El bombazo que fue 'Westworld' hace unos años ha ido disminuyendo su intensidad con el paso del tiempo. La serie de HBO llegó por primera vez en 2016 y se ganó a un buen número de fans que siguieron las aventuras de Dolores y compañía por el parque durante sus segunda temporada. Sin embargo, la tercera entrega, que se acaba de estrenar, no consiguió ni mucho menos los mismos resultados de audiencia con su primer episodio.
De hecho, la emisión apenas superó los 900.000 espectadores, muy lejos de los 2,1 millones que había logrado el primer episodio de la segunda temporada. Pero, según The Hollywood Reporter, las bajas cifras consiguieron ser remontadas en el mismo día. El servicio de streaming de HBO y las reposiciones que realizó el canal a lo largo del día lograron aumentar el número de espectadores a 1,7 millones en sus primeras 24 horas.
Eso quiere decir que casi la mitad de la audiencia, el 47%, prefirió ver el episodio en otro momento. Un porcentaje escandaloso si se compara con el estreno de la segunda temporada, que apenas supuso un tercio del total de visualizaciones. Aun así, el resultado final sigue sin ser tan bueno como cabría esperar, teniendo en cuenta que la audiencia total del primer episodio de la segunda temporada en su primer día fue de 3 millones de personas.
Mal estreno relativo
Las bajas cifras al compararse consigo misma no deben borrar el hecho de que 'Westworld' sigue siendo una de las series que mejor funcionan de HBO. Las series más recientes que han ocupado su misma franja horaria de domingo en el canal han sido 'El visitante' y 'Watchmen'. Esta última sumó un total de 1,5 millones de espectadores, sin llegar siquiera a los 800.000 en su primera emisión. Para 'El visitante' el número fue algo más bajo, 1,1 millones, de los cuales 724.000 fueron durante la emisión.
'Westworld' mantiene así su lugar privilegiado dentro de las favoritas del público en la cadena, aunque con una diferencia cada vez más pequeña. Y si no consigue remontar a lo largo de la temporada, es probable que la cuarta entrega, cuando llegue, sufra una debacle aún más seria.