'Los mercenarios' destacaba por reunir a un gran elenco de actores musculados y aptos para cualquier escena de acción que se les ponga por delante. En 'Los mercenarios 2', Sylvester Stallone aprendió de que debería de ser más humilde y repartir el protagonismo a sus demás acompañantes en lo que era realmente una película coral. Y ahora, con más reparto en 'Los mercenarios 3', Stallone ha escrito una película donde mezcla perfectamente el género clásico de acción con el del s. XXI.
Mediante guiños, chascarrillos y pura acción, Patrick Hughes, director y guionista de 'Red Hill', dirige esta vez la tercera entrega de este peculiar grupo de mercenarios liderados de nuevo por Barney Ross, con el añadido en 'la familia' de sangre fresca y joven. En esta entrega, Ross tendrá que enfrentarse con su acérrimo enemigo Stonebanks, interpretado por un imparable Mel Gibson.
Los que han visto ya a sus predecesoras, saben con que se encontrarán en 'Los mercenarios 3' y no les defraudará para nada. El reparto ha crecido, por lo que el peso de Stallone lo comparte equitativamente entre los 16 actores de pura acción y adrenalina del s. XX y del s. XXI. Y es que ya lo dice Ross en una escena de la película, concretamente la del bar, en el que avisa a sus compañeros que deberían de jubilarse porque acabarán todos en un agujero olvidados por todo el mundo y reemplazados por gente más joven.
Dicha escena se me ha grabado en la mente junto a otra, que creo que podría ser la mejor sobre las de Stallone lanzado guiños sobre si es demasiado mayor para estas cosas, en el que Harrison Ford le dice con un tono serio y vestido de traje que debería de relajarse ya que algún día tendrá un infarto, a lo que él solo ríe y pregunta con ironía que qué es lo que le pasa a la gente.
Esta vez, Bruce Willis no aparece en esta película, sustituyéndole, muy acertadamente, por Harrison Ford que se une a Stallone y Arnold Schwarzenegger al grito de "¡yo también puedo!". Tienen una edad, sí, pero saben lo que hacen y lo mejor de todo es que siguen sabiendo reírse de unos mismos. Por otro lado, Antonio Banderas llega a la película para darle un toque de humor diferente interpretando a Galgo, un mercenario que fue en su mejor época el más rápido.
Los posibles sustitutos
Glen Powell, Victor Ortiz y Kellan Lutz son los encargados de representar al cine de acción actual junto a un nuevo añadido al equipo: la judoka y actriz Ronda Rousey, mostrando así un posible teaser de lo que podrá deparar la esperada versión femenina de 'Los mercenarios': 'The ExpendaBelles'.
Y es que "ya no estamos en 1983", que es lo que le contesta Rousey al plan de Stallone de entrar directamente y disparar, el único plan que funcionaba por aquel entonces y al que está acostumbrado el amante del género de acción. Por lo que deciden embarcarse en una escena a lo 'Misión imposible' donde el sigilo y la tecnología son las principales protagonistas dejando así de lado las armas y las explosiones por un rato.
En conclusión, 'Los mercenarios 3' llega a la taquilla para intentar merendarse a sus contrincantes mediante tiros, explosiones, destrucción masiva y coreografiadas peleas, pero eso sí, con nada de sangre como sus predecesoras para poder llegar a un público más amplio, lo que podría ser una ventaja o una desventaja.