Después de treinta años alejado del cine, Max Rockatansky regresa a la gran pantalla con 'Mad Max: Furia en la carretera'. En esta ocasión Tom Hardy reemplaza a Mel Gibson como el protagonista titular, aunque el verdadero regreso es el de su mente pensante, George Miller, que vuelve a trabajar en el ámbito de la acción real 17 años después del estreno de 'Babe, el cerdito en la ciudad'.
Sorprende la unanimidad de los críticos estadounidenses con respecto a esta cinta, que recupera el espíritu de la trilogía original a la vez que incorpora una espectacular acción que trata de alejarse de efectos digitales artificiosos. Según Eric Kohn de IndieWire, la acción supera cualquier frontera alcanzada previamente: "El ingrediente más efectivo es el movimiento continuo. Las persecuciones se estructuran sobre demenciales acrobacias entre coches, enfrentamientos armados y metal chocando a unas velocidades tremendamente elevadas. Generando una emoción mareante y miedo en la misma medida, se convierte en el choque entre 'Ben Hur' y los dibujos animados del Correcaminos." Por lo que es un no parar de acción: "Miller mantiene la acción fluida entre escena y escena, ofreciendo soplo de aire fresco ante los incontables espectáculos de CGI que dominan Hollywood actualmente."
El cambio de reparto parece haberle sentado bien a esta franquicia, con dos protagonistas que pueden dar vida a varias secuelas. Desde Screen Crush, Matt Singer compara a los dos Max: "Hardy no se parece, suena o actúa como el Max de Gibson, pero es más convincente como loco en el personaje de lo que Gibson llegó a ser." Y Todd McCarthy en The Hollywood Reporter eleva su apuesta en Hardy: "Tom Hardy es un reemplazo tan ideal de Mel Gibson que uno no se imaginaría a nadie más haciéndose con el papel." Aunque si hay una sorpresa en el elenco es la de Charlize Theron, que da vida a Furiosa y parece haber robado cada escena en la que sale, como apunta Justin Chang en Variety: "Charlize Theron exige su puesto (con perdón de Tina Turner) como la más indeleble presencia femenina en este universo cargado de gas y testosterona."
Experimento único
Que hoy en día se confíe en la idea de un cineasta plenamente es algo muy extraño, sobre todo en el entorno de los grandes estudios, pero Miller se las arregló para conseguir más de 150 millones de dólares de Warner. Sobre ese hito de la confianza a gran escala, Drew McWeeny destaca en HitFix el gran salto adelante que supone este film: "Miller ha convencido de alguna manera al estudio más grande de Hollywood para hacer una película tan personal, que parece una ventana a la cabeza del cineasta, y lo hizo a una escala que nadie ha intentado antes, y mucho menos alcanzado." Por lo que 'Mad Max: Furia en la carretera' parece haber cumplido con todas las expectativas y haberlas superado astronómicamente, desmarcándose de cualquier otro producto hollywoodiense: "Fue mucho más de lo que esperaba que fuera, mucho más de lo que Hollywood nos ha convencido de lo que un blockbuster tiene que ser."
