La actriz y cantante Doris Day ha fallecido el lunes 13 de mayo a la edad de 97 años. Su vida, ligada desde sus inicios a la música, el baile y el cine, sirve como vivo ejemplo de una de las épocas más doradas de la historia del cine: el Hollywood Clásico.
¿Has tarareado alguna vez aquella canción que dice: "¿Qué será... será? Whatever will be..."? Se trataba de Doris Day en el clásico de Hitchcock 'El hombre que sabía demasiado', pero su trabajo no se limita a unas pocas películas. Si existe una palabra para definir su carrera, y puestos a repetirnos es: clásico.
'Quiéreme o déjame' de Charles Vidor, 'Confidencias de medianoche' de Michael Gordon o 'Pijama para dos' de Delbert Mann son algunos de sus títulos más recordados, por los que pasó a la historia del cine sin todo el éxito que muchas veces quiso. Su única nominación al premio Oscar a mejor actriz fue por 'Confidencias a medianoche' y, sin embargo, no pudo hacerse con la estatuilla.
Sacudida siempre por los rumores y la prensa por sus relaciones con Frank Sinatra, con el cual tuvo un divorcio pronunciado y con el músico George Weidler, Doris se fue retirando poco a poco del cine para dedicarse a la televisión y a su verdadera pasión desde pequeña: la música.
Una mujer polifacética
Nacida en una familia de músicos, su padre siempre la animó a tomar clases de baile y canto, las cuales la pequeña adoraba. Cuando llegó a su adolescencia, decidió adentrarse en un camino más profesional dentro de la música y cambió su nombre de Doris Mary Ann von Kappelhoff a Doris Day. Durante su juventud, compuso varios discos que tuvieron gran éxito y la canción Sentimental Journey elevó bastante su popularidad por su discurso político sobre la guerra, así como sus dos primeros matrimonios, el más sonado junto a Sinatra.
La suerte llamó a su puerta cuando tenía 25 años, cuando fue seleccionada para debutar como actriz en 'Romance en alta mar' de Michael Curtiz, después le siguió el contrato con Warner Brothers siempre bajo la atenta mirada de su tercer marido Marty Melcher, quien también frustró algunas de sus oportunidades como actriz. Melcher moriría en 1968, y desde ese momento, abandonó el cine con su última película: 'El novio de mamá', de Howard Morris. A partir de ahí, pasaría a otros proyectos televisivos hasta conseguir su propio programa: 'The Doris Day Show', una sitcom popular que se estrenó en la cadena CBS.
Desde los años noventa, Doris empezó a tener menos que ver con el cine y la televisión y siguió produciendo musica en solitario, apareciendo cada vez menos en público. Su última aparición se produjo en 2014, cuando cumplió 92 años y decidió festejarlo por todo lo grande con un evento reivindicativo. Los años siguientes vivió cómodamente hasta el día de su muerte.
