Aitana Sánchez-Gijón, de 'Bajarse al moro' a 'Volavérunt': Los mejores papeles de una de nuestras grandes

Tras tener su primer papel protagonista en 'Viento de cólera', Aitana Sánchez-Gijón regresa a la televisión para participar en la segunda tanda de episodios de 'La huella del crimen'. Fue protagonista junto a Juanjo Puigcorbé del capítulo 'El crimen de Perpignan' en el que dio vida a Yvette Romero, una joven de 19 años que trabaja en una fábrica en la que también trabaja Antonio Muñoz, jefe de personal de la fábrica. Muñoz se enamora apasionadamente de la bella Yvette. Ambos deciden urdir un plan para asesinar a la esposa de Muñoz y así cobrar el seguro de vida. Papel complejo que confirmó que se estaba ante una de las grandes actrices de la década.

En 1993 se puso bajo las órdenes de Pilar Miró para dar vida a Nani en 'El pájaro de la felicidad', un filme que ahonda en el pasado de Carmen (Mercedes Sampietro), una pintora de 50 años que, tras sufrir un intento de violación, decide buscar en su vida pasada. Película que volvió a demostrar el poderío de Aitana Sánchez-Gijón, que tuvo un duelo interpretativo con otra gran actriz, Mercedes Sampietro.

El mismo año en que participó en 'El pájaro de la felicidad', Aitana Sánchez-Gijón protagonizó 'El laberinto griego', adaptación de la novela homónima de Manuel Vázquez Montalbán. En este thriller, Sánchez-Gijón es Bernadette, una bella mujer francesa que, junto a su acompañante (Eusebio Poncela), visita al detective Juan Bardón (Omero Antonutti). Bernadette desea encontrar a un antiguo amante griego que ha huido y todo apunta que a Barcelona. Película en la que Sánchez-Gijón volvió a mostrar su poder para papeles turbios e hipnóticos.

Si algo ha demostrado Aitana Sánchez-Gijón en su carrera es su predilección por los papeles de época. En esta coproducción argentino-española, la actriz da vida a Bárbara, una periodista que viaja hasta la frontera entre Portugal y Galicia para conocer más la vida de un bandolero llamado El Argentino (Federico Luppi). En su viaje, la mujer conocerá a dos hombres, uno español y otro portugués (Achero Mañas y Pere Ponce), que pertenecieron a la banda de El Argentino.

Y llegó ese gran papel en el que el público pudo ver su poderío interpretativo que ya conocían aquellos que le habían visto en el teatro. 'La Regenta' fue una de las grandes miniseries que produjo TVE a finales de los 90. Basada en la novela homónima de Leopoldo Alas "Clarín", la producción, que consta de tres episodios, fue escrita y dirigida por Fernando Méndez-Leite. Aitana Sánchez-Gijón era la Regenta, Ana Ozores, una bella mujer malcasada con en un matrimonio burgués con un antiguo regente que es mucho mayor que ella. La dama duda en si seguir con el amor espiritual y místico que profesa por su confesor, el padre Fermín de Pas (Carmelo Gómez), o, por el contrario, caer en las redes de los placeres de la carne con Álvaro Mesía (Juan Luis Galiardo), cacique y mujeriego. Un papel complejo digno de una actriz como la gran Sánchez-Gijón.

El mismo año en que el público quedó deslumbrado con su interpretación en 'La Regenta', la actriz volvió a sacar su vena humorística en la comedia erótica 'Boca a boca', dirigida por Manuel Gómez Pereira y en la que dio vida a Amanda, una misteriosa mujer que llama a la línea erótica en la que trabaja Víctor Ventura (Javier Bardem), un aspirante a actor que sobrevive como puede con trabajos poco reconocidos. Papel interesante y bastante ácido que la actriz defendió magníficamente.

Y Hollywood llamó a la puerta de la actriz. Aunque Aitana Sánchez-Gijón nunca tuvo deseo de cruzar el charco, eso no impidió que protagonizase junto a Keanu Reeves 'Un paseo por las nubes', drama romántico dirigido por el mexicano Alfonso Arau. Ambientada en 1945, el sargento Paul Sutton regresa de la Segunda Guerra Mundial a San Francisco para reunirse con su esposa, Betty. Pero, de forma casual, Paul conoce a Victoria Aragón, la bella hija de Alberto Aragón, dueño de uno de los viñedos de la zona. Pese a la oposición de Alberto, el amor y la pasión surgirán entre Paul y Victoria.

Aitana Sánchez-Gijón volvió a protagonizar una coproducción hispano-argentina, esta vez se convirtió en Juanita en 'Sus ojos se cerraron (y el mundo sigue andando), una seductora mujer española que, ferviente admiradora de Carlos Gardel, vive en Buenos Aires en el momento que conoce a Renzo Franchi (Darío Grandinetti), un oscuro cantante de tango que, enamorado de ella, empieza a parecerse cada vez más al mítico Gardel.

La actriz siempre se ha mostrado muy pudorosa con los desnudos en pantalla, sólo los acepta si está plenamente justificado. De ahí, que inicialmente tuviese ciertas reticencias para protagonizar 'La camarera del Titanic', uno de los filmes más bellos de Bigas Luna. Al contrario que otros de sus largometrajes, Luna en esta película crea una historia del amor pasional que idealiza los instantes de pasión. En este filme, Aitana Sánchez-Gijón es Marie, una camarera del famoso transatlántico que, una noche, conoce a Horty (Olivier Martínez), un joven obrero francés que ha llegado a Southampton para poder ver cómo parte el Titanic. El joven se queda prendado de ella pero Marie desaparece, dejando como único rastro que debía embarcar en el Titanic.

