Leticia Dolera, conocida actriz que el año pasado se lanzaba a la dirección de su ópera prima con 'Requisitos para ser una persona normal', publicaba recientemente en el blog que tiene en Harper's Bazaar, un artículo, una reflexión en la que relata los problemas que ha encontrado para proteger su película de la piratería y la necesidad de una "cultura sostenible".
Sus primeras palabras nos ponen en sobre aviso de que durante los siguientes párrafos, no va a dar ningún rodeo, va a ir al grano, punto por punto, estés o no de acuerdo. "Llevo semanas intentado eliminar de webs piratas mi primera película 'Requisitos para ser una persona normal'", así en negrita, respetando el original, porque aunque todos sepamos que existe la piratería, imaginaos cuando después de haber puesto vuestra alma en un proyecto, y cuando hablamos de alma, también de esfuerzo personal, y sí, económico también, os encontráis con vuestra obra circulando por ahí. A la deriva y sin regular.
Dolera, con toda la sinceridad en sus palabras, nos cuenta que hace unos días encontró 'Requisitos...' en YouTube, con subtítulos y todo, y más de 2.000 visitas. ¿Qué hizo?, se registró en la web y puso una reclamación, pero, al no ser la productora y escribir desde un mail personal, le pidieron que lo hiciese desde un corporativo, "para que pudieran asegurarse de que no estaba cometiendo fraude (...) O sea, que yo tengo que demostrar que no estoy cometiendo fraude pero la persona que, sin mi permiso, cuelga mi peli en la red, no tiene que demostrarlo". Como dice ella, el mundo al revés. Eso sí, afirma que, una vez escrito un mail desde la productora, la película estaba borrada tres días después. Aunque consiguió lo que quería, está claro que todavía es necesario mucho trabajo para que se puedan solucionar estos problemas mucho más rápido.
Durante el artículo, además de poner como ejemplo su caso, Leticia reflexiona sobre la sostenibilidad de la cultura, no solo de la industria cinematográfica. "Claro que son cultura y claro que se podrán ver de manera gratuita en algún momento, pero para que las personas que han hecho posible esas películas de estreno puedan seguir haciendo más, tiene que ser SOSTENIBLE y para ello durante un período de tiempo tienen que ser de pago".
Habla de bibliotecas como templos, de las nuevas plataformas que se han creado en Internet como opción B, o A. De subvenciones, impuestos... Y sabe que no va a gustar a todo el mundo su opinión, nos lo deja claro en la posdata final.
Los tiempos cambian
"Otra cosa que suelen decirme es: los tiempos cambian, ¡adaptaos ya! Y yo digo, claro que sí. Ahí están filmin, yomvi, wuaki...". En esto estamos totalmente de acuerdo con Dolera. Resulta que vivimos en una realidad que no todo el mundo puede permitirse pagar una entrada de cine, o incluso si puedes, la película que quieres ver, no ha llegado a tus pantallas más próximas. Esto es cierto como la vida misma. ¿Y qué hacer?, ¿piratear? Esa podría ser la opción fácil y rápida, sin embargo, desde hace años en nuestro país, se están creando plataformas para que las historias lleguen a su público de forma legal y a un precio asequible. Otra cosa que compartimos con Dolera, es que hay que hablar de este problema que tanto persigue a nuestro cine, para poder solucionarlo. Ojalá más voces como esta, que no están encerradas en su burbuja y entienden también a la otra parte.
