Por cada saga de terror pasan muchos actores que se convierten en víctimas de los sádicos asesinos o fuerzas malignas en las que se centran sus argumentos, pero pocos son los intérpretes que pueden considerarse afortunados de sobrevivir a una masacre. Marilyn Burns no sólo lo consiguió, sino que se convirtió en una de las primeras, iniciando el canon de "la chica superviviente". ¿Su pesadilla? 'La matanza de Texas' de Tobe Hooper.
Por desgracia, Burns ya no podrá emitir un grito más. TMZ informa que han hallado muerta a la actriz en su casa de Houston, Texas, el pasado 5 de agosto. Tenía 65 años y las causas de la muerte todavía no se han hecho públicas. La actriz no contó con una carrera muy prolífica, pero su papel en la cinta de terror de 1974 la ha convertido en leyenda.
Nacida en Pennsylvania, esta "reina de los gritos" se encontraba estudiando interpretación en la Universidad de Austin cuando Tobe Hooper, que trabajaba en la universidad, la vio en algunas de sus apariciones teatrales y le ofreció el papel de Sally Hardesty. A partir de ahí participó en pequeños proyectos para televisión, como 'Manson, retrato de un asesino', o películas del género como 'Asesinos del futuro' o 'Butcher Boys'. Pero su carrera siempre estuvo unida a Leatherface.
Tobe Hooper volvió a contar con ella en 'Trampa mortal'. Ella regresaría a la saga que le dio la fama en 'La matanza de Texas: La nueva generación', estrenada en 1994, y realizaría uno de esos cameos que dejan huella en 'La matanza de Texas 3D', estrenada en 2013. Su último papel tuvo lugar en 'Sacrament', estrenada en Estados Unidos en junio. Marilyn Burns descansa ya en un lugar donde ningún asesino en serie podrá alcanzarla.