Ray Fisher sigue con su cruzada contra Joss Whedon y todo el que se ponga por delante. De hecho, si Warner tiene que salir mal parada, pues también. Y es que las últimas declaraciones de este actor que interpretase a Cyborg en 'Liga de la Justicia' dejan en muy mal lugar a un estudio que, no demasiado sorprendentemente, habría tratado de controlar la narrativa lo máximo posible.
Fisher denuncia ahora que cuando Zack Snyder tuvo que marcharse por motivos personales, todo el equipo de la película superheróica que llegase a los cines en 2017, recibió unas notas orientativas engañosas para tener herramientas con las que enfrentarse a los fans y a los periodistas. Así desde Warner se habría tratado de hacer frente común ante el giro en la dirección de una propuesta que, precisamente por esto, terminó siendo, en palabras del propio Snyder, un "Frankenstein".
"Por un lado, se dijo al elenco y al equipo que Zack había elegido a Joss para que terminara la película por él. De hecho hasta después de la grabación de las nuevas escenas, no me enteré de que eso era una completa mentira. Escuché susurros y rumores de cosas que no encajaban, pero nada concreto hasta mucho más tarde. Nos hicieron ir a la Comic-Con de San Diego en 2017 y decir que Zack eligió a Joss y que Joss era un gran tipo. Todavía tengo el correo electrónico con esos puntos de conversación", afirma Fisher en declaraciones a 'Forbes'.
El porqué de la lucha de Fisher
En la misma entrevista el actor explica que no teme a las consecuencias de su cruzada y que sigue peleando por señalar que el comportamiento de Whedon y Warner no estuvo bien, porque no quiere que se tolere ningún tipo de actitud abusiva en la industria del cine. "Mi objetivo es que estas personas no tomen decisiones sobre el contenido que influye en nuestro mundo. No me preocupan las consecuencias. Soy muy consciente de lo que está en juego. Si la gente no quiere trabajar conmigo porque me niego a tolerar el comportamiento abusivo y la cultura de encubrimiento del viejo Hollywood, que así sea".