Actriz, fotoperiodista y política, Gina Lollobrigida, gran icono del cine italiano de los 50 y los 60, ha muerto este 16 de enero a los 95 años en una clínica en Roma, según ha informado la agencia de noticias ANSA. Protagonista de 'Salomón y la reina de Saba', 'La mujer más guapa del mundo' y 'Cuando llegue septiembre', Lollobrigida fue también uno de los rostros de la era dorada de Hollywood, ganadora del Globo de Oro y de cinco premios David de Donatello.
Lollobrigida nació el 4 de julio de 1927 en Lacio, Italia, y se trasladó con su familia a Roma tras la Segunda Guerra Mundial. En la capital empezó sus estudios en pintura y escultura y realizó varios trabajos como modelo, además de participar (y ganar) concursos de belleza. Quedó tercera en el concurso de Miss Italia 1947 que coronó a Lucia Bosè, pero fue para ella la puerta de entrada a la fama y el éxito. En esta misma época comenzó a aparecer en algunas producciones cinematográficas como 'Águila negra', 'El elixir de amor' o 'Il segreto di Don Giovanni', pero el éxito llegaría pronto con 'Pan, amor y fantasía' de Luigi Comencini, que protagonizó junto a Vittorio De Sica; o 'Fanfan la Tulipe' de Christian-Jacque.
El salto a Hollywood
Tras verla en algunos papeles, en 1950 Howard Hughes intentó que Lollobrigida firmase un contrato de siete años para hacer 3 películas anuales con RKO Pictures, pero aunque llegó a volar hasta allí, finalmente rechazó abandonar Europa y volvió a casa. Como Lollobrigida incumplió los términos del contrato en al último momento, Hughes impidió que pudiese trabajar en Estados Unidos, pero sí que podía rodar películas americanas en suelo italiano. Su debut internacional llegó de manos de John Huston con 'La burla del diablo' en 1953, donde compartió cartel con Humphrey Bogart y Jennifer Jones.
La década de los 50 fue una absoluta efervescencia en su carrera y empezó a alternar trabajos entre Italia y América con títulos como 'Espadas cruzadas' con Errol Flynn, 'La romana' de Luigi Zampa, 'Pan, amor y celos' y 'La mujer más guapa del mundo'. En 1956 protagonizó 'Trapecio' con Burt Lancaster y Tony Curtis y ese mismo año se convirtió en la Esmeralda de 'Notre-Dame de París' con Anthony Quinn como Quasimodo. En España rodaría la accidentada, aunque gran éxito de taquilla, 'Salomón y la reina de Saba' de King Vidor, y cerró la década con 'Cuando hierve la sangre' codo con codo con Frank Sinatra.
Los 60 tampoco fueron precisamente aburridos para Lollobrigida, que apareció en títulos como 'Cuando llegue septiembre', 'Pensión a la italiana', 'Habitación para dos', 'Hotel Paraíso' y 'Cervantes', esta dirigida por Vincent Sherman con Paco Rabal y Fernando Rey. La vorágine finalizó en 1972.
Desaparecida de la gran y la pequeña pantalla durante 12 años, Lollobrigida regresó a la televisión en 'Falcon Crest', en un papel que estaba destinado a Sophia Loren y que a pesar de promocionarse a bombo y platillo, solo se mantuvo 5 episodios. Después la veríamos en 'Engaños', un par de capítulos de 'Vacaciones en el mar' y en la miniserie 'La Romana'.
Como curiosidad, en 1968 protagonizó 'Buona Sera, Señora Campbell', la película que inspiraría el musical 'Mamma Mia!', y por este trabajo ganó su tercer David di Donatello. No fue nunca nominada al Oscar, pero sí que entregó este galardón a la mejor dirección a Billy Wilder por 'El apartamento' en la 33ª edición. Tiene su estrella en el paseo de la fama de Hollywood desde 2018.
Sus otros trabajos
En los 70 su carrera como actriz se ralentizó y comenzó entonces a ejercer de fotoperiodista. Retrató a personalidades como Paul Newman, David Cassidy, Audrey Hepburn, Ella Fitzgerald y Salvador Dalí; entrevistó a Fidel Castro, lanzó un libro y continuó haciendo escultura. En 1999 hizo su incursión en el mundo de la política presentándose al Parlamento Europeo con los Demócratas de Romano Prodi. Aunque aquello no salió, en 2022, ya con 95 años, intentó ganar un escaño en el Senado, pero su partido no consiguió los votos necesarios.