Con más de un centenar de trabajos a sus espaldas como actor, Sir Ben Kingsley puede presumir de ser uno de los rostros más reconocidos del cine contemporáneo. Nacido en 1943 en Yorkshire, Inglaterra, empezó su carrera en la televisión a mediados de los sesenta.
Como muchos actores de su época, Kingsley estuvo ligado a la pequeña pantalla durante su primera interpretativa, y en la que nos encontramos roles más importantes que otros, destacando su participación en cinco episodios de la longeva 'Coronation Street' (que se lleva emitiendo desde 1960) entre 1966 y 1967. No sería hasta 1982 cuando, tras haber debutado en el cine en 1972 en 'El miedo es la clave' de Michael Tuchner, llegaría su segundo papel en un largometraje. Puede que muchos no sepan cuál es el título al que hacemos mención, pero si pasamos a hablar de que fue con el que consiguió el Oscar al Mejor Actor, la cosa ya cambia.
De Gandhi al estrellato
Dirigida por Richard Attenborough, gracias a 'Gandhi' el nombre de Kingsley pasó a formar parte del firmamento de actores de renombre, y desde entonces fue cuando el cine le abrió las puertas de par en par, logrando así el haber trabajado a las órdenes de algunos de los grandes realizadores contemporáneos.
Roman Polanski, Martin Scorsese, Steven Spielberg, Ridley Scott, William Friedkin, E. Elias Merhige, Terrence Malick, Isabel Coixet o Tarsem Singh son solo algunos de los nombres para los que el actor, Comendador de la Orden del Imperio Británico desde 2001 (lo que le otorga la distinción de Sir), ha trabajado en más de cincuenta años de carrera.
A continuación, repasamos los diez highlights de toda su trayectoria, compuestos por una serie de interpretaciones que Kingsley ha sabido llevar a cabo de la mejor de las formas, demostrando que más allá de ser un hombre camaleónico, es uno de los grandes (e incansables) intérpretes de su generación.
Los mejores papeles de Ben Kingsley
Grinko en 'Transsiberian'
Año: 2008.
Dirección: Brad Anderson.
Sinopsis: Durante su viaje en el Transiberiano, Roy (Woody Harrelson) y Jessie (Emily Mortimer) conocerán a la misteriosa pareja formada por Carlos (Eduardo Noriega) y Abby (Kate Mara), además de verse las caras con Grinko (Ben Kingsley), un inspector ruso que está investigando el asesinato de un narcotraficante.
Es este thriller donde las falsas apariencias y los engaños jugaban en primera fila, Kingsley convertía en omnipresente a su personaje, el cual se acabaría convirtiendo en el talón de Aquiles para los protagonistas.
Meyer Lansky en 'Bugsy'
Año: 1991.
Dirección: Barry Levinson.
Sinopsis: Benjamin 'Bugsy' Siegel (Warren Beatty) es un mafioso neoyorkino que se muda a Los Angeles con la intención de cumplir su sueño: el de montar una ciudad de lujo y juego eterno en medio del desierto de Nevada.
En este título biográfico sobre uno de los fundadores de Las Vegas, Ben Kingsley encarnaba a uno de los socios de Bugsy, Meyes Lansky, otro de los nombres clave del crimen organizado estadounidense del pasado siglo, y por cuya interpretación fue nominado al Oscar y al Globo de Oro al Mejor Actor Secundario.
Trevor Slattery en 'Iron Man 3'
Año: 2013.
Dirección: Shane Black.
Sinopsis: Iron Man (Robert Downey Jr.) deberá hacer frente a un viejo aliado a la vez que un terrorista que se hace llamar El Mandarín, pone en jaque a todo el país tras haber hecho detonar varias bombas.
Ben Kingsley fue Trevor Slattery, el encargado de interpretar al álter ego de Aldrich Killian (Guy Pearce), quien se escondía realmente tras la identidad de El Mandarín y que utilizaba a ese actor borracho (Slattery) para despistar a los servicios de inteligencia.
Dr. Roberto Miranda en 'La muerte y la doncella'
Año: 1994.
Dirección: Roman Polanski.
Sinopsis: Paulina Escobar (Sigourney Weaver) vive con su marido Gerardo (Stuart Wilson) en un país que acaba de vivir una dictadura. Asediada por el secuestro y cruel tortura a los que fue sometida tiempo atrás, la noche en la que él llegue a casa con un desconocido al que se le ha averiado el coche, Paulina creerá firmemente que ese hombre, el Dr. Roberto Miranda (Ben Kingsley) es nada más y nada menos que su antiguo torturador.
