Hay directores que son un estilo cinematográfico en sí mismos. Se trata de tipos que han conseguido que, con la simple visualización de una escena, podamos identificar su lenguaje artístico, su discurso creativo, su potencia narrativa y su firmeza descriptiva. Un envidiable estatus que adquieren pocos cineastas y en el que se encuentra situado, sin lugar a dudas, el gran Michael Mann. Contundente desde su mismo nombre y apellido.
Conocido, entre muchas otras cosas, por ser creador, director, productor y guionista de la mítica 'Corrupción en Miami', Mann comenzó su trayectoria en el largometraje en una década, la de los 80, en la que ya comenzó a despuntar a base de instinto, estilo y precisión quirúrgica tras la cámara. Sin embargo, fueron los 90 el punto exacto en el que todo estalló, revelándole como un cineasta superdotado capaz de inyectar una energía y fuerza muy especial a sus trabajos. Un sello de identidad, una marca inconfundible, un universo propio tan clásico como profundamente contemporáneo.
Por eso, y pese a que sus últimas propuestas, tanto en la gran pantalla como en la pequeña, no han estado a la altura de las justificadas expectativas, Michael Mann puede respirar más que tranquilo a la hora de hacer balance de las victorias, los triunfos y, sobre todo, el legado que ya ha dejado en la historia del cine contemporáneo. Un puñado de clásicos incontestables a los que regresar cada vez que andemos hambrientos de talento.
Michael Mann, de peor a mejor
'La fortaleza'
Conviene ser especialmente benevolente con 'La fortaleza', cinta de serie B en la que Michael Mann hace todo lo que está en su mano partiendo de una base bastante insalvable. Y es que, por más empeño que el cineasta le ponga, esta propuesta de intriga, terror y ciencia ficción no puede ir nunca más allá de la curiosidad divertida que habita en todo delirio. Un desastre, sí, pero también una de esas películas que consiguen darse la vuelta en mitad del barro para terminar brillando de una manera tan especial como confusa.
'Blackhat: Amenaza en la red'
Por desgracia, la última referencia cinematográfica que tenemos de Michael Mann hasta la fecha supone también uno de sus trabajos más decepcionantes a casi todos los niveles. Y es que, por más que sus escenas de acción brillen con la luz característica del ilustre cineasta, 'Blackhat: Amenaza en la red' no consigue nunca despegar más allá del terreno del thriller de acción tecnológico más confuso, anodino y aburrido. Una propuesta sin alma, protagonizada por un desganado Liam Hemsworth y narrada con alarmante falta de interés por un Mann que ojalá tenga la oportunidad de entregar una película en el futuro que esté realmente a su altura.
'Corrupción en Miami'
Tras un quinteto de películas de auténtico oro formado por 'El último mohicano', 'Heat', 'El dilema (The Insider)', 'Ali' y 'Collateral', casi nada, llegó el pinchazo de Michael Mann de la forma más inesperada posible con 'Corrupción en Miami', adaptación a la gran pantalla de la famosa serie de los años 80. Y es que, a pesar de encontrarse en un universo perfectamente reconocible para él, el director decide apostar por lo seguro, arriesgando entre poco y nada, construyendo así una cinta tan competente en lo formal como intrascendente en todo lo demás. No ayuda, ni mucho menos, la nula química entre los pocos inspirados Colin Farrell y Jamie Foxx, estatuas de hilo en mitad de una propuesta asentada en la decepción.
'Hunter'
Antes de que Anthony Hopkins le convirtiera en una figura cinematográfica absolutamente inolvidable, Hannibal Lecter ya había aparecido en la pantalla grande, eso sí, con el rostro y actitud de Brian Cox. Ocurrió en 'Hunter', adaptación de 'El dragón rojo', la célebre novela de Thomas Harris, firmada por un Michael Mann que, tras el descalabro a todos los niveles de 'La fortaleza', recuperaba gran parte de su inspiración. Un thriller correcto en el que, de forma tan curiosa como sorprendente, el personaje de Lecter se convertía en una de sus mayores decepciones, tanto por su poco peso en la historia como por la interpretación de Cox, a años luz del inevitable referente Hopkins. ¿Lo mejor? El estilo de Mann, siempre elegante y magnético.
'Ladrón'
Son múltiples las películas posteriores, con 'Drive' a la cabeza, a las que influenció profundamente 'Ladrón', uno de esos debuts cinematográficos que aparecen como la más rotunda de las explosiones, originando un estilo, discurso y voz propia destinada a permanecer. De inicio a fin, Michael Mann consigue sobrepasar expectativas con una dirección de envidiable capacidad para generar atmósferas e hipnosis. Lástima que el guion no esté a la misma altura, algo que termina lastrando ligeramente a esta más que interesante propuesta, la cual se sirve también de un magnífico James Caan para permanecer tranquilamente a flote. La mejor película de la primera etapa de Mann, con amplia diferencia del resto de contrincantes.
