Existen pocos géneros en la historia del cine que hayan tenido que luchar tanto como la comedia romántica frente a los siempre temibles prejuicios y etiquetas. La certeza injustificada de su previsibilidad argumental, el azúcar empalagoso intuido en la distancia, los estereotipos pululando a lo largo de la historia o la reiteración de golpes de efectos y giros dramáticos son elementos que han acompañado a esta modalidad cinematográfica desde sus comienzos, potenciando la generalización con el paso de los años.
Sin embargo, y pese a que, efectivamente, se trata de un género que no se caracteriza especialmente por su capacidad infinita para sorprender al espectador, no tenemos más que echar mano a la memoria más reciente para recordar algunos títulos que demuestran que existen otras vías para contar 'lo mismo'. Películas que, de una manera u otra, han sabido reinterpretar la fórmula sin perder un ápice de encanto, ternura y química por el camino.
A lo largo de este especial, recordamos diez pequeños grandes clásicos de la comedia romántica contemporánea que, desde su estreno hasta ahora, se han ganado con creces su medalla. Propuestas capaces de contentar tanto al público más fiel del género como a aquellas personas que se acercaron a ellas con los escudos puestos desde casa. Lo que viene a ser, resumiendo, algo muy parecido a cine irresistible.
Las mejores comedias románticas del siglo XXI
'Rumores y mentiras'
'Rumores y mentiras' es una estupenda comedia romántica con tanta mala leche como encanto, tanto sarcasmo como sentido del humor, tanta nostalgia como desparpajo y tanta lucidez como atrevimiento. Desde el primer minuto hasta sus últimas escenas, las cuales construyen un brillante homenaje a la década cinematográfica más comercial de los ochenta, la película de Will Gluck se sustenta sobre un guion tan arriesgado como finalmente exitoso y, sobre todo, una maravillosa interpretación protagonista: Emma Stone, Emma Stone y Emma Stone. Aunque solamente fuera por descubrirnos de una forma tan contundente a una de las mejores actrices de su generación, 'Rumores y mentiras' ya tendría ganado su lugar en este especial. Pero es que, insisto, se trata de una espléndida película.
'Una cuestión de tiempo'
Richard Curtis es uno de esos cineastas cuyas películas son máquinas de generar buen rollo, sin caer en la ñoñería ni la cursilería fácil. Una teoría que, en 'Una cuestión de tiempo', quedaba subrayado con línea maestra. Porque estamos ante el trabajo más equilibrado, contenido y personal del británico, alguien que, ya sea tras la cámara o la hoja en blanco, sabe transmitir las sensaciones más encantadoras alejándose del tono bobalicón y empalagoso en el que se sumergen la mayoría de propuestas similares. La historia de amor entre Tim, estupendo Domhnall Gleeson, y Mary, maravillosa Rachel McAdams, es, en realidad, una reflexión sobre el paso del tiempo y la necesidad de vivir intensamente cada día, aprovechar el presente, disfrutar de cada pequeño detalle y saborear los aciertos y los errores con la misma intensidad.
La cuestión es que, para redondear el discurso, Curtis incluye en su argumento la fantástica capacidad de Tim para viajar al pasado, regresar a momentos puntuales, recuerdos que marcaron su vida y situaciones que necesitan un nuevo enfoque. Semejante idea de guion podría haber caído en el absurdo más absoluto, en la incoherencia ridícula, pero no ocurre. Para nada. Todo en 'Una cuestión de tiempo' tiene gracia, inteligencia, emoción, sensibilidad y encanto. Puro equilibrio. Algo muy parecido a una obra maestra.
'Encantada: La historia de Giselle'
'Encantada: La historia de Giselle' es cursi y ñoña, está repleta de canciones con extra de azúcar y tiene todos los tópicos de la clásica historia de princesa conoce príncipe azul. Pero funciona. Y mucho. Con una Amy Adams a la cabeza que, en lo que es ya un clásico dentro de su carrera, debería haber sido nominada a un Oscar por pura capacidad de enamorar a cualquier espectador con su encanto y ternura, Disney escribió una inesperada y maravillosa reivindicación de la esencia y el espíritu de los cuentos tradicionales.
Mezclando animación y acción real de manera comedida, sin caer en los excesos gratuitos, algo que se contagia a todas las decisiones narrativas de la propuesta, 'Encantada: La historia de Giselle' es uno de esos clásicos Disney que parecen olvidados con el paso del tiempo. Y eso que es una de las más evidentes demostraciones de personalidad y carisma de un estudio que cuenta este tipo de historias mejor que ningún otro. Probad y volved a verla. Se mantiene igual de brillante.
'500 días juntos'
De acuerdo, '500 días juntos' estaría más cerca de la dramedia que de la comedia romántica más pura, pero es imposible no citar en esta lista a la joya generacional protagonizada por una de las parejas cinematográficas más celebradas y memorables de los últimos años, la formada por Joseph Gordon-Levitt y Zooey Deschanel. Él y ella, ella y él, viviendo una historia de expectativas y realidad, idas y venidas, pérdidas y regresos, búsquedas y recompensas, música, silencios y miradas de pura melancolía. Más allá de la estúpida manía de buscar culpables, como si en este tipo de historias existieran algo más que supervivientes, queda la certeza de estar ante una de las cumbres imprescindibles de la comedia romántica, una de esas propuestas que pueden mirar fijamente a los ojos de los grandes clásicos del género.