En 1998, Aitana Sánchez-Gijón volvió a traer su magnetismo teatral al cine protagonizando 'Yerma', adaptación cinematográfica de la obra de Federico García Lorca que dirigió y escribió Pilar Távora. Ella es Yerma, una mujer que desea tener un hijo, es lo que más quiere, ya que para ella el ser madre es el ideal del amor. Su marido, Juan (Juan Diego) apenas la toca, lo que hace que ese hijo deseado no llegue. Su estricta moral impide que yazca con el seductor Víctor (Jesús Cabrero), con el que podría tener ese retoño que tanto anhela. Una situación de opresión que llevará a Yerma a la más triste desesperación.

Aitana Sánchez-Gijón volvió a ponerse bajo las órdenes de Bigas Luna en 'Volavérunt', filme que tuvo uno de los costes más elevados de la época, 1.200 millones de pesetas, y que se presentó en la Selección Oficial del Festival de San Sebastián, en el que Sánchez-Gijón logró la Concha de Plata a la mejor actriz gracias a su interpretación de la Duquesa de Alba, una de las mujeres más poderosas de inicios del siglo XIX que, tras inaugurar su nuevo palacio, muere en extrañas circunstancias con sólo 40 años. Filme de época en el que la actriz volvió a mostrar su lado sensual y oscuro, con un personaje complejo.

El mismo año que Aitana Sánchez-Gijón triunfaba con 'Volavérunt', la actriz protagonizó 'Celos', película basada en hechos reales y dirigida por el prestigioso Vicente Aranda. En la cinta, ella es Carmen, una mujer que está ultimando los preparativos para su boca con Antonio (Daniel Giménez Cacho). Todo parece ir en marcha, ya tienen una nueva casa y sus trabajos van bien. Pero todo cambia cuando Antonio encuentra una foto de ella con otro hombre. Pese a que Carmen no le da importancia y le dice que confíe en ella, los celos se apoderarán de Antonio, provocando una obsesión peligrosa con consecuencias devastadoras.

Aitana Sánchez-Gijón logró otro de sus grandes papeles con el regreso a la dirección del argentino Luis Puenzo. En 'La puta y la ballena', ella es Vera, una escritora que abandona España después de que le diagnostiquen cáncer de mama y sufra una fuerte crisis matrimonial. La mujer llega a Buenos Aires donde, tras someterse a una mastectomía, se queda prendada con la historia de una ballena que se pierdes dos veces en la misma bahía y de una corista que ejerce de prostituta en Patagonia.

En esta coproducción internacional, Aitana Sánchez-Gijón compartía protagonismo con Christian Bale. En 'El maquinista', ella es Marie, una camarera que se convierte en compañera de insomnio de Trevor, el maquinista cuyo insomnio ya dura un año. La mujer, preocupada por la soledad del chico, se convierte en uno de los pocos apoyos que aún le quedan a Trevor, cuya paranoia y delirio llegarán a niveles insospechados.

Basada en los tres cuentos del libro 'Animales tristes' de Jordi Puntí, Aitana Sánchez-Gijón participa en esta historia coral de enredos amorosos, traiciones, anhelos, rutinas, una película dirigida por Ventura Pons que demostró, una vez, más, su preferencia por las historias cruzadas.

El director de 'Gernika', Koldo Serra, dirigió en 2006 este thriller con mostraba no sólo las grandes diferencias entre vida rural y urbana, sino también cómo las fricciones lingüísticas e internacionales pueden llegar al extremo. En el norte de España, a finales de los 70, llegan un matrimonio inglés (Paddy Considine y Virginie Ledoyen) para pasar las vacaciones junto a Paul (Gary Oldman) y su esposa Isabel (Aitana Sánchez-Gijón). Un malentendido con uno los vecinos del pueblo provocará una traumática espiral de violencia.

Tras un tiempo centrada en teatro y con películas como 'La carta esférica', 'Oviedo Express', 'Háblame del amor' y 'Maktub', Aitana Sánchez-Gijón volvió a ser popular con un público que recién la conocía con 'Velvet', la popular serie protagonizada por Paula Echevarría y Miguel Ángel Silvestre que conquistó al público en Antena 3. En esta producción de Bambú, Sánchez-Gijón fue Doña Blanca, la responsable del equipo de costureras de la Galerías Velvet. Inflexible y distante, no tolera despiste y no perdona los errores. Personaje que fue evolucionando a lo largo de las cuatro temporadas de la serie, la actriz repite papel en su continuación, 'Velvet Colección'.

Otro de sus últimos papeles relevantes en la televisión ha sido, también, con otra serie de época. En esta ocasión, la actriz estuvo en la miniserie 'Teresa' que produjo TVE en 2015 y que ahonda en la vida de Santa Teresa de Jesús, a la que dio vida Marián Álvarez. Aitana Sánchez-Gijón fue Doña Jimena esta cuidada producción de época que logró muy buenas críticas y comentarios por parte del público.