El cine español ha vivido el año más complicado que se recuerda en muchas décadas, por lo que esperábamos las nominaciones de los Premios Goya con cierto (pre)sentimiento de derrota. No es que se hayan estrenado pocas películas, en realidad: la ausencia de las grandes superproducciones estadounidenses ha dejado hueco para que los cines se llenaran de producciones nacionales, cine independiente y apuestas menos convencionales.
Aun así la Academia se las ha apañado para sorprender con su película favorita: 'Adú', título producido por Telecinco Cinema que aglutina el cine social y la ambición comercial pero que ha sido definido por la crítica como una película tan bienintencionada como fallida. Opta a 13 Goyas, entre ellos el de Mejor película, Mejor dirección para Salvador Calvo y Mejor guion original.
'Adú' se estrenó antes de la pandemia y fue la segunda producción española más taquillera de 2020 con 6,3 millones recaudados, solo por detrás del fenómeno de Santiago Segura 'Padre no hay más que uno 2': parece que los académicos, acostumbrados a votar en bloque, se han dejado llevar por la nostalgia del mundo anterior al coronavirus a la hora de emitir sus nominaciones.
Estaba claro que 'Las niñas' y 'La boda de Rosa' iban a estar entre las favoritas (9 y 8 nominaciones respectivamente): el estupento debut de Pilar Palomero ganó en el Festival de Málaga y en los Premios Forqué este fin de semana, mientras que la comedia de Icíar Bollaín se ha beneficiado de la falta de competencia para granjearse una narrativa de lo mejor del año.
Sorprenden para bien las 9 nominaciones de 'Akelarre', una reflexión algo limitada de la caza de brujas y el machismo pero muy destacable en lo visual, aunque su única candidatura entre las grandes es la de Mejor actriz protagonista para Amaia Aberasturi. Por otra parte 'Ane', estimable debut de David Pérez Sañudo con una fantástica Patricia López Arnaiz, también ha dado la campanada con 5 nominaciones, entre ellas Mejor película, actriz y dirección novel. Estos dos títulos junto a 'Baby' de Juanma Bajo Ulloa, nominado a mejor dirección, confirman que el cine vasco sigue viviendo un muy buen momento más allá de la factoría Moriarti de 'Loreak (Flores)', 'Handia' y 'La trinchera infinita'.
La quinta nominada a Mejor película, 'Sentimental', es una candidatura tan poco sorprendente como merecida: muy lejos de su excelente 'Truman', Cesc Gay ha firmado una adaptación de su propia obra de teatro con piloto automático en la que destaca Javier Cámara porque lo hace todo bien y porque tiene poca competencia.
En su lugar la Academia ha dejado pasar la oportunidad de darle merecido reconocimiento a la película española del año, 'El año del descubrimiento': el galardonado y aplaudido documental de Luis López Carrasco ha roto todos los moldes y debería haber entrado entre las nominadas a Mejor película y Mejor dirección (y ganar en ambas), pero se tiene que conformar con la obvia nominación en Mejor documental y la lúcida candidatura en Mejor montaje por su sorprendente uso de la doble pantalla.
Teniendo en cuenta que ha sido el año del documental español con muchos títulos interesantísimos, se queda corta la selección de cuatro películas ('Anatomía de un Dandy', 'Cartas mojadas' y 'My Mexican Bretzel' son las otras tres nominadas) dejándose fuera un título tan honesto y emocionante como 'Dear Werner (Walking on Cinema)'; aunque hay que aplaudir el buen ojo de nominar 'El agente topo' en la categoría de películas latinoamericanas y a Nuria Giménez Lorang entre los directores noveles. De hecho es un buen año para las directoras: hay paridad en las dos categorías, ambas con dos hombres y dos mujeres nominados.
Hay más olvidos para todos los gustos: Woody Allen se va de vacío aunque haya dirigido una producción española, 'Rifkin's Festival', y hay quienes ya se están rasgando las vestiduras por la pequeña 'El arte de volver'
También resulta curioso el ninguneo de la Academia hacia lo nuevo de Javier Fesser tras su victoria con 'Campeones': 'Historias lamentables' solo tiene dos nominaciones, una para Janick en Mejor actor revelación y otra para el guion, pero podría haber optado a más cabezones interpretativos o técnicos, de lejos. Quizá la industria ha querido darle un toque por decidir estrenar la película en Amazon Prime Video, prometiendo que llegará a los cines en 2021 y saltándose así todas las ventanas de distribución.
Por otra parte, hay que recordar que la Academia no se ha olvidado de Pedro Almodóvar: El Deseo decidió no presentar 'La voz humana' a concurso para dejar ese espacio a otros cortometrajes. Un gesto muy elegante en consideración con los cortometrajistas más jóvenes. Donde sí podríamos ver nominada 'La voz humana' es en los Oscar.
Mario Casas por fin se sienta con los mayores
No sabemos si es porque no había mucho donde elegir, o porque los académicos realmente piensan que su entregada interpretación en el inmersivo thriller 'No matarás' lo merece, pero es una alegría que Mario Casas por fin haya sido nominado en los Premios Goya. Después de varios años intentando demostrar que su interés y ambición están lejos de limitarse al papel de líder de adolescentes al que muchos lo han relegado con títulos muy serios como 'Bajo la piel de lobo' y 'El fotógrafo de Mauthausen', la Academia por fin le ha prestado atención (aunque bien se habría merecido nominaciones por sus papeles cómicos con Álex de la Iglesia en 'Las brujas de Zugarramurdi' y 'Mi gran noche').
Tiene difícil ganar frente al imbatible Javier Cámara, aunque su papel es más lucido que el de el protagonista de 'Sentimental', pero esta es una categoría bastante impredecible: Ernesto Alterio y David Verdaguer han dado la sorpresa con sus nominaciones por 'Un mundo normal' y 'Uno para todos' respectivamente, y ambos son actores muy asentados. La película de Achero Mañas tiene la narrativa de joyita infravalorada, lo que podría servirle de mucho a Alterio para acabar haciéndose con el galardón. Lo sabremos el 6 de marzo, cuando se celebren los Goya 2021 en el Teatro del Soho CaixaBank de Málaga.