Una de las propuestas más redondas del D'A 2014 fue la cinta rusa 'The Major', un inquietante thriller que sacaba a relucir las corruptelas de la burocracia rusa, mientras narraba el dilema moral de un policía que cometía un atropello accidental cuando se encaminaba al hospital para ver nacer a su hijo. Por ello, aventurábamos que la inclusión de la nueva película de Bykov en la programación del presente D'A, supondría uno de los platos fuertes del certamen y, en efecto, estábamos en lo cierto.
Como la reciente y multipremiada 'Leviathan' de Andrey Zvyagintsev, o buena parte de la filmografía del malogrado Aleksei Balabanov -a cuya memoria está dedicada 'The Fool'- la nueva y magnífica película de Bykov no teme plasmar en toda su crudeza la realidad sociopolítica de una Rusia sumida en la podredumbre moral de unos estamentos públicos gobernados por individuos sin escrúpulos ni, por supuesto, sensibilidad social alguna. Lo hace con un gran sentido ritmo (el recurso a la narración en tiempo real genera una tensión asfixiante) y un robusto armazón narrativo que nos remite al mejor cine denuncia norteamericano de los 70, el de los añorados Lumet y Pollack que tan bien sabían ponernos de parte de un hombre honesto contra el sistema.
En 'The Fool', Bykov nos cuenta la frustrante lucha de un joven fontanero que trata de convencer a las autoridades municipales de su localidad para que desalojen un maltrecho bloque de edificios ante el evidente riesgo de derrumbe. La petición, lejos de ser atendida, causará un gran revuelo entre unos respresentantes políticos que no están dispuestos a asumir responsabilidades que pongan en riesgo su privilegiada situación. Dada la caladura moral de sus personajes, el thriller político se convierte pronto en una intriga mafiosa, lo que da una idea del angustioso laberinto en el que nos sumerge Bykov, que no es otro que en el que se encuentran millones de ciudadanos en la Rusia actual y, aunque 'The fool' es ficción , provoca escalofríos por el evidente sustrato real que hay en lo narrado.
Cine israelí
Si 'The Fool' es cine político a cara descubierta, no tardamos mucho en intuir que detrás de la perturbadora historia que el israelí Nadav Lapid nos cuenta en la 'La profesora de parvulario', subyace una amarga reflexión de hondo calado sobre la expulsión de la sensibilidad artística en la sociedad moderna. Película en constante mutación desde un engañoso esqueleto de drama psicológico familiar, 'La profesora de parvulario' adquiere complejos pliegues morales mientras reflexiona sobre la función de la educación y subraya la dificultad de hallar lirismo en unas sociedades modernas enfermas de pragmatismo, violencia y desidia. Una apuesta tan arriesgada como estimulante.