Con la irrupción de las nuevas plataformas de servicio en streaming, los canales que se abren para los espectadores son cada vez mucho mayores, teniendo toda una serie de catálogos entre los que poder navegar y en los que siempre es clave contar con algún que otro producto estrella. La clara muestra de esto es cómo Apple TV+ logró captar la atención del público anunciando 'Servant', serie con un nombre como reclamo tan importante como el de M. Night Shyamalan.
Como ya había venido pasando con el cine desde hacía décadas, el terror en la televisión ha encontrado su propio hueco entre la programación de casi todos los canales, siendo tantas las ficciones que se mueven alrededor del género, que resulta un poco imposible poder abarcarlo todo. Mientras que el año pasado (y parte de este) fue aquel en el que 'La maldición de Hill House' brilló por encima de todo, este 2019 ha habido un pequeño descenso en cuanto a productos arriesgados.
Terror para todos
Con ejemplos bastante notables, escogemos las diez mejores series de terror del año, tan diferentes entre ellas que bien podrían ser el claro resumen de cómo está la industria televisiva cuando ya se acaba 2019, dejando constancia de que cada vez son más quienes arriesgan con planteamientos que hace unos años hubiesen sido inviables, y que funcionan de forma inesperada o que (como también suele pasar) acaban pasando un tanto desapercibidos y se pierden entre todos los estrenos semanales.
Muertos vivientes, brujas, fantasmas, desastres nucleares y reminiscencias al terror de los ochenta y al cómic, han sido las temáticas que acaban destacándose, en un 2019 donde también hemos tenido nuestra ración anual de 'Stranger Things' y 'American Horror Story', las cuales se han quedado fuera del ranking por aquello de dejar un poco de espacio a las novedades que llegaron (y que puede que no volvamos a ver más).
Las mejores series de terror de 2019
'Chambers'
Con Uma Thurman entre su casting con un papel secundario (el principal reclamo para que la serie ganase adeptos), 'Chambers' llegó a Netflix como una de sus apuestas de terror del año, la cual nos llevaba hasta un pueblo en la zona desértica de Estados Unidos, donde una joven que ha recibido un trasplante de corazón, verá cómo su vida cambia al empezar a verse acosada por el fantasma de la chica a quien pertenecía dicho órgano.
Creada por Leah Rachel, por sus créditos como directores figuraron nombres como los de Alfonso Gomez-Rejon ('American Horror Story', 'The Town That Dreaded Sundown') y Ti West ('The Sacrament'), los cuales estuvieron como meros ejecutores de una historia que acabó siendo engullida por las ganas desmedidas de sumarse a la crítica racial, algo que Jordan Peele acababa de hacer mejor con 'Déjame salir', y poniendo aquí el foco sobre la comunidad nativa norteamericana. Aun así, se agradece que propuestas así lleguen a nuestras pantallas.
'The Terror: Infamy'
Tras el éxito de la primera temporada de 'The Terror', basada en la novela de Dan Simmons, AMC decidía seguir explotando la marca ya creada con una segunda tanda de episodios, los cuales vendrían a contarnos algo nuevo pero, en cierto modo, fiel al espíritu de la primera al ser una historia de época.
Creada por Max Borenstein y Alexander Woo, 'The Terror: Infamy' nos llevaría hasta la Segunda Guerra Mundial, donde veremos cómo el J-Horror se hace presente de la mano de un espíritu cambiaformas, el cual se convertirá en una pesadilla para varios japoneses que han sido internados en un campo de concentración en California.
'Creepshow'
En 1982 'Creepshow' elevó la categoría de las antologías de terror, mérito que hay que atribuir a Stephen King y George A. Romero, sus creadores. Convertida ya en obra de culto, Shudder la reformula y retoma la inspiración en los cómics de terror de EC y demás para traernos 'Creepshow' en formato de serie.
Siguiendo la línea antológica marcada por la película original (y sus secuelas), Greg Nicotero está presente como productor ejecutivo de siendo sus capítulos una buena forma de regresar a los cánones del género cosechado en los ochenta, presentándonos un terrorífico programa doble en sus 45 minutos de duración, por los que desfilarán maldiciones, muertos que regresan, fantasmas, hombres lobo y demás criaturas.
'Swamp Thing'
Gary Dauberman y Mark Verheiden son quienes han estado detrás de 'Swamp Thing' para conseguir sacarla adelante, siendo creadores de esta y contando con James Wan como productor ejecutivo.
Aprovechando la existencia del personaje y con personas de renombre en el actual panorama de terror, DC pensó que podría ser una muy buena apuesta para el canal DC Universe, la cual fue cancelada al poco de su estreno, siendo así la primera y última temporada de 'Swamp Thing' una propuesta que agradecemos que se hayan atrevido a hacer, donde el eco-terror se hermana con el body horror y los tributos a 'La cosa' y en la que se nota el amor que inoculan en ella sus implicados. No sería extraño que, con el paso tiempo, se convirtiese en objeto de culto a reivindicar.
'Kingdom'
El brutal éxito de 'The Walking Dead' en todo el mundo, es uno de los claros ejemplos de que el zombi ha adquirido una posición en la cultura popular en la que se ha asentado sin problemas.
