La gran noche del cine no sólo quedó empañada por una tediosa gala, sino que también porque nos ha dejado Gary Winick, director de 'Cartas a Julieta'.
Winick llevaba tiempo luchando contra un tumor cerebral que le ganó la batalla el pasado domingo en Nueva York durante la noche de los Oscar.
Aunque sus trabajos más conocidos están en el terreno romántico, el cineasta será recordado por su pasión por el cine independiente como fundador de la productora InDigEnt (Independent Digital Entertainment). En 2002 se llevó el premio al mejor director en el Festival de Sundance por 'Tadpole', la historia de un joven de 15 años que se enamora de su madrastra.
Gran amigo y mentor
Winick pasa a mejor vida a falta de un mes para cumplir los 50. La enfermedad le fue diagnosticada en noviembre de 2008, pero eso no impidió que el año siguiente se trasladara a Italia para dirigir a Amanda Seyfried en su último largometraje.
"Tuvo más buenos amigos que nadie que conozca", afirmó Mark Ross, íntimo del cineasta, tras su muerte. Las primeras reacciones no se han hecho esperar, entre ellas está la de Jennifer Garner, a la que dirigió en 'El sueño de mi vida'. La actriz mantenía una estrecha relación con Winick tras su colaboración y ambos seguían buscando un nuevo proyecto para trabajar juntos.
Niels Mueller, guionista de 'El asesinato de Richard Nixon', ha destacado la buena amistad que mantenía Winick con todos aquellos que trabajaron tanto en sus cintas como en su productora: "se preocupaba por toda la gente con la que estuvo en contacto. Deja atrás una familia real de amigos. Sus amigos eran su familia."Responsable de 'Guerra de novias' o 'La telaraña de Carlota', se llevó el premio John Cassavettes de los Independent Spirit Awards de 2003 con 'Intimidades', dirigida por Rebecca Miller, y de la que fue productor.