'Enemigos públicos'
Sirviéndose de la apasionante persecución que protagonizó durante tres décadas el agente del FBI Melvin Purvis, sobresaliente Christian Bale, y el legendario atracador John Dillinger, interpretado por un Johnny Depp fascinante, Michael Mann firmó con 'Enemigos públicos' una de sus películas más notables e incomprendidas. ´
Recibida con entusiasmo por la crítica y con una injusta frialdad por parte del público, este thriller de aroma y esencias clásicos funciona especialmente bien desde un punto de vista formal, destacando las texturas visuales que el director consigue extraer de todas y cada una de las escenas que conforman esta modélica intriga. Un trabajo de orfebrería con el que Mann volvía a lo grande tras la decepción que supuso para muchos su obra previa, la fallida 'Corrupción en Miami'.
'El último mohicano'
Para preparar su interpretación como Hawkeye en 'El último mohicano', un hombre blanco adoptado por los indios mohicanos, Daniel Day-Lewis vivió durante varios días solo y perdido en medio de la montaña, aprendiendo a manejar un hacha, cazando su comida y dedicando largas jornadas a la construcción de una canoa con la que poder salir a pescar. Poca broma, hablamos de un intérprete capaz de (casi) todo para meterse en la piel de sus personajes. Ni siquiera una cinta como la que nos ocupa, lo más parecido a un blockbuster de aventuras en la carrera de ambos, consiguió disminuir ni una pizca la pasión y entrega de un actor y un director que unían fuerzas para confeccionar un trabajo modélico, rabioso y delicado en las mismas dosis, siempre equilibrado en la fuerza y la sutileza.
'Collateral'
Son pocas las ocasiones en las que la ciudad de Los Ángeles ha aparecido de una forma tan enigmática y fascinante en la gran pantalla como en 'Collateral', película no menos deslumbrante. Cada callejón, cada rincón, cada farola, cada vehículo...todo bajo la extraordinaria mirada de Michael Mann adquiere una poesía visual tan tangible como hermosa, resultando una experiencia apabullante y vertiginosa, tanto en la forma como en el fondo, para el espectador. Protagonizada por un extraordinario Tom Cruise y una de las mejores versiones de Jamie Foxx, 'Collateral' sigue resplandeciendo hoy como una de las cimas más incontestables y estimulantes de la trayectoria profesional del director.
'Ali'
Dirigida con el pulso de hierro característico del gran Michael Mann, 'Ali', biografía del inolvidable Muhammad Ali, continúa resonando con fuerza como una de las mejores películas firmadas por el cineasta. Y como la interpretación más memorable, con diferencia, de toda la carrera de Will Smith. Entregado al máximo desde el primer minuto al último, se nota la pasión desbordante que sienten tanto Mann como el actor hacia la figura del legendario boxeador y su historia, manejando de forma admirable el peso de una película que, pese a ser algo irregular en su tramo central, atrapa e hipnotiza con una fuerza inagotable. Un auténtico puñetazo cinematográfico que conviene reivindicar con muchísima más insistencia a la hora de hablar de los mejores biopics estrenados en los últimos años.
'El dilema (The Insider)'
La primera y (aunque parezca increíble) única nominación al Oscar de Michael Mann como Mejor director llegó gracias a su impecable trabajo en la extraordinaria 'El dilema (The Insider)'. Un trabajo tras la cámara que, junto a las interpretaciones mayúsculas de Al Pacino y Russell Crowe, terminaba atrapando al espectador de manera más que contundente, guiándole con pulso maestro a lo largo de una trama tan apasionante como febril.
Un espectacular thriller basado en hechos reales y ambientado en el terrible mundo de la industria del tabaco donde, sin prisa pero sin pausa, se va tejiendo una red dramática de la que resulta (afortunadamente) imposible escapar. Una película que te pasa completamente por encima. Un KO de manual. Una obra maestra.
'Heat'
El tiempo, siempre sabio, ha terminado de confirmar a 'Heat' como ese clásico contemporáneo que ya se intuía desde un primer visionado. Obra maestra absoluta del cine negro más musculoso, férreo y profundamente clásico, esta historia de atracos, tiroteos, diálogos de acero y personajes memorables, protagonizada por dos inconmensurables Robert De Niro y Al Pacino, palabras mayores, supone el gran triunfo cinematográfico de un director que se muestra aquí en plenitud total de sus facultades, controlando los tiempos, la tensión, el drama y la acción de una forma magistral. Impresionante de inicio a fin.