Y cuando creíamos que ya lo habíamos visto todo en cuanto a las representaciones de los muertos vivientes, llega desde Corea del Sur directa a las pantallas de Netflix la adaptación de un cómic que, años atrás, seguramente hubiese sido impensable convertir en serie: 'Kingdom'.
A lo largo de los seis episodios dirigidos por Kim Seong-hoon, seremos testigos de cómo la investigación acerca de una pandemia va desentrañando una serie de dramas personales en los convulsos tiempos de la dinastía medieval Joseon, donde su estilizado y detallista diseño de producción choca frontalmente con su representación de la violencia, la cual nadie esperaba encontrarse de forma tan sórdida.
'Daybreak'
Tras varios intentos fallidos por triunfar con el cine más comercial como fueron 'San Andrés' y 'Proyecto Rampage', Brad Peyton lo intenta en la pequeña pantalla y nos regala el trabajo más notable de su carrera: 'Daybreak'.
Creada junto a Aron Eli Coleite (productor de 'Héroes' y 'The River'), la serie nos lleva hasta Glendale, una localidad devastada por una epidemia zombi donde ahora los clanes y las bandas dominan a sus anchas. Entre el caos, se abrirá camino Josh (Colin Ford), un joven con tendencia a romper la cuarta pared, con la intención de hacer partícipe al espectador de ese mundo post-apocalíptico con dos referentes tan claros como 'Zombie, el amanecer de los muertos vivientes' y 'Mad Max'.
'Las escalofriantes aventuras de Sabrina, parte 2'
En 2018 la primera parte de 'Las escalofriantes aventuras de Sabrina' le daba al personaje el estatus que merecía, acercándola a su esencia de los cómics en los que nació, y alejándose de la sitcom que perpetró Melissa Joan Hart en los años noventa.
Para su segunda tanda de episodios, Kiernan Shipka vuelve como representación de la revolución feminista con una Sabrina en contra del patriarcado, totalmente entregada a su naturaleza mágica y que jugará un papel clave en los planes del Señor Oscuro, consolidándose como la tenebrosa versión de brujería adolescente que el público merece, y donde están presentes una retahíla de homenajes a títulos de terror clásicos que van desde 'El exorcista' a 'Pesadilla en Elm Street'.
'Servant'
Apple TV+ llega pisando fuerte con una de las propuestas más malrolleras del año para la televisión: 'Servant', cuyo principal aliciente es el hecho de tener el respaldo de un nombre como el de M. Night Shyamalan detrás.
Lauren Ambrose es la protagonista de un drama con trauma incluido, metiéndose en la piel de una niñera, contratada por una pareja que está pasando por una crisis debido a una reciente tragedia. Será entonces cuando las cosas que creías estar viendo, tal vez no sean como crees, teniendo algo del sello de Shyamalan y presentada en episodios de 30 minutos de duración, los suficientes como para acabar con los nervios del espectador.
'Marianne'
Samuel Bodin escribe y dirige los ocho episodios de 'Marianne', la ficción francesa sobre la que se ha escrito mucho acerca de su extraño tono (algo que ya estaba muy presente en la oleada de New French Extremity), donde una novelista descubrirá que todo lo que escribe se convierte en realidad, teniendo que volver al pueblo donde se crió para enfrentarse a sus miedos y a aquello que viene de tiempos remotos clamando venganza.
Vilipendiada por el abuso de jumpscares, Bodin mira de frente a las set pieces creadas por James Wan en sus propuestas, y logra mantener al espectador en tensión con la única intención de provocar el susto predeterminado. Y ahí es donde radica la principal virtud de la serie, la cual no solo sirve como reivindicación del gótico europeo, sino que es tan grotesca y se preocupa tan poco por encontrar un equilibrio dentro del terror (que llega a tener varios despuntes hacia la comedia), que acaba siendo un maravilloso y caótico tren de la bruja con momentos para estremecerse y un montón de secuencias que ya les gustaría tener a todos los refritos de 'Expediente Warren'.
'Chernobyl'
Pese a estar concebida como ficción dramática, y sirviendo como claro ejemplo de cómo aprovechar bien el formato y los tiempos que permiten las series, 'Chernobyl' llegó a HBO como la absoluta plasmación del terror nuclear. Totalmente hermanada con el cine de catástrofes, la serie pasó a ser todo un fenómeno en el momento de su estreno, y además venía acompañada por el respaldo de la crítica.
Creada por Craig Mazin y Johan Renck, el primero dirige además sus cinco episodios, en los cuales se recrea el infame accidente que tuvo lugar en la Central Nuclear de Chernóbil en 1986, y que liberó material radioactivo desde Ucrania a Rusia y varias partes de la Europa Central. A través de diferentes puntos de vista, veremos como aquello repercutirá a sus personajes de formas diferentes, sin cortarse un pelo a la hora de mostrar crudeza en pantalla como si de un body horror se tratase, presentando los espacios de peligro utilizando los recursos del cine de terror en cuanto a ambientación, y pasando por delante de un montón de propuestas que no consiguieron provocar tantos escalofríos como 'Chernobyl'.