'El precio del poder', la aclamada película de Brian de Palma protagonizada por Al Pacino, cumple 35 años este 2018, y para festejar dicho aniversario, el equipo de la película, entre los que se encontraba su director, Brian de Palma, y sus protagonistas, Al Pacino, Michelle Pfeiffer y Steven Bauer, mantuvieron un reencuentro en el Festival de cine de Tribeca en el que ofrecieron un coloquio a los asistentes a una proyección del film.
Durante el coloquio, uno de los asistentes decidió realizar una pregunta a Michelle Pfeiffer acerca de su interpretación en la película que causó bastante indignación entre los presentes, haciendo dicha pregunta referencia al peso de la actriz durante el rodaje del film. Concretamente, la persona preguntó a Pfeiffer sobre cuál era su peso exacto en el momento de realizar la película, señalando tras formular la cuestión que como padre de una hija le "preocupa la imagen corporal", ante lo que la actriz respondió lo siguiente:
"Bueno, vale. No lo sé, pero estaba interpretando a una adicta a la cocaína así que eso era parte de lo físico, que es lo que tienes que considerar", afirmó Pfeiffer. "Ya sabes, se suponía que la película iba a ser un rodaje de tres o cuatro meses. Traté de cronometrarlo para que, a medida que avanzaba la película, me volviera más y más delgada. El problema es que se alargó hasta los seis meses", añadió.
"Me moría de hambre al final. La escena, el final de la película, cuando estaba más delgada, siempre iba a hacerse la «siguiente semana» y siempre «la siguiente semana». Tuve literalmente a miembros del equipo trayéndome bocadillos porque estaban preocupados por lo delgada que me estaba volviendo. Estaba viviendo con sopa de tomate y Marlboros", matizó. Puedes ver su intervención a continuación:
Here's that appalling Michelle Pfeiffer moment in full. Her ability to gracefully shrug off such blatant condescension is truly amazing, one might even say Oscar-worthy. pic.twitter.com/cmSfVAF2tq
? Matthew Eng (@Eng_Matthew) 20 de abril de 2018
La reunión de 'El precio del poder'
Durante este especial reencuentro de 'El precio del poder', el equipo también aprovechó para rememorar diversos datos sobre esta cinta dirigida por De Palma en 1983. Al Pacino, recordó que fue él el encargado de proponer rodar este remake de la cinta de Howard Hawks de 1932 al productor Martin Bregman, señalando cómo a pesar de ello los responsables de la cinta tuvieron antes en mente a Robert De Niro que a él para interpretar el papel de Tony Montana. Por otro lado, el equipo del film fue preguntado por la sonada posibilidad de ver una nueva adaptación de la película, un hecho que Brian De Palma descartó aludiendo a que con 'El precio del poder' ya estábamos ante un remake. Te dejamos algunas fotos de este reencuentro en los siguientes tweets:
Reparto del remake de Scarface por Brian de Palma 35 años después. pic.twitter.com/zZ7CJdHepE
? Alejandro Arango (@alexarango97) 20 de abril de 2018
Pacino, DePalma, Pfeifer at Scarface Reunion https://t.co/DSE0jg5g31 pic.twitter.com/1BzgkVEBWu
? Richard A. Lertzman (@ricklertzman) 20 de abril de 2018
Michelle Pfeiffer gets asked baffling sexist question at 'Scarface' event https://t.co/2bPpcdiVyx pic.twitter.com/Ua11thQ694
? Megan Walker (@MegsTalk) 20 de abril de 2018
Curiosidades de 'El precio del poder'
Calificación contundente
Aunque su violencia a día de hoy, especialmente si la comparamos con otras propuestas de corte similar, no destaque especialmente, 'El precio del poder' fue clasificada, en un primer momento, como X, es decir, que solamente podía ser vista por personas adultas. Sin embargo, posteriormente cambió a R, calificación que reserva el visionado de una película exhibida en salas cinematográficas a los mayores de 17 años, o a los menores de esa edad que acudan acompañados de un adulto.
Luchando por Montana
Aunque ahora parezca absolutamente imposible imaginar a otro Tony Montana que no sea el de Al Pacino, el casting para escoger al protagonista de 'El precio del poder' estuvo hasta el último momento entre tres actores: Bruce Willis, Tom Cruise y el citado Pacino.