Adaptando la obra de mismo nombre de Ariel Dorfman, con 'La muerte y la doncella' Polanski firmó uno de sus mejores thrillers psicológicos de su carrera, en el que Kingsley representa a la perfección su personaje de imperturbable fantasma del pasado.
Georges Méliès en 'La invención de Hugo'
Año: 2011.
Dirección: Martin Scorsese.
Sinopsis: En el París de los años 30, un huérfano llamado Hugo (Asa Butterfield) entablará amistad con una niña llamada Isabelle (Chloë Grace Moretz) que resultará ser la ahijada de George Méliès (Ben Kingsley).
Scorsese rinde el homenaje que se merece a uno de los padres del cine con la ayuda de un camaleónico Kingsley, cuya interpretación fue olvidada en la carrera de premios de su año pero que quedará para siempre en el recuerdo del espectador.
Don Logan en 'Sexy Beast'
Año: 2000.
Dirección: Jonathan Glazer.
Sinopsis: Gal (Ray Winstone) es un ex convicto que vive alejado de su pasado en la costa española junto a su mujer Deedee (Amanda Redman). Su plácida existencia se verá sorprendida con la llegada de Don Logan (Kingsley), un viejo amigo que cuenta con Gal para que vuelva al negocio criminal.
Gracias a la ópera prima de Glazer (quien después ha firmado dos de los títulos de culto más sugerentes de lo que llevamos de siglo, 'Reencarnación' y 'Under the Skin'), Kingsley conseguía su tercera nominación al Oscar y la quinta para los Globos de Oro, y es que aunque a día de hoy parece que se trate de un título olvidado de su carrera, sigue siendo uno de sus trabajos interpretativos más solventes de su filmografía.
Dr. Cawley en 'Shutter Island'
Año: 2010.
Dirección: Martin Scorsese.
Sinopsis: En 1954, Teddy Daniels (Leonardo DiCaprio) y Chuck Aule (Mark Ruffalo) son dos agentes judiciales que llegan hasta Ashecliffe, un psiquiátrico en la isla de Shutter Island, con el fin de investigar la desaparición de una asesina en serie llamada Rachel (Emily Mortimer). Pronto irán conociendo varios de los secretos que entraña el lugar, regentado por el Dr. Cawley (Ben Kingsley).
Basándose en la novela homónima de Dennis Lehane, Kingsley vuelve a trabajar a las órdenes de Scorsese en uno de los thrillers psicológicos más aplaudidos de la última década, donde interpreta a un personaje de matices siniestros que acabará siendo parte fundamental del rompecabezas que supone la rocambolesca trama.
Behrani en 'Casa de arena y niebla'
Año: 2003.
Dirección: Vadim Perelman.
Sinopsis: Una ex adicta a las drogas (Jennifer Connelly) y un coronel iraní (Ben Kingsley) llevarán su enemistad hasta el límite por culpa de la casa de la que ella acaba de ser desahuciada y en la que él ha invertido todos sus ahorros tras comprarla en una subasta.
Con 'Casa de arena y niebla' llegó la última (hasta la fecha) nominación al Oscar para Kingsley, quien con su personaje de Behrani realiza todo un tour de force junto a Connelly, quien convierte a su Kathy Nicolo en lo que podría ser una de las voces de la crisis que vendría a asolar el mundo pocos años después del estreno de la película.
Mahatma Gandhi en 'Gandhi'
Año: 1982.
Dirección: Richard Attenborough.
Sinopsis: El biopic definitivo sobre la figura de Mahatma Gandhi, quien alentó a los hindúes a la rebelión pacífica en contra del Imperio Británico.
Con tan solo una película a sus espaldas como intérprete, en 1983 Ben Kingsley conseguía el Oscar y el Globo de Oro al Mejor Actor por su total inmersión en el mítico personaje. Eso no era más que el aviso de que una prometedora carrera estaba por venir, y en la que el carácter camaleónico con el que se dio a conocer al mundo entero sería una de las constantes de la misma.
Itzhak Stern en 'La lista de Schindler'
Año: 1993.
Dirección: Steven Spielberg.
Sinopsis: En plena Segunda Guerra Mundial, Oskar Schindler (Liam Neeson) hará todo lo posible por convertirse en una suerte de aliado de los nazis, a quienes consigue meterse en el bolsillo y le acaban nombrando sueño de una fábrica. Será entonces cuando inicie su plan para salvar a más de 800 judíos de morir en Auschwitz.
Una década después de ganar el Oscar, y tras el reconocimiento que ya había recibido gracias a 'Bugsy', Ben Kingsley se puso en la piel de Itzhak Stern, el cerebro detrás de la magnánima obra que Schindler llevará a cabo.