'Crazy, Stupid, Love'
La clave de 'Crazy, Stupid, Love' es que, por encima de todo lo demás, cuenta con un reparto en permanente estado de gracia en el que destaca, por atrevido, divertido, descarado, carismático, arriesgado y arrollador, un Ryan Gosling superlativo. Una interpretación que, al igual que ocurre con el resto de elementos e intérpretes que se dan cita en la película, se toma muy en serio su trabajo de buscar la risa del espectador, conseguir que se sienta cómplice con la historia que se está contando en la pantalla y que se identifique con los estupendos personajes que habitan esta comedia romántica divertidísima, modélica y ejemplar en su fondo y forma.
'El diario de Bridget Jones'
Desde su espléndido comienzo, 'El diario de Bridget Jones' va a por todas. Y consigue cumplir con todos y cada uno de sus objetivos y metas. Es lo que tienen las (grandes) películas que saben lo que quieren y la forma en la que lo quieren, que no hacen trampa y van de frente. Rodada con la elegancia y el clasicismo de la mejor comedia romántica británica, repleta de escenas memorables, apoyada en un guion de acero y con un reparto de auténtica altura, especialmente una maravillosa Renée Zellweger y un Hugh Grant desatado, esta adaptación cinematográfica de la novela de Helen Fielding supera a su original literario a base de implacable encanto. Siempre en el equipo de Bridget.
PD: Igualmente recomendables son sus dos secuelas, 'Bridget Jone's Baby' y, sobre todo, 'Bridget Jones: Sobreviviré'.
'50 primeras citas'
'50 primeras citas' es la mejor comedia romántica protagonizada por Adam Sandler hasta la fecha. Un logro que la sitúa, evidentemente, entre los trabajos más redondos y representativos de su carrera. Y lo mejor de todo es que su éxito reside de manera casi exclusiva en la naturalidad, la sencillez y la ternura melancólica del final de un verano.
No hay más gags de la cuenta, las tonterías más bobas brillan por su ausencia y los esfuerzos están orientados en construir una trama con encanto, sentido del ritmo y capacidad para desprender romanticismo sin dejarse caer sobre una montaña de azúcar. Un conjunto de metas que se logran con sorprendente eficacia y que convierten a '50 primeras citas' en algo más que la colaboración más memorable entre Sandler y una maravillosa Drew Barrymore que se convierte, sin lugar a dudas, en el auténtico corazón de la historia. Una estupenda película de inicio a fin que se disfruta sin perder la sonrisa en ningún momento.
'Cómo perder a un chico en 10 días'
Durante aquellos meses en los que la industria, la crítica y el público parecían haber descubierto que Matthew McConaughey era un gran actor, se cogió la costumbre de menospreciar muchos de sus trabajos previos por la sencilla razón de que eran comedias románticas. Sin embargo, es lo que tiene generalizar sin mirar más allá de los grandes titulares, en su filmografía podíamos encontrar propuestas tan divertidas, cálidas y entretenidas como 'Cómo perder a un chico en diez días', una historia alejada de cualquier tipo de novedad argumental que, sin embargo, se las apañaba para terminar resultando una sorpresa más que agradable. ¿Las razones? La química entre Kate Hudson, estupenda, y un McConaughey entregado a la causa, así como la labor del director Donald Petrie, responsable de 'Miss Agente Especial', película a la que siempre conviene reivindicar con pasión.
'Eternamente comprometidos'
El equipo creativo formado por Nicholas Stoller y Jason Segel ya dio muestra sobrada de su talento en la notable 'Paso de ti' pero, con 'Eternamente comprometidos', elevan el listón con una película que reflexiona con inteligencia y envidiable delicadeza acerca del paso del tiempo como el culpable invisible del deterioro de las emociones, especialmente si se espera un momento perfecto para llevar a cabo la culminación total de una relación.
Y es que, aunque adolezca de una duración algo excesiva, esta historia de una pareja a lo largo de cinco años se sigue con interés constante, consiguiendo que el espectador se sienta partícipe de sus sentimientos y sensaciones, de los conflictos emocionales que hacen acto de presencia cuando menos se les espera y despertando carcajadas gracias a unos secundarios de primera categoría y un alto número de gags que funcionan a la perfección. Si a todo esto le sumamos una vertiente dramática más que convincente, la mejor versión de Segel hasta la fecha y una fantástica Emily Blunt, marca de la casa, no queda otra que celebrar 'Eternamente comprometidos' a lo grande. Una de las comedias románticas más notables de los últimos años.
'Love Actually'
No importa el momento, ni la hora, ni el lugar. Cuando uno se encuentra ante la oportunidad de volver a ver 'Love Actually', lo hace. Imposible resistirse a una película que funciona a la perfección como declaración de amor capaz de mezclar la ternura, la diversión, la resignación y el encanto con una facilidad pasmosa. Sonrisas tontas y lágrimas fugitivas en cantidades industriales.
Repleta de personajes y escenas maravillosas que se han convertido en parte de la memoria cinéfila de varias generaciones, la cinta escrita y dirigida por un Richard Curtis especialmente inspirado, sigue sobreviviendo con apabullante destreza al paso del tiempo. Nada ha envejecido ni muestra rastro de óxido en una película que sigue brillando con la fuerza del primer día. Resumiendo: La Mejor Comedia Romántica Del Siglo XXI.