En palabras del propio director de la cinta, Brian de Palma, todos realizaron una audición brillante, pero a la hora de la verdad terminó imponiéndose la entrega y preparación previa de un Pacino que, vistos los resultados, era, efectivamente, la mejor de las opciones posibles.
Polvo blanco
Durante muchos años, tanto Al Pacino como Brian de Palma estuvieron esquivando las respuestas cada vez que les preguntaban que era exactamente lo que esnifaba el protagonista en 'El precio del poder'. Muchos rumores apuntaban a que se trataba de cocaína real, pero, como se explicaba en la edición latinoamericana del DVD de la película, el material que se usó en la cinta fue talco, algo que, por cierto, provocó numerosos problemas respiratorios al actor. No es para menos.
Cuestión de edad
La recientemente fallecida Miriam Colón aportaba unas mínimas dosis de ternura a 'El precio del poder', una película completamente alejada de esos registros más emotivos, con su interpretación de la madre de Tony Montana. Pero, lo que poca gente sabe, es que, en el momento del rodaje de la cinta, la actriz tenía solamente cuatro años más que Al Pacino. No nos salen las cuentas.
Cine y tele
Después de variar la calificación de la película durante las semanas previas a su estreno, 'El precio del poder' tuvo que sufrir nuevos cambios para ser emitida en televisión. Por supuesto, lo que se había visto en pantalla, con sus insultos y toneladas de droga y sangre, no podía aparecer en pequeña pantalla, así que sus responsables realizaron una versión modificada de la cinta en la que desaparecieron los tacos y las escenas más violentas. En definitiva, una película diferente. Y peor.
Compromiso total
Oliver Stone puede hacer películas mejores o peores, pero se entrega al cien por cien a cada proyecto. No lo dudes ni un segundo. En su labor como guionista para 'El precio del poder', claro, no se tomó un descanso, así que, para obtener el mayor realismo posible de la historia, decidió conocer en primera persona a algunos de los magnates de cocaína más importantes del mundo. Desconocemos si mantiene la amistad con ellos, pero las fiestas en aquella etapa tuvieron que ser memorables. Lástima que, probablemente, nadie se acuerde.
El fallo del pistolero
Todo en 'El precio del poder', especialmente en lo que respecta al interés de su director, Brian de Palma, parece dirigido de manera casi exclusiva a la creación del clímax final perfecto. Y cerca se queda de conseguirlo.
Sin embargo, si hay alguien que no disfrutó demasiado de este tiroteo final fue el mismísimo Al Pacino quien, a la hora de la verdad, cogió el arma por la parte del cañón, causándose así quemaduras importantes en la palma de la mano. El rodaje se tuvo que paralizar durante unos días hasta que el actor se recuperó por completo.
La ley de la calle
La ciudad de Miami funciona como un personaje más en 'El precio del poder', convirtiéndose en el hábitat perfecto para que los animales que protagonizan la historia desenfunden su rabia y bilis de forma imparable. Sin embargo, el rodaje de muchas de las escenas de la película tuvo que llevarse a cabo en Los Ángeles ya que las presiones de los gremios cubanos que vivían en Miami no fueron precisamente pequeñas. ¿Sus razones? Pensaban que la cinta los señalaba como mafiosos y narcotraficantes de manera contundente e injusta. Y algo de razón no les faltaba. Ni a la película.
Pacino
Otro tipo que entiende su oficio desde la pasión absoluta es Al Pacino, quien pasó infinitas horas conviviendo con gente de habla hispana de cara a conseguir el mayor realismo posible en su interpretación de Tony Montana, un personaje que el propio actor señaló como el mejor de todos los que ha interpretado a lo largo de su carrera. Sí, lo dice el protagonista de la trilogía de 'El Padrino'. Leer para creer.
El paso del tiempo
Aunque el tiempo ha ubicado a 'El precio del poder' en ese envidiable terreno del culto, la película protagonizada por Al Pacino fue duramente criticada tras su estreno por parte de una crítica que la señalaba, de manera contundente, como una propuesta grotesca y tosca en su fondo y forma. De hecho, Brian de Palma fue nominado al premio Razzie como peor director, una decisión tan arriesgada como cuestionable.