Ayer lo comentaba, es habitual en el Festival de San Sebastián que después del primer fin de semana se note un pequeño bajón durante los primeros días de la siguiente. Y así ha sido. Día de transición en el Festival, pero que salvó los muebles con la visita de Tom Hiddleston, el Loki de 'Thor'.
Hiddleston coprotagoniza la cinta 'The Deep Blue Sea', dirigida por Terrence Davies y a competición en la Sección Oficial, junto a Rachel Weisz. Y ante la ausencia de esta, todas las miradas se centraron en él, y ha dejado una muy buena impresión, tanto a la prensa como al público. El actor estuvo especialmente animado y campechano tanto durante una simpática y algo atípica sesión de fotos como durante la rueda de prensa. Magnífico.
Divertidísima nueva película de Julie Delpy
Se ha hablado mucho durante los días previos al inicio del Zinemaldia del efecto Rebordinos, referente a José Luis Rebordinos, nuevo presidente del Festival. Que había dado un nuevo aire al certamen y reunido una selección de películas de aparente buen nivel y con variedad de géneros y estilos. La presencia de 'Le Skylab' compitiendo por la Concha de Oro es buena prueba de ello.
Dirigida por Julie Delpy, de la misma hornada que Sarah Polley, jóvenes actrices y con talento musas del cine independiente que se pasan a la dirección con acierto, se trata de una comedia coral centrada en la familia y la nostalgia. Con toques claramente autobiográficos, no es difícil darse cuenta que la niña protagonista es ella en su infancia, consigue un natural y creíble retrato de la vida cotidiana.
A partir de una original y simple excusa que da título a la película, en 1979, cuando todo el mundo esperaba que el satélite Le Skylab cayera sobre la zona de Bretaña en Francia, una niña siente que todo lo que hay en su vida podría ser destruído: infancia, familia, primer amor. Y al mismo tiempo ella sufre otro cataclismo, se enamora y deja la infancia.
Una comedia ligera, sí, pero que refresca al espectador con su divertida inteligencia e ingenio sin ningún tipo de pretensiones. Y en la que el análisis no debería ir más allá de si la breve introducción y desenlace aportan una acertada conexión con el grueso de la cinta, no es necesario hacer hincapié y herida en alguno de sus evidentes clichés. Una película que resulta necesaria dentro del marco de un Festival para descongestionar un poco el ambiente.
Isaki Lacuesta y su difícilmente digerible propuesta
También en Sección Oficial a competición se presenta 'Los pasos dobles', del catalán Isaki Lacuesta. Un complicado experimento que no se entiende, una cinta a medio camino entre el verdadero y el falso documental. Aunque en su defensa podemos decir que no llega al extremo de Kim Ki-duk. El español se pierde en su enorme cacao, el coreano se ríe de nosotros descaradamente.
Una extraña fábula sobre el pintor del siglo XX, François Augiéras, que cubrió de pinturas un búnker militar en el desierto y luego lo dejó hundirse en la arena para que nadie lo encontrara hasta el siguiente siglo. A partir de ahí Lacuesta y el pintor Miquel Barceló desarrollan la cinta sin guión en un intento de evocar la figura de Augiéras.
Imanol Arias, premio Una vida de cine
Otro de los destacados del día de ayer fue el popular actor Imanol Arias, que recibió el Premio 'Una vida de cine' que otorga la entidad bancaria Kutxa con motivo del Zinemaldia. El artista se mostró muy feliz y emocionado por este reconocimiento profesional, que dedicó a su madre, que aplaudía desde uno de los palcos. Tras la entrega del premio los asistentes pudieron disfrutar de una de las películas clave en su filmografía, 'La muerte de Mikel'.
Para hoy martes, más Sección Oficial con 'Kiseki/I wish' de Hirokazu Kore-eda, con el permiso de Nacho Vigalondo y su 'Extraterrestre' en Zabaltegi-Especiales.