, primero en cine y luego en casa, sigue siendo un eco que se clava para siempre en la memoria. 'Salvar al soldado Ryan' es esencial por lo que cuenta, el modo en el que lo hace y el legado que continúa dejando. Nada fue igual después de ella. Y sigue sin serlo.